La empleada movía su cabeza de un lado al otro, sus ojos estaban llenos de terror y acariciaba su vientre con fuerza. Aisha al ver la reacción sonrió disimuladamente y también Alejandro.— Espero que estés contenta, has destrozado a una familia.En el momento que Aisha se iba a ir, la empleada la detuvo con un llanto desgarrador, ella abrazó su vientre y se arrodilló delante de la mujer.— Se lo suplico, no me quite a mi bebé — ella juntó sus manos a modo de súplica — no quiero que lo hagan. Jamás me acosté con su esposo y esta criatura no es de él sino de la persona que me pidió que hiciera esto.— ¿Quién te lo pidió? ¿Acaso fue Mel Ortega? — ella negó — ¿Quién fue entonces?— Aryeh Lancaster — Aisha se quedó helada — fue él, quería arruinar la relación que tenía con su esposo entonces me utilizó a mí y a mi bebé que de paso es su hijo.— Espera un momento — Aisha la tomó de los brazos y la levantó — no te arrodilles, lo que hicimos fue para sacarte la verdad porque sabía bien que mi
La sala de operaciones estaba llena de tensión y concentración. Mientras los médicos y especialistas trabajaban arduamente para salvar la vida de Christopher, María permanecía en un balcón alto desde donde podía observar todo lo que estaba sucediendo.Desde su posición elevada, María observó a Aisha, la experta cardióloga, delicadamente reparando el corazón de Christopher junto a un equipo de cirujanos. Las manos de Aisha se movían con destreza, mientras todos los demás especialistas se concentraban en curar anónimamente las múltiples heridas de Christopher.— ¡Necesitamos más pinzas! Rápido, el corazón está colapsando.— Aquí están, toma.— ¡Vamos, todos trabajen en equipo! No podemos perderlo.— ¡Por favor, por favor, Christopher, aguanta! — María suplicaba desde arriba.— ¡La herida en su cabeza está controlada! Siguientes pasos, cerrar las demás heridas.— Vamos, corazón, aguanta. Christopher necesita que vuelvas a latir fuerte — Aisha estaba enfocada en reparar las heridas — no
— Muy bien, Ana se quedará aquí si es lo que quiere. En caso de que usted esté dispuesto a llevársela y ella quiera irse, no nos vamos a oponer.— Claro que vendrá conmigo — el señor Lancaster la miró fijamente — ¿Verdad? Obviamente ya no será en calidad de empleada sino como la madre de mis nietos.— ¿Y mi mamá? — Ella también dejará de trabajar, pienso acogerlas a las dos como mi nuera y como mi consuegra. Sé que eres una buena muchacha, Ana.Ana preparó sus cosas con ayuda de Aisha y se fue directo a la casa del señor Lancaster. — Bueno, ahora solo falta que Christopher pueda despertar y decir quién le dió semejante golpiza.— Amor, no quiero que te estés estresando por eso. Vamos a descansar que hoy fue un día lleno de emociones.Aisha y Alejandro se fueron a su cuarto, ella estaba tan cansada que bastó con el hecho que su cabeza tocó la almohada para dormirse al instante.— Buenas noches, mi amor — Alejandro la besó — que descanses.Aisha al día siguiente se levantó bastante te
— Necesito que tengas paciencia, hablaré una vez que la policía venga aquí. Mientras tanto ven a acompañarme que todo esto se va a poner color de hormiga.Aisha llegó a la sala de urgencias y miró a Aryeh haciendo planes con un arquitecto, él sonrió con total victoria en el momento que vió la mirada triste de la directora de uno de los hospitales más prestigiosos del país.— Te agradezco por haberme dado el hospital a tan buen precio. No todo mundo corre con tanta suerte.— ¡Seguridad! — los guardias llegaron — quiero que detengan a este hombre, él solamente está alucinando y dice un poco de incoherencias.— ¡No se atrevan! — Aryeh miró que los guardias se acercaban y les mostró el documento de compra-venta — soy el nuevo dueño del hospital y si me tocan se van a meter en serios problemas.— No le hagan caso — Aisha miró con confianza a Aryeh — escucha, grandísimo loco. Ese sello tiene ciertas limitaciones para tu información, el documento que tienes en la mano te digo que como mucho
Alejandro extendió su mano hacia Aisha y ella la tomó, uniendo sus fuerzas en medio de la tragedia. Se abrazaron con fuerza, y ella se dejó llevar por la seguridad que encontraba en los brazos de su esposo. Las lágrimas caen en cascada, liberando una tormenta de emociones que la han abrumado.Aisha, afectada por la magnitud de la situación, siente cómo el mundo a su alrededor se desvanece. Sus piernas flaquean y, finalmente, cae en un desmayo. Alejandro la sostuvo con cuidado, procurando no hacerle daño, y la llevó a una habitación cercana.Una vez que están en la habitación, María verifica que Aisha esté bien y miró como Alejandro la recostó con delicadeza en la cama. Él la observaba con amor y preocupación, su corazón se encontraba partido por el sufrimiento que veía en su rostro.— Ella se encuentra bien — María se quitó el estetoscopio de sus oídos — también la bebé.— Gracias, María.Alejandro con movimientos suaves y precisos, limpió la sangre de las manos de Aisha, procurando n
Alejandro se acercó a Aisha, su expresión era seria y determinada.— Aisha, iré a la comisaría. Esto es crucial. Necesito que me des el alhajero para llevarlo a la comisaría.— Está bien — Aisha asintió, sosteniendo el alhajero cerca de su corazón y luego se lo dió a su marido — por favor, asegúrate de que sepan todo lo que encontramos y capturen a mi tío.— No te preocupes, lo haré. Confío en que esto nos va a acercar al paradero de Antonio.Mientras se dirigía hacia la puerta, Alejandro se detuvo junto a su nana, quien observaba la escena con preocupación.— Nana, estoy contando contigo para cuidar de Aisha. Este es un momento difícil para ella.— No te preocupes, estaré aquí para ella.Alejandro se sintió agradecido y se marchó con paso decidido. Aisha y la nana quedaron solas en la sala, el silencio llenando el espacio.— Estoy aquí para lo que necesites, querida.Aisha le dedicó una pequeña sonrisa, agradecida por la presencia reconfortante de la nana.— Gracias, nana. Significa
La habitación estaba cargada de tensión mientras el señor y la señora Lancaster se enfrentaban a la cruda realidad. El señor Lancaster, con la mirada cansada y preocupada, se dirigió a su esposa con un tono serio.— Caroline, necesito que entiendas la magnitud de la situación. Nuestro negocio estuvo a punto de irse a la bancarrota hace varios años, La señora Lancaster lo miró, incredulidad reflejada en sus ojos y se mostraba completamente atónita, asimilando la noticia. La realidad de la situación se cernía sobre ella, pesada y desalentadora.— ¿Qué estás diciendo, Robert? ¿Cómo es posible?— Isabella Delacroix fue quien salvó todo nuestro imperio. Su inversión fue lo que mantuvo a flote la empresa cuando estábamos al borde del abismo.— No puedo creerlo... No tenía idea de que estábamos en una situación tan precaria.— Isabella ha sido una aliada invaluable para nosotros. Pero ahora, al retirar su inversión, todo se está yendo hacia abajo.La señora Lancaster se llevó una mano a la
Al finalizar, Aisha se quedó un momento más junto a la tumba, perdida en sus pensamientos. Sabía que Mel estaba en un lugar de paz ahora, lejos del sufrimiento que había marcado sus últimos días. Agradeció en silencio por los momentos compartidos y prometió honrar su legado. De regreso a la casa, Aisha observó una última vez el árbol de cerezo en flor. Era un recordatorio de la belleza efímera de la vida y la fortaleza que Mel había demostrado hasta el final. Con el corazón lleno de gratitud y amor, Aisha se alejó, llevando consigo los recuerdos y el espíritu valiente de su prima. — Aisha — Alejandro estaba detrás de ella — ¿Cómo te sientes cariño? No fue necesario que Aisha hablará, una lágrima se deslizó por su mejilla. Alejandro entendió muy bien lo que ella quería decir, así que decidió llevársela de ahí cuanto antes. — Vamos a casa, todo esto va a pasar — él la cargó entre sus brazos — si quieres llorar, hazlo, solo que no sea por mucho tiempo. Aisha debido al cansancio y a