~~~Noah.No pude pegar los ojos en toda la noche.Una de las razones fue el sentirme tan cerca de mi Adele, después de todos estos días, que me han resultado una eternidad.Pero, la razón principal tenía que ver con que tuve que reprimirme, para no salir como un desesperado a devolverme a su habitación, en donde no pretendía salir, aunque fuera para quedarme a su lado y contemplarla toda la noche.Sí, sé todo lo masoquista que suena y, sin embargo, es menos tortuoso que saberme a unas cuantas puertas de la suya, sin poder acercarme.Así de patético debe ser la situación tan tensa en la que hemos caído Adele y yo o, peor todavía, una circunstancia en la que he hecho que caigamos, todo porque me pareció una gran idea el encerrar a la persona que más amo en este mundo y a la que, como bien me dijo anoche, juré que protegería y, en cambio, me he encargado de reprimir, como si fuera un objeto y no una persona.Es por eso que he decidido ir a correr un rato, a ver si despejo mi mente, una
~~~Adele.Las palabras de uno de los ancianos, al verme en los jardines de la casa de la manada me han dejado desconcertada, pero sobre todo, incrédula ante sus palabras, algo que en serio me dan muchas ganas de reírme.Y sé que no ganaré nada con eso, así que trato de contenerme y tratar de seguirle el juego, aunque debo reconocer que no puedo fingir el ser tan hipócrita.― ¿Espiar, honorable? ―le digo de lo más inocente y él resopla por la nariz―le recuerdo que si ese fuera mi deseo, usted no sé hubiera dado cuenta de que estaba en este sitio, puesto a que soy de sangre alfa y puedo andar con el mayor sigilo―le indico y él se encuentra más que molesto.―Pues, no encuentro otra razón por la cual usted se encuentre detrás de un matorral a hurtadillas―señala con una ceja levantada―un comportamiento más que despreciable y poco digno de una pretendiente a ser la alfa de la manada―me asegura, pero yo estoy tratando de tranquilizarme y no contestarle como se merece.―De seguro que lo enco
~~~Adele.No puedo evitarlo.Amo a Noah, más allá de mí y es por eso por lo que siempre estaré disponible para él cada vez que quiera tomar mi mano para besarla, porque así de masoquista es mi amor.Y, sin embargo, debo recordarme que más me debo amar a mí misma, y que no puedo sucumbir en sus brazos cada vez que él quiera.O que pretenda que con dos besos ya me tendrá de vuelta en su cama.No, debo tener un poco más de fuerza de voluntad, entender que ni aunque me jure por la diosa que no lo volverá a hacer, debo volver con él.No, va a tener que hacer algo más, porque ya me lo ha prometido y ya ha faltado a su palabra y no pretendo que me vuelva a mentir en mi cara, aunque él piense que lo hace por un bien mayor.Como si yo no fuera una persona competente para tomar decisiones y es por ese motivo que me debe encerrar o, simplemente, someterme.No soy un hijo rebelde.Soy su pareja destinada, su Luna, a la que prometió amar y respetar.Y me mantendré firme en esto, porque prefiero q
~~~Noah.Las palabras de Lorena me dejan frío.“¡Ja!”, se burla mi lobo de mí, como si él no tuviera el mismo problema, “has venido por una solución y te has encontrado con una pared tan alta, que el vértigo te está consumiendo”, se mofa y yo lo mataría, de no ser porque tiene toda la razón.―Ella no volverá a mí, si no demuestro que he cambiado―le digo con pesar―un cambio que no sé cómo demostrar, si me permite el juego de palabras―le indico y ella asienta con la cabeza.―Adele ahora es una alfa, una a mujer a su misma altura, con todos los privilegios y responsabilidades que usted mismo posee―me señala con una sonrisa, una que va entre la comprensión y la ironía, si es que uno se fija bien―pero, lo más importante, es una mujer que hasta hace poco tenía una vida totalmente diferente, una que había elegido pasar con usted por voluntad propia―me hace notar y yo respiro profundo.Porque sus palabras parecen implicar otra cosa.― ¿Está insinuando que ella no debe ser la alfa de la manad
~~~Adele.Me siento tan aturdida, como si hubiera recibido un golpe en la cabeza, tan fuerte, que ahora estoy desvariando.“No puede irse a esa manada”, me dice mi loba, tratando de que me recomponga de la anonadamiento en el que estoy, “esa es una muerte segura para él”, me recuerda y yo siento cómo se me seca la garganta y me pican los ojos.―Esa es una muerte segura―repito como una descerebrada lo que mi loba acaba de decir, porque me he quedado sin palabras.Unas que ahora quieren salir y gritarle, no, suplicarle a Noah que no se vaya para ningún lado y que se quede o, mucho peor, encerrarlo en su habitación, igual que lo hizo él conmigo allá en Moonlight.Y por instinto lo tomo del brazo.―No tienes nada qué hacer en esa manada, Noah―le digo con firmeza y no entiendo cómo, pero me doy cuenta de que estoy aferrada a su brazo ahora―te asesinarán en cuanto pongas un pie en esa manada―le señalo y él ahora se ríe de oreja a oreja.―Te recuerdo que ellos no pueden tocarme, si aprecian
~~~Adele.Noah me está mirando con una mezcla entre incredulidad y tristeza, como si yo lo hubiera traicionado, así que le tomo el brazo, ya que está intentando levantarse de la cama.―No te levantes todavía, por favor―le pido y él ahora tuerce una media sonrisa.―Me pides que no me vaya y, sin embargo, no quieres que estemos juntos―se ríe amargamente, algo que me desgarra el alma.Porque sí que quiero que estemos juntos.―Y es ahí en donde está el problema―le digo con algo de pesar―porque no solamente se trata de que estemos juntos y te perdone―le señalo―se trata de cómo viviremos tú y yo como pareja el resto de nuestras vidas―le señalo y él me mira y me brinda una sonrisa, como si lo que le hubiera dicho lo alegrara, en lugar de ser las palabras duras que son.―Entonces, tengo esperanza―me dice y me pasa una mano por la sien―porque tú me amas y de eso no tengo duda―señala y soy yo ahora quien coloca mi cabeza como puedo―que había matado todo el amor que sientes por mí―me indica con
~~~Punto de vista neutro.El lobo de Boris está satisfecho.Ha estado insistiéndole que se vaya de la manada híbrida desde el mismo momento en que han salido de su castillo en las montañas.Y es que, si su lobo estaba claro en una cosa era que estaba escapando de sus enemigos jurados, los Moonlight, para caer en manos de enemigos más arteros que ellos puesto a que le meterían una puñalada en la espalda con una sonrisa en sus labios.Sí, él no confiaba ni en su Luna, Freya, y en Hagler, su supuesto aliado, mucho menos.Y es que, si él hacía sus propias conclusiones, ambos eran tan ambiciosos, que de seguro ya tenían sus propios planes y él estaría de más en cualquiera de ellos.Porque era claro que ya había perdido su valor, ya no era alfa de Darkmoon, así que ya no les servía para nada.Él era descartable.Así que decidió que era mejor para él rendirse ante Noah, quien de seguro sería más benevolente que sus supuestos amigos y le daría tan solo una celda, en lugar de la muerte segura
~~~Punto de vista neutro.Si la matriarca estaba segura de una cosa era que su pareja destinada, Nolan, el anterior alfa de Moonlight, era que había muerto por causas naturales.O eso creía hasta hace un segundo, luego de que Boris se encargara de escupir todo su veneno a su cara.Porque viniendo de la boca de Boris, podía ser cierto, después de todo, si alguien sabía de las rencillas entre Boris y Nolan, esa era ella.Pero nunca hubiera pensado que Boris fuera tan cobarde, como para mandar a asesinar a su pareja, sin dar la cara para retarlo.Esto va más allá de toda la rabia que pudiera tenerle a Nolan.Y mientras pensaba todo eso, su cuerpo estaba reaccionando sin siquiera meditarlo, ya que ahora estaba delante de los barrotes que retenían a Boris, alargando sus garras, para rasgar su garganta en dos y ver cómo la sangre bañaba el piso de la mazmorra.― ¡Miserable Boris! ―grita con toda la rabia que aflora en su pecho― ¡ya verás lo que te haré, maldito! ―le espeta iracunda, mient