Ambert Tons

Aun no sale de mi cabeza lo que dijo el imbécil de Erick. Sigue tan fresco en mi memoria.

Me bajo del taxi y voy hasta la entrada de la casa de Charlotte o mejor dicho; mansión.

-Hola querida -dice su madre dándome un beso en la mejilla.-Sube que están arriba.

-Ah gracias,señora -digo sonriendo.

Llego hasta la sala de reuniones y ahí están mis amigas viendo alguna serie mientras comen tacos.

-¿Qué tal el día de trabajo? -pregunta Lukas.

-Todo bien, ¿ustedes qué tal? -pregunto dejando mi mochila en un lado.

-Pues buscando a ver donde conseguimos una fiesta que esté buena -dice Camille buscando en su celular.

-Mi cuerpo pide fiesta -dice Charlotte.

-El mío igual -digo.

Los minutos pasaron y ya eran las 8 de la noche. Decidimos quedarnos aquí, jugar y hacer algo extra. Hoy no se pueden olvidar los retos. Todos los viernes nos asignamos retos, nunca he fallado. No sé que traman pero se ríen mientras anotan sus retos para mi.

-¿Qué reto me toca? -pregunto comiendo de los doritos.

Los tres se miran y luego voltean sus hojas.

Dañar al magnate.

-Esperen, ¡¿Qué?! -pregunto confundida.

-Seducir y hacer sufrir a Erick -dice Charlotte sonriendo.

-¿Pero y eso por qué? ¿Y por qué yo? -pregunto levantando las manos.

-Eres la más sexy y guapa -dice Camille señalándome.

-Eres inteligente -dice Lukas.

-Y también ilegal -añado frustrada.

-Dentro de poco serás mayor, relájate -dice Charlotte.

-No se si recuerdas cuando en una entrevista dijo que él nunca a sufrido ni sufrirá por una mujer -dice camille.

-No vi esa entrevista -digo cogiendo un poco de nachos.

-En fin, lo que queremos es que lo utilices, no te puedes enamorar, solo hacer que se enamore y que sufra -dice Lukas.

-¿Y Yan? -pregunto sería.

-Está bien, gracias -dice Charlotte muy seria y los demás se ríen.

-Me refiero a qué pasará con él-digo dándole un golpe en la cabeza.

-Te guardaremos el secreto y lo vamos a distraer -dice Camille restándole importancia.

-Acepto el reto -digo poniendo mi mano en el centro y ellos se unen.

Esto será divertido, supongo. Sé que él perderá. ¿Quién no se enamoraría de mi?

Gracias a los ángeles que no me interesa en lo más mínimo. Así que no me enamoraré del magnate.

Seguimos compartiendo y stalkeando gente en instagram. Pasar el rato con mis amigos es bastante agradable.

Ya llegó la hora de irme a casa, debo descansar, mañana es la dichosa fiesta de Erick y debo trabajar en la mañana. Ojalá y las mugrosas ya estén durmiendo. Lukas me lleva de regreso a casa y se lo agradezco. No tengo ni una bicicleta, gracias a la imbécil de mi madrastra.

Me despido de Lukas y voy hasta mi dulce hogar. Nótese el sarcasmo.

-¿Por qué llegas a éstas horas? -pregunta mi madrastra con una bata y la cara blanca.

-¿Porque me da la gana? -digo y voy a mi habitación.

La escucho gritar y continúo escaleras arriba. Cierro con llaves y me tiro en la cama, no creo que me bañe por hoy ya, estoy exhausta.

°°°

Mi padre le da otro repaso a mi ropa y me mira con desaprobación pero le sonrío con inocencia.

-Aún no tienes 18 Ambert, eres una niña -me regaña al oído.

—Ya pronto seré mayor padre, además ¿Acaso no me queda bien el vestido? —pregunto caprichosa.

—Fenomenal —dice alguien muy cerca mi oído.

El magnate que destruiré.

💕