Danphe se miró en el espejo luego de arreglarse para ir a trabajar, estaba sonriendo como nunca antes, su semblante era uno más brillante, lucía como una mujer feliz que jamás ha tenido un trauma, después de tantos años había encontrado un hombre que la hacía sentirse mujer, amada, valorada y respetada, ella había encontrado el amor, y le gustaba lo que estaba sintiendo, era algo nuevo para ella y quería vivirlo al máximo.Bajó la mirada un momento al suelo, cuando la levantó, se topó con su reflejo, ese que siempre le recordaba el objetivo principal, y quién le impedía enamorarse mientras no cumplía con su venganza.—Terminaste cayendo como tonta — no dudó su reflejo en reclamarle molesta —¡Te advertí que no te encariñaras con él! — gritó, y Danphe levantó su rostro.—¿Cuál es el problema?—Que si te enamoras, él podría hacerte cambiar de parecer, y si interviene en los planes, no podrás ser capaz de quitarlo del medio — empuñó sus manos.—¡Sé muy bien lo que debo hacer! — levantó la
Dapnhe, dejó sobre su escritorio, la copa con vino tinto, posó sus codos sobre él, y luego entrelazó sus dedos, sin perder de vista, al hombre que es su padre. El momento de verse involucrada con él en los negocios ha llegado, incluso, tiene una trampa preparada para él, quiere hacerlo ver como un traidor ante los ojos de Emiliano, y de ser posible, como un ladrón.—Verla nuevamente me da tanta alegría, señorita — ella sintió asco en sus palabras, para Danphe era un desagrado tenerlo sentado frente a ella.—Lo mismo puedo decir — mintió.—Debo felicitarla, ha hecho un trabajo impecable con este casino, Conall jamás hubiera logrado esto.—Conall era un idiota jugando al comerciante, no tenía gustos, imaginación, y padecía de un déficit de inteligencia, no sé cómo pudo trabajar con Emiliano, supongo que la suerte estuvo en ese instante de su lado — sonrió con malicia.—Tengo entendido que fue tu esposo ¿Qué hizo de malo para que lo dejaras en la calle y hables tan mal de él? — preguntó
Danphe se detuvo en frente de la puerta del Penthouse, suspiró nerviosa por lo que pueda encontrarse dentro de su hogar, no temía que fuera algo malo, al contrario, estaba segura de que sería maravilloso lo que encontraría, sabía que él era bueno sorprendiéndola. Ingresó un código y la puerta principal se abrió, Danphe entró y miró las luces opacas, de fondo, había una música suave, el volumen era el indicado, ella caminó hasta la mesa y miró la decoración, flores en color rojo, velas aromáticas, los platos ya se encontraban en sus lugares, copas, la comida en sus bandejas, y lo único que faltaba, era la botella que Mauricio, traía en sus manos junto con una pequeña caja.—Buenas noches, hermosa dama — le dio un beso en los labios — Te esperé ansioso — le entregó el obsequio — Sé que tienes muchos, pero ninguno ha venido de mi parte — presumió, ella miró la pulsera y sonrió, era de oro con piedras de diamantes, por debajo, decía un mensaje, Mi corazón es tuyo.—¡Wow! — acarició con su
Mauricio, luego de desayunar, se marchó, Danphe, quedó en su Penthouse alistándose para salir a trabajar como de costumbre, el día de hoy, iría a su otra empresa para comprobar que todo esté en orden, aparté, se tomaría el día para agilizar el viaje de su huida, cada vez está más cerca de lograr su objetivo, y quiere tener todo preparado para cuando le toque irse lejos.Al terminar, bajó rápido hasta la sala de estar, allí, se encontró la sorpresa de ver a Marrie sentada en el sofá mirando al suelo, caminó hasta donde ella y tomó asiento a su lado para averiguar la razón de porque estaba ahí en su Penthouse, fue clara cuando le dijo que se tomará unas vacaciones y volviera en dos semanas, pero al parecer algo detuvo a Marrie.—¿Qué estás haciendo aquí? — preguntó en tono calmado.—No puedo irme, Danphe, tengo pacientes que atender — Danphe elevó su ceja y desvió la mirada.—¿Qué voy a hacer contigo, Marrie?—Dejarme en paz de una vez, planeo irme lejos, no volver nunca. Espero eso sea
—Está muerta, la mataron — dijo Jayden luego de cortar la llamada.—¿De qué me estás hablando? — preguntó Mauricio mientras se alistaba.—De Marrie, la psicóloga de Danphe, la encontraron muerta en la carretera con un disparo en la frente — Mauricio dejó de vestirse para voltear a ver a su amigo.—¿Qué?—Al parecer fue un robo, no estaba su bolso ni su auto — tomó asiento un momento mientras procesaba la información. ¿Era mucha coincidencia su muerte? No deja de preguntarse lo mismo.—Dios, no puedo creerlo — pasó su mano derecha por su rostro.—¿Crees que Danphe tuviera que ver con su muerte?—No lo sé, Marrie no había dicho nada, a menos no a nosotros.—¡Carajo! Esto se está complicando.—Demasiado.—No hemos podido identificar aún al puto Mexicano que viene a visitarla, todo concordamos que se trata de Emiliano, si al menos tuviéramos una pista de que ella trabaja para él, pero ni eso, solo son teorías que nos hacemos — Mauricio desvió la mirada, al recordar que tenía evidencia que
Mauricio no salía de su asombro, continuaba mirando a Dapnhe sin creer la verdad, se preguntaba, ¿Cómo era posible eso? ¿Cómo era posible que la dieran por muerta cuando no era cierto? Lo peor de todo para él, era el hecho de no poder preguntar, porque ellas, sentirían la interrogante de saber, como es que supo que supuestamente, había muerto.No encontraba que decir, Danphe, por su lado, sentía miedo de que él la abandonará por haberle mentido, pero Mauricio, solo volteó y la abrazó con fuerza, se sentía cabizbajo por las cosas que pudieron vivir ellas dos, en especial Danphe, la mujer que estaba robando su corazón. Infló sus mejillas y expulsó el aire para contener aquella ira y llanto, a la misma vez, jamás pensó, que un caso le pudiera afectar tanto en la vida, menos si se trataba de la mujer que debe encerrar.—Deben denunciarlo — dijo.—¡No, él debe…!—Estamos en ese proceso, pero antes debemos conseguir más evidencia, han pasado muchos años — Danphe interrumpió a su hermana par
Mauricio, miraba dormir a Danphe, profundamente, él, estaba sentado en frente de la cama con una pierna cruzada y sus dedos pegado con los de sí otra mano, pensaba en que es lo que debía hacer, por un lado, desearía apoyarla en matar a ese infeliz, él podía sentir la ira de su querida, pero por el otro lado, pensaba en su honor y su profesión, había elegido ese camino para evitar la injusticia, y ahora que está en un caso complicado duda mucho de hacerlo, pues sus sentimientos por ella son cada vez más intensos, y le parece que ya ha sufrido mucho y no quiere ser él quien la someta a otro sufrimiento más.Su plan de momento es entregar a Emiliano, lo único que necesita es la confirmación de su identidad, hablará con Jayden y le dirá que está confirmado el que ellos trabajan juntos, lo hará solo para demostrarle a su amigo lo contrario, quiere calmarlo y engañarlo ante la idea de que se está enamorando de ella, siente la necesidad de poner a salvo a Danphe y a su hermana quienes han si
—¿Feliz? — preguntó el reflejo de Danphe.—Por supuesto, me tranquiliza saber que… él me aceptó tal y como soy — Su gemela sonrío luego de hacerse a un lado, Danphe siguió mirándose en el espejo.—Me equivoqué al creer que no lo entendería, te debo una disculpa — tomó asiento en la cama agotada.—¿Estás bien? Tienes muchas ojeras y te noto cansada.—Se debe a qué anoche no dormí bien, hemos tenido muchos días fuertes y cargados de emoción — respondió.—Ya pronto acabaremos con todo esto y nos iremos lejos. Ya tengo todo planeado para acabar con mi padre de una vez, está semana caerá en nuestras manos y podremos vengarnos de todo lo que nos hizo. Estamos muy cerca, hermana, te prometo que lo castigaré por haberte causado tanto daño — acarició la mejilla de Dapnhe.—Quiero que seas cuidadosa, no confío en el camaleón, puede estar vigilándote.—Puedo asegurarte que no, matar a Marrie para él fue una maravillosa demostración.—Desde hace días tengo un mal presentimiento.—Solo estás ansio