—¿Feliz? — preguntó el reflejo de Danphe.—Por supuesto, me tranquiliza saber que… él me aceptó tal y como soy — Su gemela sonrío luego de hacerse a un lado, Danphe siguió mirándose en el espejo.—Me equivoqué al creer que no lo entendería, te debo una disculpa — tomó asiento en la cama agotada.—¿Estás bien? Tienes muchas ojeras y te noto cansada.—Se debe a qué anoche no dormí bien, hemos tenido muchos días fuertes y cargados de emoción — respondió.—Ya pronto acabaremos con todo esto y nos iremos lejos. Ya tengo todo planeado para acabar con mi padre de una vez, está semana caerá en nuestras manos y podremos vengarnos de todo lo que nos hizo. Estamos muy cerca, hermana, te prometo que lo castigaré por haberte causado tanto daño — acarició la mejilla de Dapnhe.—Quiero que seas cuidadosa, no confío en el camaleón, puede estar vigilándote.—Puedo asegurarte que no, matar a Marrie para él fue una maravillosa demostración.—Desde hace días tengo un mal presentimiento.—Solo estás ansio
Dimitri, le había conseguido las veinticuatro horas que había pedido Mauricio, en este momento, iba de camino al casino para conversar con ella y conseguir la evidencia que necesitan de una vez por todas, él espera que ella sin ningún problema le dé lo que quiere, o de lo contrario, tendrá que decirle toda la verdad, creyendo que de esa forma si hablará, aún espera no llegar a ese extremo, sabe que si le dice quien es él en realidad, la perderá para siempre y pondrá en riego su vida.Bajó de auto en cuanto llegó al casino, subió en el ascensor para ir a la oficina de Danphe, abrió la puerta sin tocar y la encontró a ella bebiendo un poco de Vodka frente al ventanal que tiene vista a las salas del amplio casino, ella lucía calmada, estaba más tranquila y más radiante, haber dicho la verdad era algo que le sentaba muy bien.—No espera verte tan temprano — dijo ella una vez que volteó a verlo.—Tengo una duda que deseo y me aclares — ella caminó hasta él y le dio un delicado beso en sus
—Danphe ¡Danphe! — Mauricio llegó al Penthouse de ella luego de haber pasado antes por su oficina a buscarla y no hallarla.—¡Estoy en el balcón de la sala! — dijo ella en voz alta guiándolo a dónde se encontraba — Volviste rápido — inhaló el humo de su cigarrillo, él frunció su ceño al verla fumar, era la primera vez que lo veía en ella.—¿Fumas? — preguntó desconcertado.—Cuando estoy alterada y me llegan noticias malas, lo hago, es… un medio para relajarme un poco y no perder los estribos — dio otro jalón a su cigarro — ¿Te molesta que fume? — uso un tono sarcástico.—¿Pasa algo? Siento que tu molestia… es conmigo — ella alzó su mano derecha indicándole que todo estaba bien entre ellos.—No, ¿Hablaremos de tu verdad? — terminó su cigarrillo y lo tiró por el balcón.—¿Por qué lo tiraste a la calle?—¿Algún problema? — se acercó a él y expulsó el humo en su rostro.—No me gusta el comportamiento que está tomando.—Solo estoy molesta, muy molesta, pero evitaré mostrarlo — le dio un be
—Ven aquí, recuéstate en mis piernas y hablemos — habló su hermana Dapnhe — No has parado de llorar. —Es difícil aceptar que el hombre que amo me traicionó, no me lo esperaba, Dapnhe, no de él — limpió su rostro. —También estoy molesta y decepcionada, empezaba… a tenerle más confianza, pero nos engañó a las dos, y muy bien que lo hizo — desvío la mirada. —No entiendo por qué volvió, lo peor de todo, porque decirme la verdad cuando sabía lo que pasaría. —No creo que mintiera sobre sus sentimientos, de lo contrario no hubiera ido a decirte. —Aun cuando me ame, no pienso perdonarlo, no podría hacerlo. Rompió la confianza. —¿Vas a matarlo? ¿Crees que puedes hacerlo? —Si mate a Marrie, puedo hacer lo mismo con él. —Son sentimientos diferentes. —Lo sé, pero no puedo perdonarlo, ni menos irme y dejarlo libre como si nada. Él estaba dispuesto a entregarme a las autoridades. —También estaba dispuesto a irse. —¿Le cree? —Solo creo que… él en verdad te ama y quiere salvarte. —Me ext
Danphe despierta al día siguiente, mira su celular y observa un mensaje de su hermana dónde le decía que ya había encontrado los hombres que la cuidarían, incluso que ya debían estar en la casa brindando protección. El mensaje le resultó muy extraño debido a que solo habla de una persona, aparte de que le dio a entender que no se encontraba ahí con ella. Se levantó de la cama y fue a la otra habitación en busca de su hermana, pero como ya era de esperarse, no la halló, bajó hasta la sala donde comenzó a buscar, gritó su nombre llamándola para saber dónde podría estar, marco al número y daba al buzón, estaba ya perdiendo la paciencia ante la idea de no saber de ella.Bajó corriendo hasta el sótano y allí miró a Mauricio de pies mirando una hoja en sus manos, se acercó a pasos lentos y se sostuvo de las rejas.—¿Dónde está? — preguntó con nervios.—Haciendo la peor locura — le tendió la carta — Regresó al Penthouse para qué la capturan, la policía no tiene idea de que tú hermana vive, j
—¿Dónde andabas? — Indagó Jayden al ver entrar a Mauricio en la comisaría.—Lo siento, bebí mucho anoche y wow, no tenía fuerzas para despertar temprano…—¡Hoy fue el arresto más importante de muestras vidas y tú no respondías nuestras llamadas! — apareció su jefe — ¿Dónde mierdas andabas?—Ya lo dije, y bajen el tono de voz, me duele la puta cabeza — fingió dolor.—Ven, hablemos — lo llamó aparte Jayden — ¿Fuiste a verla ayer? ¿Cierto?—No, ¿Por qué debería ir a ver esa perra?—No lo sé, tú dímelo. Estás enamorado de ella.—Si tan enamorado estoy, ¿Cómo es que pudiera atraparla? — elevó su ceja.—Hay algo extraño en todo esto, ella no opuso resistencia.—¿Y quién carajos opondrá resistencia cuando se haya rodeado de policías?—No lo sé, pero sé que no estaba bebiendo.—Estás paranoico — tropezó su hombro en cuanto pasó por su lado.—Dimitri también sospecha lo mismo que yo, tuve que contarle que te habías enamorado de ella.—¿Es que has perdido la cabeza? ¡No estoy enamorado de ella!
Danphe, fumaba un cigarro mientras miraba hacia el jardín, la casa donde se encontraba estaba alejada de la ciudad y a nombre de otra mujer, nombre que Danphe comenzaría a adoptar para cubrir sus pasos. No era conveniente andar por las calles usando su mismo nombre cuando ya estaba en boca de todos, empezaría a hacer cambios en ella para pasar desapercibida, cambiaría el color de su cabello, sus lentes de contactos, su vestimenta, e incluso dejaría de usar maquillaje para evitar ser reconocida. No iba a permitir que el sacrificio de su hermana fuera en vano, admitía saber que Mauricio tenía razón, por lo que haría un último trabajo y se marcharía para siempre lejos de todos, incluyendo lejos del hombre que amaba.Han pasado dos días desde que detuvieron a Dapnhe, ella no ha tenido noticias de Mauricio ni de su padre, los hombres que su hermana contrato han movido cielo y tierra buscándolo hasta por debajo de las piedras, pero el sujeto supo esconderse muy bien, aún sigue sin tener id
Mauricio, al cabo de dos horas, subió a la Habitación de Danphe, entró y caminó hasta el baño donde la encontró metida en la tina, fumando un cigarrillo y con un vaso de whisky en manos. Quitó su ropa y entró con ella al agua, ambos se miraron por unos largos minutos sin cruzar palabras, sus miradas eran las que hablaban, se decían y se gritaban tan cosas, se suplicaban las unas con las otras abrazarse y no soltarse nunca. Danphe sin disimular dejaba que sus lágrimas humedecieran sus mejillas, no le interesaba si daba lástima o no, él por su lado limpiaba las suyas, le estaba doliendo la indiferencia de ella. Se sentía mal por las cosas que le dijo hace un rato atrás, el imaginarse que ella pudo haberse acostado con otro lo cegaba de celos, pero ahora que está un poco más calmado se da cuenta de que la hirió, la hizo sentir sucia y cochina.—Ya tu padre está… en el sótano — le dio la noticia.—Me da tanto gusto que así sea — el silencio entre ambos se rompe.—Aún estás a tiempo — insi