JAVIERMe ganó la rabia, verla en brazos de ese imbécil, no debí decirle nada, sé muy bien por qué se supone que nos vamos a casar y me lo tuvo que recordar ¡Maldita sea Regina! Esa mujer me gusta, me trae loco e imaginar que alguien más la toque me trastorna, ni siquiera con Kasandra fui posesivo y celoso, pero con ella es diferente y no puedo exigirle nada ahora, casados será diferente, no permitiré que ande por ahí como si yo no existiera aunque sea un matrimonio de papel solamente no voy a ser el hazmerreír de toda la ciudad.Lo que restaba de la noche nos la pasamos todos los chicos en una habitación del hotel y ellas en otra, han tratado de sacarme como sea acerca de mi futura esposa, pero he sido una tumba, si digo de más creo que terminaré siendo plantado en el atar.— Ya, pues, Javier, suelta, ¿Quién es? — Está loco si piensa que arruinare el hecho de ver sus caras cuando sepan quién es, así que Richard comete las uñas porque no te lo diré, cuando la vea diciendo si acepto es
SEMANAS DESPUÉSREGINAFaltan dos días para que llegue en gran día, ja, ja, ja, ¡estoy tan feliz! Si claro, cómo no, aunque me lo repita mil veces por hora, no término jamás de acostumbrarme al hecho de que ósea, ¿me voy a casar? Las chicas trataron de hacer una intervención, pero no pudieron conmigo ¿Acaso no recuerdan que las intervenciones las hago yo? Por otro lado, estoy que quiero ahorcar a Javier, me enteré por las chicas que Javier anda abriendo la boca sobre la boda gracias a Dios, que tan idiota no es que no dio más detalles, después andan diciendo que las mujeres somos chismosas.Estoy en el centro comercial Doña Gloria, me está acompañando junto con las gemelas para comprar el dichoso vestido.—Cariño, ¿Qué tipo de vestido vamos a buscar? —Ellas están tan emocionadas, en cambio, yo.—Si Regina, ¿Qué tipo de vestido? Esos escotados, bien ajustados en la cintura como le dicen “Corte Sirena” O esos bien pomposos leímos en una revista que se llama como era Angeli.— A si corte
REGINA—Acepto— y cavé mi propia tumba, nada puedo cambiar ya todo está hecho, se supone que las novias deberían llorar de alegría de emoción, yo solo quiero llorar de tristeza, de desilusión de haberme puesto la soga al cuello yo solita, mientras Ethan sujeta a Casidy que quiere gritar como en esas bodas de película y el padre grita hay alguien que se oponga a esta Unión estoy segura de que ella lo haría, Katherine está sentada como en trance tanto Mary como Mery me están observando como si fuera un bicho raro al igual que todos los chicos, la familia de Javier, en cambio, están feliz de la vida y. Antes que empiecen con los abrazos se supo que debemos sellar. El trato. Cuándo el cavernícola me da un casto beso, pero como observo a su familia expectante se supone que nos casamos locamente enamorados y lo sujeto de los hombros y pego mi boca más con la suya, sé que lo sorprendí, pero inmediatamente toma posesión de mi cintura y me pega a su pecho profundizando el beso y sentimos caer
CASIDY¡Juro por lo que más quiero que nada en este mundo me preparaba para algo así, ¿Regina y Javier?! ¡¿Un hijo?! Ósea ¿Ellos? Sé que he estado ausente un tiempo, pero porque era realmente necesario, pero un hijo además se acaba de casar ¿Por qué así?, ¿Por qué ocultar todo como lo han hecho? ¿Qué ganaban?, no puedo ni verla a la cara, estoy confundida ósea, no es como que mi vecina se casa y no dijo nada, se trata de ella de mi prácticamente hermana ¿Por qué ocultarme las cosas de esta manera y esperar el día de hoy recién decírmelo?—Amiga, te juro que no sabía cómo decirle a ninguna de ustedes, Katherine, después de todo lo que estás pasando, ¿tú crees que podría hablarte de ese tipo de cosas?, Mery tú sospechabas, pero juro que tenía miedo, Mary te la pasabas en la empresa o con Matías.—Javier, déjanos a solas unos momentos. —Es lo único que atino a decir.—No lo haré —No entiende o ¿Qué?—Es solo unos momentos, necesitamos hablar entre nosotras. —Trato de decirle lo más calma
REGINA—No, Javier no quiero.—Pero ¿Por qué?—Estás loco si piensas que aceptaré algo como eso realmente como se te ocurre.—Pero me gusta.—Pero ese color es horrible, si también viviré aquí no puedes ponerle ese color a la habitación.No puedo creer que han pasado dos semanas desde que nos casamos y sigamos sin ponernos de acuerdo en un maldito color, como se le ocurre un azul acero si la habitación es de los dos, siempre peleamos por pequeñeces, que el color de la habitación, que la marca de alimentos, que donde comprarlos, que si como mucha chatarra ¡Por Dios se supone que estoy embarazada y las embarazadas comen lo que les da la gana!Lo veo mover algunos muebles mientras recuerdo nuestra visita de la semana pasada a nuestra doctora, digo nuestra porque así le dice él.—Doctora ¿Todo está bien? ¿Cómo está nuestro bebé? —Le dice le muy emocionado, algo que no llega a mí.—Óiganlo por ustedes mismos.— ¡No! —Ambos me miran extrañados, pero, aunque nadie me entienda, no quiero oí
REGINANo puede ser verdad, soy una estúpida había olvidado la caja, Es increíble que haya tenido la cabeza, por otro lado, para no recordarla, yo que de alguna manera la mantengo para recordar mi pasado y lo que hice al final es olvidar que él me seguirá a donde sea como ahora.—No te quedes callada y dime de una vez, ¿qué significa esto que tengo acá? Y no te atrevas a negarlo porque esta dirección es un recinto penitenciario ¡Mierda Regina ¿En qué estás metida?Juro que tengo miedo, mucho miedo, en mi interior siento terror que alguien más lo sepa. Nadie debe saberlo, no quiero que nadie lo sepa, no puedo permitirlo.—No sé quién te ha autorizado a husmear en pertenencias ajenas dame eso —Trato de arrebatárselo, pero aprovecha tu 1.90 y alza la caja muy, pero muy muy por encima de mí, parezco estúpida saltando como canguro, es que no puedo dejar que sigua revisando.—No pequeño demonio, ahora me explicas todo eso ¿Por qué ese tipo te está enviando cartas amenazadoras?No puedo deci
REGINAEstoy en el centro comercial, ahora trabajo menos horas y delego más es que era mucha presión y ella lo entendió además que entre todas me tratan como si me fuera a romper, estoy viendo algunas cosas es que mi ropa ya no me queda tengo un embarazo de casi cuatro meses y estoy en esa como dice Doña Gloria que siento que nada me sienta bien, que si me queda muy apretado o me queda muy suelto estoy tan distraída cuando escuchó una voz que hace que mi espina dorsal se tense hasta lo más profundo juro que si hubiera sabido que me la encontraría ni me levantó de la cama no por miedo, sino por pereza tener que hablar con ella.—Te estoy hablando perra que aparte de idiota sorda.Esta no sabe con quién se está metiendo, creo que olvido que le pasó la última vez que nos vimos, esta viene por su vuelto.—Si te oí en realidad, pero como dijiste perra pensé que le hablabas al espejo —Y la miró de arriba abajo, ojalá entienda la indirecta bien directa, aunque sabiendo lo desvergonzada que e
JAVIERLa veo desesperada, no entiendo que le sucede, está temblando, sus labios tiemblan como si le costará decir lo que quiere tratar de pronunciar.—¿Por qué estás así? — Es lo único que mi mente puede ayudarme articular, estoy asustado.—Es él, él regresó, no dejes que me encuentre Javier, no permitas que sepa dónde estoy— Y se apega a mi pecho asustado sin dejar de temblar, decido subir y traerle algo de ropa, voy lo más rápido que pueda y cuando regreso la encuentro dormida y se ha quitado la ropa y tapado con saco mío que está cerca, puedo ver por fin su ropa interior y su ligeramente abultado vientre, tengo que quitar esos pensamientos de mi mente, no puedo aprovecharme del estado en que se encuentra sería un completo cobarde.He puesto todo de mi parte para poder ponerle otra ropa, pero es inevitable que mi cuerpo reaccione ¡Por Dios! La tengo tan cerca de mí he rosado con las yemas de mis manos su piel, que es tan delicada y suave la tengo en mi regazo mientras sigo secando