Al otro día estaba sentada en una banca esperando por unas compañeras para entrar a clases, cuando pasó Teryl, llevaba al zarcillo, (así voy a decirle a la chica que no se le despega), colgado del brazo, pero aún así se detuvo a saludarme y me preguntó si había llegado bien.Yo casi que hiperventilo
Al otro día, al ser sábado, papá y mamá siempre hacían planes para disfrutar en familia, yo tardaba en salir porque no sabía qué hacer con mi cabello, hasta que mi nana entró y lo niveló, me coloqué un gorro tejido y me uní a mi familia para salir muy temprano porque iríamos a navegar por el río Pot
¿Han tenido la sensación de que las desgracias llegan juntas?, yo la sentí, porque apenas una semana después del entierro del abuelo Gregg, nos dieron la noticia de que los abuelos de mi padre habían sufrido un terrible accidente automovilístico, en medio de una tormenta de nieve, al salirse del cam
Lo que vino a continuación, fue como esas historias de amor en la televisión, hablamos mucho, tanto que se me olvidó que había ido a la oficina porque tenía documentos que aprobar con urgencia, mi secretaria me volvió a la realidad laboral y, por unos instantes me convertí en la empresaria eficiente
–Señor Hogdman, hoy le dije a Erin que quería ir al grano con lo que tenía que decirle, ahora necesito hablarle, usted me dirá si vamos a un lugar más privado o si puedo expresarme aquí. –Aquí está bien –respondió mi tío Douglas y nadie se negó.Yo miré a Teryl y él estaba de lo más tran
Los días siguientes a la fiesta de cumpleaños fueron frenéticos, con un gran momento muy emotivo cuando mi tío Luke mencionó la casa del abuelo Gregg, la cual había sido heredada por mi madre y que ella mantenía con el personal contratado para su cuidado, Ismael, el fiel protector de Conrad Gregg se
ZAK MITCHELL-HOGDMANDesde muy temprano mi vida se vislumbraba exitosa, estudiaba en una excelente institución educativa donde me aseguraban excelencia y calidad, aunado a mi ingenio e inteligencia, por lo tanto, la confianza era algo de lo que presumía frecuentemente.Mi madre, siempre fue motivo d
Los observé a los dos un momento y decidí dar por concluida la reunión, no habíamos ordenado nada, así que simplemente me levanté y, luego de decirle al señor Stark que lo llamaría, salí de allí.Tenía mucho en qué pensar, necesitaba también comentarle al tío Douglas que el mismo Evan Stark había mo