Enojada por las palabras de Ben, Avery le recordó: “Ben, esto es entre él y yo”.

“Cuando Tammy vino por ti y se puso a gritar como una loca, ¿tenía que decirle yo también lo mismo?”, replicó Ben.

La sangre de Avery se heló ante sus palabras mientras se congelaba en su sitio.

Ella había ido a explicarle a Elliot lo que había pasado aquel día en el hotel. Quería decírselo, ya sea si él decidía creer en ella o no, porque al menos no se arrepentiría.

Sin embargo, todo parecía tan ridículo en ese momento.

¿Cómo había podido olvidarse de Tammy?

Tammy siempre había sido tan protectora con ella y debía de haber ido donde Elliot y los demás para explicarles lo sucedido. A juzgar por su reacción en ese momento, estaba claro que ninguno de ellos confiaba en Tammy.

Si ese era el caso, no había necesidad de que ella perdiera el tiempo dando explicaciones.

“Si creen que soy la mujer del video, ¡que así sea!”, dijo ella con frialdad. “Olviden que he venido aquí”.

Tras decir eso, se dio la vu