El corazón de Avery se llenó de alegría al escuchar los gritos frustrados de Wanda.

“¿Y cómo vas a hacer eso?”, se burló ella sarcásticamente. “O estás detrás del crimen de tu hermano, o lo has consentido como mínimo. Después de todo, ¡usaste bastante del dinero que tu hermano nos robó! ¿Cómo te atreves a llamarme?”.

“¡Hiciste que mataran a mi Cassandra! ¡Ni siquiera te he hecho pagar por eso!”.

“Oh... ¿Quién más murió en tu familia? ¿Por qué mejor no me echas la culpa de todo?”, se burló Avery. “¿Crees que todavía soy la chica a la que puedes intimidar? Wanda, ¡has perdido tu última oportunidad cuando no lograste matarme hace cinco años!”.

La voz de Avery era gélida y despiadada. Sonaba completamente diferente a como lo hacía cinco años atrás.

Wanda colgó con furia. No tenía intención de dejarlo pasar y reservó un boleto de vuelta a Aryadelle inmediatamente.

…

Los titulares de las noticias de la tarde decían: [¿Industrias Tate obtendrá un impulso extra de trescientos millone