Solía pensar que la muerte sería una salida fácil para no lidiar con todos los problemas y perdidas que había experimentado a tan corta edad, que tal vez un salto determinaría que descansaría en paz y nadie más tendría que cargar conmigo y mis decisiones, eso hasta que irónicamente estuve al borde de la muerte y entonces entendí lo mucho que deseaba vivir, aún existían un montón de cosas que no había experimentado.¿Y mi bebé? Solo pensaba en eso mientras escuchaba muchas voces a mi alrededor así como el sonido característico de las sirenas, el resto era confuso y ni siquiera entendía como pasé de querer llevarle flores a mis padres a casi hacerles compañía en dónde quiera que estén.Lo cierto es que no morí, de hecho al abrir mis ojos no pude pensar en alguna otra broma con respecto a mi situación penosa porque escuchaba los gritos de David afuera de la habitación así como la voz de mi ex.Definitivamente estoy viva — Pensé.— ¿Que le hiciste a Jules?— ¿Que que demonios estás hablan
Jamás en la vida había visto a David tan tenso como aquel momento, la mujer me escaneaba tanto con la mirada que me resultaba inevitable no sentirme incómoda, ahora entendía que el chico que adoraba había heredado los genes de su madre pero dudo que fuese igual con el carácter, mi intuición me decía que aquellos minutos en esa habitación de hospital serían las más tortuosas de mi vida después de la muerte de mis padres.Era difícil intentar lucir bien para dar una primera buena impresión, acababa de tener un accidente, mi cabello lucía desaliñado, tenía un raspón en el brazo y mi ropa no era algo con lo que saldrías a conocer a tu suegra millonaria.— ¿Que haces aquí mamá? — Se adelantó a preguntar David.Yo aún seguía sin palabras, esa mujer tenía la mirada más penetrante que alguna vez alcancé a imaginar.— No es difícil tomando en cuenta que ahora dedicas tiempo libre para estar de luna de miel con alguien que ni siquiera conozco a sabiendas de lo mucho que te expones...— Me extra
Estuve fuera de casa durante cuatro horas sin rumbo alguno, solo caminando en busca de algo en que distraer mi mente. También me reprochaba a mi misma por qué había sido tan tonta para confiar nuevamente en alguien, me sorprendía cada vez más mi estupidez de buscar una historia de amor en un mundo lleno de mentiras y dolor, aunque quizás se debía al karma, tal vez debí esperar un tiempo más y quedarme en casa viendo películas mientras comía helado.De igual forma ninguna cosa que pasara por mi mente de lo que pude haber hecho esa noche para no conocer a David iba a cambiar mi situación, mi corazón estaba roto y sentía que esa herida no sanaría nunca más, quizás tampoco volvería a confiar en alguien.Tal vez idealizaba demasiado a quienes quería...No es muy difícil entender que estás tocando fondo cuando caminando entre miles de personas acabas en un mar de lágrimas sin siquiera poder contenerlo, desahogarme era mi única opción en ese momento.— Oye.Escuché una voz detrás de mi, pero
— No puedo creer que nos hayas hecho esto Jules, estábamos preocupados por ti, y el que ahora nos digas que David te estuvo mintiendo todo este tiempo lo hace más difícil porque ya no puedo enojarme contigo.Silvanna caminaba de un lado a otro mientras sus padres estaban sentados a mi lado en el sofá intentando consolarme tras lo sucedido en el hospital, les había dado un breve resumen acerca de mis razones para salir corriendo de la nada, si bien fue una irresponsabilidad de mi parte sentí que era necesario.— ¿Y que harás cariño? Sea cual sea tu decisión la respetamos, no es algo fácil recibir una noticia así de repentina — Dijo Janice.— Aún me cuesta superarlo, eran la pareja perfecta y se veían tan lindos juntos, se te notaba lo ilusionada que estabas con él...— Muchas gracias Vanna realmente eres la mejor consolando — Respondí sarcásticamente.— De nada, pero hablando en serio, mamá tiene razón ¿Que harás ahora?— Aunque me duela y siga enojada con respecto a el bebé, no puedo
El estar tan cerca de David me permitía ver detalles en él que antes no, como por ejemplo su piel mucho más pálida de lo normal y grandes ojeras bajo sus ojos que ya no parecían tener el mismo brillo que antes, era como si con el transcurrir de los días se estuviera apagando y tocando fondo, podía atribuirle su estado al estrés sobre el o por una vez en mi vida aceptar que si me quería y había estado sufriendo tanto como yo.Pero no entendía por qué si había decidido mantener mi dignidad intacta seguía sintiéndome mal.— Está bien, supongo que debo respetar tu decisión y entender que me equivoqué y afrontar las consecuencias de todo esto, al menos no te perderé por completo...— Tampoco deberías decir ese tipo de cosas, no es sencillo para mí aunque parezca — Respondí.— Lo sé Juju, tal vez pude haberme esforzado más por ti. — Basta ¿Si? Lo menos que quiero ahora es sentirme mal en un lugar como este.— Será tarea difícil, verás, toda esta gente es hipócrita incluyendome, estoy aquí
Todas las personas tenemos un límite, no importa si eres alguien de buen carácter, amigable o que es capaz de lidiar con todo tipo de situaciones complicadas, en algún momento cruzas esa línea y no eres capaz de resistir un segundo más aunque sea algo mínimo, sentía que mi dignidad e integridad se iba al caño cada vez más en aquel lugar y tantos comentarios pasivo agresivos me estaban enloqueciendo, había tenido suficiente y ya no iba a tolerarlo más.Esa parte de la familia de David me miraba con indignación por mis palabras y eso en lugar de causarme incomodidad solo alimentaba mi furia.— ¿Pero que dices niña? No deberías calumniar de esa forma siendo que he tenido la gentileza de invitarte a mi casa y conocer a nuestra familia.— Entonces ¿Tengo que agradecerle por haberme enviado una invitación hasta aquí aún sabiendo que fue con motivo de humillación? — Ataqué mirándola fijamente.La mujer no se sentía intimidada en lo absoluto pero si lucía como alguien que se dejaba llevar por
Sentía una extraña sensación dentro de mi, era como revivir aquel traumático momento que he intentado con todas mis fuerzas borrar de mi memoria, escuchar sobre alguien que por cuenta propia ponía fin a su vida me ponía los pelos de punta y me hacía pensar en que lo que para alguien no significa nada para otra persona puede representar todo, cualquier palabra, gesto, acción o hecho puede ser el detonante para destruir algo.David lloraba sin importar que estuviera rodeado de miles de personas bailando en la pista o su molesta familia al acecho, en ese momento entendía el porqué estuvo ayudándome con la perdida de mi madre, el había atravesado una experiencia similar, él también cargaba con la culpa de algo que no habría podido cambiar por mucho que intentara.— Entiendo como te sientes, es duro superar algo así de horrible, pero solo eras un chico presionado por quiénes tanto amaba y deseaba enorgullecer, alguien que tampoco merecía pasar por un momento así y unir su vida a alguien que
¿Saben ese momento incómodo en el que todos hacen silencio y permanece así por unos minutos? Bueno, literalmente fue eso lo que sucedió, yo miraba a las dos chicas con los ojos muy abiertos sin decir algo, no sé que me sorprendía más de toda la situación.Increíble que estuviera al borde de la histeria buscando a mi mejor amiga mientras ella estaba muy feliz compartiendo saliva con alguien.— ¿Por qué nunca tocas la puerta? — Habló Vanna finalmente mirándome con enojo.— ¿Eres lesbiana? — Le pregunté aunque sonó más como un susurro.— No, pero jamás había besado a una chica y quería saber que se sentía, la vida es una sola.— ¿Ustedes se conocen? — Preguntó Emily escandalizada.— Es mi mejor amiga, y vivimos juntas — Expliqué.— Ya no entiendo nada — Dice Silvanna.— ¿Por qué te besas con alguien en un baño cutre? Por Dios Vanna eso ni siquiera es romántico — La reprendí.— Bueno, solo sucedió, las habitaciones estaban ocupadas...Vanna dejó de hablar cuando David se acercó a pasos ráp