Otro día de mierda, me levanto de la cama ignorando a la rubia que sigue dormida en mi cama, voy al baño para hacer mis necesidades y salgo envuelto en una toalla rumbo a mi armario, me pongo un pantalón deportivo y cuando estoy a punto de ponerme una remera suena mi celular, no tengo el numero agendado, pero contesto.- Hola, ¿Quién mierda llama tan temprano? - Digo con voz ronca--Tamara está en peligro necesito de tu ayuda- Mica, mierda --Mándame tu ubicación voy para allá- Digo y cuelgo corro hasta el armario y cambio mi pantalón por uno vaquero con las rodillas rajadas negro y una remera blanca - Debe ser grabe para que Mica me llame a mí, tomo mi arma la coloco en la cintura y camino hacia la cama -- Vamos rubia largo de mi casa- La sacudo rudamente, ella me mira asustada-- ¿Qué te pasa cariño? Aun es temprano podemos divertirnos un poco más - Se levanta completamente desnuda y pasa sus manos por mi cuello--!! Que te largues¡¡- Le digo y la empujo, ella cae de culo -- ¡¡Ere
TamaraTrato de despertar y escucho voces a la distancia, pero no puedo abrir mis ojos ni moverme es como si todo mi cuerpo estuviera paralizado y solo mi mente despertara, alguien me levanta puedo sentirlo. Este perfume es de Gabriel poco después habla y lo confirmo.- Max, trae las cadenas – Ciento como pasa su mano hasta llegar a mi barbilla y me sujeta de ella- Despierta cariño te tengo una sorpresa- Lo intento, pero no puedo -- jefe creo que la última dosis que le inyectamos fue mucha- No reconozco la voz-- No morirá así que no hay de que preocuparse - Maldito infeliz- Trae un poco de alcohol-Empiezo a sentir que despierto abro los ojos con pesadez - ¿Dónde estoy? - Y es cuando todo cae en mí, me persiguen, me atrapan, me secuestran, Gabriel-- Por fin cariño, si te morías no iba a tener gracia - Está parado en frente de mi con una sonrisa arrogante-Trato de sacudirme, pero tengo mis dos manos atadas en una cadena al techo apenas llego al piso con la punta de los pies estoy
TamaraDios que dolor, mi cuerpo quema estoy en el mismo cuarto creo y todo cae en mi como un balde de agua fría él dijo que Cristian está muerto, se mató. Pero por quien, porque yo sé que por mí no fue, nuestra amistad era muy fuerte como de dos hermanos, pero nunca hubo ni una pisca de romanticismo ni la intención. En que lio me metiste Cristian. Intento levantarme, pero es imposible Apoyo la cabeza en la pared cuando la puerta se abre, me tenso y trato de hacerme más pequeña.-Tranquila - Veo un chico como de mi edad con pantalones camuflados y botas estoy segura de que es el mismo hombre que estaba cuando me secuestraron recuerdo sus ojos azules, creo que Gabriel lo llamo Max- No te hare daño - Me reí sarcásticamente--Mas no creo soportar- Me miro con tristeza- ¿Dónde está el loco de tu jefe? -- Logre que su amigo se lo llevara antes que te matara- Genial, pensé -Si no, no podría a verte traído agua y comida- Se acerca y me extiende una botella de agua y lo que parece un sándwic
GabrielEstoy enojado, no sé si conmigo o con ella, debería estar asustada, ser sumisa después de como la golpee, pero no, ella no deja de retarme con la mirada. La estoy llevando a la cabaña que prepare para ella atada a mi caballo, la miro y sé que caerá en cualquier momento, pero se niega a suplicar que pare y eso logra enfurecerme más. Quiero que me suplique, que llore por lo que le hizo a mi hermano, pero no logro que se rinda.- ¿Cansada cariño? -Me mira con odio-- ¿Es lo que quieres no? Que me rinda, pues no - Y ahí está, la arrogancia que me hace quererla ver de rodillas suplicándome-- Bien, porque aún falta un largo camino- Ella cierra los ojos con impotencia -Diez minutos después cae desmayada, paro el caballo y voy hacia ella. Maldigo para mí mismo, ella se lo busco, no debo sentir lastima por ella, pero si la arrastro inconsciente la matare, la desato, guardo la soga y la cargo hasta el caballo, la siento delante de mí sujetándola de la cintura, pego a mi cuerpo y es ine
- Tú serás lo que yo diga que eres - Me dice el muy idiota- Entra, báñate y no cierres la mampara que quiero verte- Me está humillando el maldito infeliz-Bien, ¿Quieres jugar?, juguemos entonces, me saco lentamente la tanga y prendo el agua que empieza a caer como lluvia, me meto de bajo del duchero y suelto un leve gemido exagerado por el placer de sentir el agua tibia corriendo por mi cuerpo después de tantos días, miro que sus ojos están dilatados de excitación- Tú te lo buscaste campeón- Agarro el jabón y lo paso suavemente por mis senos y doy otro gemido, su pantalón va a reventar, llevo mi mano hasta mi entrepierna y le doy la espalda. Que se joda pedazo de idiota. Pero no termino de maldecirlo cuando ya está metido conmigo debajo de agua- ¡¡¡Lo estás haciendo a propósito!!!- Claro que si imbécil, te voy a sacar las ganas de humillarme-- ¿De qué hablas? Definitivamente estás loco- Digo con voz baja- Suéltame --Oh no cariño - Y comienza a desvestirse - Debes aprender a no pro
MicaelaYa han pasado tres semanas de la desaparición de Tamara, recibí un mensaje de Marcus el día de ayer para informarme lo que ha averiguado, en este momento estoy llegando a su casa. Bueno, no esperaba ver esto, más que una casa es una mansión, diablos que ha estado haciendo este tipo en estos años. Pensar que consideraba a este idiota un gran amigo, pero con lo que le hizo a mi prima lo tache de la lista de los más queridos. Llego al portón donde hay un tipo con poca cara de amigos.-Buenos días estoy buscando a Marcus el me mando a llamar- El tipo me echa una mirada pervertida, idiota--Pasa belleza, te está esperando- Hice una muesca de asco que no le paso de ser percibida, son todos iguales-Entre sin mirar atrás, la puerta principal está abierta y hay dos tipos más de seguridad, ni los miro y sigo hasta entrar al interior de la casa, en el camino me encuentro con gran comedor toda una belleza, pero mi pregunta en este momento es ¿Quién es Marcus? Cuando lo conocí era un pandi
TamaraLlevo un mes en esta cabaña metida en el medio de la nada, Gabriel no ha vuelto a ponerme una mano encima, más bien parece controlarse y se desahoga haciéndome trabajar hasta la muerte, mis días aquí son simples pero infernales, me levanto temprano, cocino, limpio, me encargo de todo sus caprichos como por ejemplo; hace unos días se le ocurrió que debía limpiar las ventanas del segundo piso por afuera donde llovía a cantaros, gracias a ello en este momento me encuentro con un refrío de los demonios.Por suerte tengo a Max, nos hemos hecho cómplices y me ayuda a espaldas de Gabriel cada vez que puede, ya que él dice que le recuerdo a su hermana, ella se suicidó hace cuatro años, fue abusada y torturada por una banda de delincuentes y no pude superarlo. Él se culpa por esto y me ha pedido perdón por no defenderme el día que Gabriel me violo, pero yo no puedo culparlo ya que sé que si hubiera interferido lo hubiera matado. Para nuestra buena suerte, Gabriel se va a la hacienda por
GabrielSubo al cuarto de Tamara, entro sin tocar, ella esta desnuda como le pedí que me esperara, se me hace agua a la boca al ver sus pechos desnudos. Me saco la camisa, la tiro sobre una silla, me descalzo y entro al baño, pero ella no se mueve, me pego un baño para sacarme la tierra del cuerpo, envuelvo una toalla en mi cintura y salgo. La miro y noto que está temblando, me tiene miedo y la entiendo sé que la lastime, pero ahora no me importa.Me paro en los pies de la cama y la llamo para que se acerque- Ven, no te lastimare - Le abro las piernas y paso su mano por su clítoris asiendo círculos, ella se pone roja y muerde su labia para no gemir, me pongo entre sus piernas y paso mi lengua por toda su intimidad.-AAAAHHH Gabriel - Gime y coloca su mano en mi cabello, esta mojada -- ¿Quieres que pare? Solo dímelo y lo hare, no volveré a forzarte - Ella me mira sin saber que decir, pero sé que está pensando en las consecuencias de decirme que no- Entonces si tu no lo sabes tu cuerpo