CAPÍTULO ONCEMiloHoy es el más perfecto día para...— ¡No quiero saber nada de él!Ver como Peyton arremetida contra sus hombres, y no hablo de tener sexo, y tampoco hablo de todos sus hombres...hablo de la furia en su rostro mientras un igualmente terco Ghian mantenia su teléfono en un fuerte apretón.Ese también era el teléfono de Peyton.Retrocedamos unos minutos donde habíamos estado charlando pacíficamente Quan y yo en la casa de la pareja de cinco personas cuando de pronto se habían escuchado gritos.No queríamos meternos en ello.Para nada.Pero ellos habían bajado gritando como cualquier pleito entre parejas, y aunque pensé en un momento irme, me lo plantee mejor cuando tanto Quan y yo nos dimos cuenta de que Peyton no sólo estaba molesta sino que también estaba temblorosa con sus labios temblando ante cada palabra murmurada.Aún así supimos quedarnos callados pues ambos sabíamos de quien hablaban, el padre de ella no es más que un cretino.Sus demás chicos trataban de acerc
CAPÍTULO TRECEMiloEl despertarse en ésta cama a la dureza en mi fraternidad era un cambio tremento, ya que la camita de aquí era tan suave...como estar recostado en un dulce malvavisco donde las ganas de levantarse eran mínimas, como un menos cero supremo.Tan rico.Había un calorcito a mi costado derecho, ya sabía que era Kadem, aun así me sorprendía un montononon que su precensia no me incomodaba, la verdad es que me encanta.Nunca había compartido cama.Neeee.No del todo cierto ya que he compartido cama con mi hermanote Soda, pero es muy diferente el relajo escandaloso que mi hermano y yo hacíamos al suculento escandolo que Kadem y mi personilla hicimos durante la noche.El recordarlo me hace sonreír.Y aunque mi cuerpo cruje, figurativamente, me siento en la cama dejando a la sabana que me cubría deslizarse dejándome desnudo.Ok.Eso me puso algo nervioso.No entiendo el porqué.Nadie puede verme desnudo en estas cuatro paredes, incluido Kadem en ello ya que se encuentra tranqu
CAPÍTULO CATORCEMiloLa verdad esperaba que luego de unas cuantas semanas de nuestro no noviazgo, más bien llamado Milo siendo abusadito sexualmente por un hombresote muy lindo pero con actitud del asco....esperaba.Como mínimo.Tener algo con el, quizás algo de intimidad, pasando lo del sexo quería conocerlo un poco más...saber lo que le gusta, lo cual parece ser muy pocas o eso creo a lo que no le gusta que parecen ser la mayoría de las cosas.Pero nada.Mis intentos se quedaron en eso, intentos ¡el muy malvado me sacaba las ganitas de seguir preguntando!Más cuando ponía esa carita gravedad cero y me decía, no, voy a admitirlo por que no hace daño a nadie...esa carita es tan linda, me pone muchote.Es como un malvado demonio con deseos sexuales hacia mi pobre cuerpecito.Cosa que no suena nada mal.La cosa era que en las últimas semanas habíamos sido interrumpidos por su asesora de imagen, la señora que anteriormente me había sacado a patadas de la suit, tema que la próxima vez qu
CAPÍTULO QUINCEMilo— ¿Cómo que no?Entrelace mis dedos para tambalearme de atrás hacia adelante ¡wiiiiii! Mientras hacía una mueca de lo siento.— Regan, deja al bebito en paz.Mamá Odie lo señaló con su espátula mientras terminaba de atar un mandil a su estrecha cintura.Papá Regan y Mamá Odie no son verdaderamente mis padres pero los conozco desde hace tantos años, que practicamente ya soy de la familia.— Bea, Milo tiene algo — papá Regan volteo su cabeza mirando a su hija pidiendo ayuda quien estaba charlando con mi hermanote, supongo que de algo que a mí no me contará.Pero por algún motivo tampoco me importaba.¡Oh!Déjenme les presento a la familia Londsdale ¿integrantes? Cuatro...los cuales son mamá Odie, papá Regan y a quien he llegado a considerar mi hermana Bea...también está Neklan el hermano mayor de Bea pero el no vive en ésta ciudad.Bea, como ya habrán notado es una de las dos mejores amigas de mi hermano Soda...y debo decir esto porque me encanta, su papá es ¡enorme
CAPITULO DIECISEISMiloLes doy un resumen.Han pasado tres días desde que Kadem me dijo lo que me dijo en mi carita, desde que su loquisima asesora de imagen me cacheteo, desde que Peyton tuvo la maravillosa idea de adelantar nuestro dulce viaje a Las Vegas.Desde que tengo estos alucinantes sentimientos encontrados hacia todos, donde llorar no es el único problema...ya que hasta cuando Soda me llamó contándome que tenía pensado visitar a papá y mamá lloré cuál magdalena...cómo si me estuviese contando que alguien very importante en nuestra vida murió.Luego...de mi dichoso desmayo en el baño y que me hayan llevado, literalmente, arrastrando a un hospital las cosas parecían ir mejorando poco a poco.Pero todo fue un espejismo.— ¿Tienes hambre?Ahora al parecer tenía...yo tengo, un bebito creciendo en mí.Literal.Cuando los exámenes llegaron me había puesto nerviosote como no tienen idea, por lo tanto busque a Quan para que el abra el sobre y me diga que tengo una grave enfermedad y
CAPITULO DIECISIETEMiloAún estábamos de vacaciones pero nosotros ya habíamos regresando de Las Vegas, ya que luego de enterarnos de mi estado los planes de celebrar cual dementes el estado de matrimonio de mi amiguita habían sido totalmente cancelados.Y yo tenía una cita urgente con mi doctor.La cual iba a ser hoy.No puedo negarlo...estoy nerviiiiosote.Pero iba con la firme idea de descubrir que mismo había pasado con las inyecciones, por que era absolutamente seguro de que estas habían dejado mi sistema hace más tiempo del que creía.Sabía que aún a falta de ella no me iban a salir senos ni tampoco la regla iba a volver con sizaña...o esa quiero creer.Pero no pude ser el único afectado con esto.¿O si?No creo que esto sea mi culpa, si...puede que ahora sea sexualmente activo pero eso no cambia nada en mi, aparte del ligero detalle de mi muy lejana virginidad.Al entrar al edificio ya que este doctor no trabaja en un hospital sino que es privado y tiene su propio consultorio,
CAPITULO DIECIOCHOMiloNadie había hablado desde que entramos a la casa y sentado en los suaves sillones con sus almohadas adornadas con los tejidos que mi madre había echo.Incluso Lilia quien tendía a ser inquieta y revoloteaba cuál inquieta avesilla por todas partes se mantenía firmemente tensa en su lugar, sentada derecha en su asiento mirando fijamente sus tiernas manos.Soda era otra cosa aparte, se mantenía con sus brazos cruzados mirando fijamente a nuestros padres como alentandolos a que digan una sola palabra, me sentía amenazado y tentado de romper tal hechizo.Y aunque me gustaría ser quien sacara sus cabezas de sus cultos, me temo que no era capaz de hacerlo cuando yo tenía mi propio lío haciendo estragos mi estómago.Es mejor quedarme callado.Lamentablemente mi estómago no parecía estar de acuerdo...mejor dicho, mi baby no quería seguir siendo un secreto.Sudor perló mi frente mientras unas enormes ganas de vomitar recorría mi cuerpo, apreté mis labios juntos mientras
CAPITULO DIECINUEVEMilo— ¡También quiero unos malvaviscos de esos en espiral, por fis!Ghian quién había estado caminando se detubo al escucharme para asentir hacia mí sin voltear a mirarme para retomar su camino a donde mis cosillas dulces esperaban por ser agarradas, prácticamente babeaba por todo lo dulce.— Cualquiera pensaría que es tu marido.Ante la voz de Peyton giré a mirarla algo apenado al tener a su esposo yendo por mis dulces, luego la miré fijamente para rodar mis ojos.— No puedo creer que aun no tengas una favorita.Siguió moviendo sus labios de lado a lado mientras Terrell que estaba a su lado hizo esa sonrisa dulce que sólo a él parece salirle.— Según ella...todas saben demasiado bien para...— La de calabaza no me gusta — le interrumpió ella agarrando una que al parecer tenía relleno de manjar.— Verdad, según recuerdo dijiste que sabía como a comida de perro — el le dio un tirón a un mechon rosado del cabello de mi amiga — Y aun tengo curiosidad por saber cuando