El día de nuestra boda fue el día más feliz de mi vida.

Nunca imaginé que él llegaría a aburrirse de mí,tal vez debí de prestar más atención a sus necesidades o trabajar cerca de él.

No lo sé,ese hombre solo cayó enamorado de alguién más y yo no podía hacer nada,ya no podía hacer nada,lo intenté pero dolía demasiado.

Recordar nuestras noches sentados junto a la estufa,mirando una película romántica mientras una copa de vino descansaba en nuestras manos se había vuelto uno de esos tantos recuerdos dolorosos. Esas noches cuando lo abrazaba y me sentía en el lugar más seguro del mundo habían sido remplazadas por una fría oscuridad que lastimaba sin cuidado mi corazón.

Habíamos pasado de amarnos como nadie más en el mundo a completos desconocidos que si se veían en la calle miraban a otra dirección.

Y dolía,m****a que sí dolía.

* * *

Al regresar a casa mi hermano no se despegaba ni un minuto de mi lado,en cuanto supo lo de mi secuestro tomó el primer avión de L.A a Londres sin pensar en su trabajo,sin preocuparse en dar explicaciones a su pobre Secretaria.Cuando llegó yo ya me encontraba en el hospital a nada de volver a casa,al verme lloró y casí corrí a abrazarlo.

Cuando ese hombre me llevó consigo me asusté demasiado y solo quería que los brazos de mi hermano me abrazaran haciéndome sentir segura,que estaba a salvo de todo.

Sofía me dijo que vió a Matthew y Chris discutiendo fuera del Hospital,mi hermano le echaba las culpas de todo a Matthew,que todo esto no habría pasado si él y yo nunca nos hubiéramos encontrado.

Cuando mi hermano salió a hablar con su secretaria por teléfono mi ex-esposo entró a la habitación en la cuál me encontraba,sus ojos tristes me gritaban las palabras que Christian le había dicho en medio de esa discusión,que yo nunca fuí feliz a su lado,que siempre estoy en peligro por su culpa,que si algo me hubiera pasado lo que menos le iba a preocupar sería que se enteraran de mi existencia.

—Yo...—comenzó.—Lamento todo esto—miré mis manos,me dolía verlo.—...Si alguién pregun- —no lo dejé terminar sabía lo que iba a decir.

—Soy novia de Harry—dije dándole la espalda mientras me volvía a acostar.—Vete—susurro.

—Melissa—lo escuché tratando de acercarse.

—Por favor—me hice bolita y dejé salir las lágrimas.

Y se fué.

Regresé a casa al día siguiente y desde ese día hasta hoy no he sabido nada de él,mi hermano se a encargado de eso.

Pero necesitaba salir con mis amigos,pasar tiempo fuera de casa sin mi hermano,lo amo pero me estaba encerrando en una burbuja.

La risita de Sofi llamó mi atención,levanté la mirada de mi celular y sonreí,frente a mi se encontraba una pareja dulce y llena de amor,un amor que parecía sacado de esos cuentos de hadas cursis o de esas películas románticas de adolescentes. Rezaba cada día para que mi amiga viviera un amor puro y sin dolor.

—... Y así fué como Camila termino sobre Chris—miré a Harry que se encontraba sentado a mi lado y reí.

—¿Cuando sucedió eso?—pregunté curiosa guardando mi celular para prestar atención a mis amigos.

—Cuando fuí a recogerlos—los ojos de Harry se posaron sobre una roja Camila—Tu hermano iba distraído bajando las escaleras y Cami venía concentrada en mí dirección para hacer sus típicas cosas malvadas pasando justo frente a Chris—soltó una risita—Tan torpes cayeron al suelo en una pose bastante vergonzosa—Camila le tiro una bola de papel directo al ojo y todos estallamos a carcajadas.

—Lo siento—se acercó al mayor y acarició su ojito.

—Si se hincha estarás en problemas—dijo entre dientes el chico alto,los dulces ojos de Camila brillaron.—¡Ay!—volvimos a reír,la chica de rulos apoyó su dedo índice justo donde le dolía al mayor y sonrió alejándose.

—Solo tú te metes con Cami cuando la tienes tan cerca—hablé riendo—eso me recuerda a Matthew,cuando te salió persiguiendo con un zapato por haberle apagado la consola—se formó el silencio y mi risa se detuvo.

Nadie,ni siquiera yo esperaba mencionar a Matthew,pero estaba tan cómoda riendo que el recuerdo llegó a mi mente y escapó de mis labios,tomé de mi taza de café y volví mi vista a la ventana haciéndo como si no hubiera dicho nada.

—Melissa—miré en dirección a Thiago y sonreí, pero mi sonrisa desapareció en cuanto me encontré con sus ojos tristes.

—¿Está todo bién?—le pregunté,Sofi lo miraba confundido.

—Sabes que Matthew es mi mejor amigo ¿cierto?—Asentí sin saber a donde quería llegar—Yo...no quiero que te sientas incómoda y mucho menos quiero que sientas dolor al verlo—ahora todos lo mirábamos confundidos.—Él esta de vacaciones aquí en Londres con su familia y lo invite a que pasará la tarde con nosotros—habló rápido,tan rápido que parecía rapear.

Al inició no le había entendido pero después de unos segundos sonreí,no podía decirle que no invitara a su mejor amigo cuando yo estoy con ellos,miré a Sofía y suspire,tampoco por mi culpa y estúpidos sentimientos debía hacer el ambiente incómodo para todos.

Verlo en persona era lo mismo que verlo en televisión.

Tendría el mismo tonto sentimiento.

Y yo no tenía forma de cambiarlos ya fuera viéndolo cara a cara o detrás de una pantalla.

—Lo siento—escuché su voz apagada y salté de mi asiento.

—No tienes que pedir disculpas por nada Thiago—dije alterada—No se puede evitar,verlo aquí contigo o verlo en las calles es la misma cosa—le regalé una de mis suaves sonrisas para tranquilizarlo.

Solo debo ignorarlo,ignorar los fuertes latidos de mi corazón y el insistente dolor de mi alma.

Unos momentos después el aire se había tornado pesado e incómodo,mi bebida era lo más interesante en esa mesa para mis ojos y juraba sentir la mirada de mi ex clavada sobre mí.

Harry fué el primero en hablar—Cariño,creo que deberíamos irnos—tomó mi mano y miré alrededor confundida,hasta que recordé la mentira que habían inventado para dar una excusa a la pareja de Matthew.

Suspiro.

Miré a mi ex-esposo y a su actual pareja,sonreí.

—Thiago mencionó que están de vacaciones—Lía sonrió afirmando con la cabeza.

Los demás me miraron extrañados,preguntándose que estaba pasando por mi cabeza.

—Los invito a todos un par de días a la playa—estaba harta de sufrir,de siempre tener que esconderme y llorar.

Les demostraría que yo también soy fuerte,que puedo superar al grandioso Matthew Smith como si de un amor de verano se tratara.

Era hora de que Melissa Darling volviera a salir a la luz.

* * *

—¿Tienes todo?—pregunté a mi hermano,él hizo memoria y asintió cerrando su maleta.

No estaba en mis planes llevar a mi hermano pero como dije antes no se despegaba de mi por mucho tiempo y al saber que Matthew junto a Lía irían con nosotros se volvió loco,gritando que no tenía permiso de ir a ese viaje pero todo cambió cuando mencioné a Camila y playa en la misma oración.

La bocina del autobús nos hizo correr con todo hacia fuera,Chris activó la alarma de la casa y cerró con cuarenta y ocho candados,volvió a verme con una sonrisa de oreja a oreja y corrió a guardar las maletas en el autobús para después correr a sentarse junto a Camila.

Subí negando divertida y me encontré con el chófer,sonreí con nostalgia al verlo,al hombre se le llenaron los ojos de lágrimas al verme y tuve que detener a mi cuerpo de correr a abrazarlo. Ese hombre había sido mi chófer,el encargado de llevarme a todas partes con cuidado,de cuidar mis pasos por años,hablabamos de su familia y de lo orgulloso que estaba de sus pequeños nietos.

Extrañaba mucho a esas personas que me hacían sentir un poco menos sola en ese enorme departamento,no eran solo personas que trabajaban en ese lugar,eran como una familia para mí, pero después del divorcio Matthew y su abogado me prohibieron tener contacto con cualquiera de ellos,y ellos debían olvidar mi existencia,guardar completo silencio sobre mí.

Le sonreí al hombre como pude e hice un movimiento de cabeza.

Me adentré aún más en el vehículo y mis ojos pararon justo sobre la feliz pareja de famosos,alejé la mirada en cuanto me encontré con los ojos de Matthew y caminé hasta Harry que miraba la situación desde el fondo del autobús,me senté a su lado y me dedicó una sonrisa.

—No sé que se te pasó por la cabeza al hacer este tonto viaje con ellos—susurró con el ceño fruncido mirando a su hermano y cuñado.

—Hace un año que terminamos—apoyé mi cabeza en su hombro—Es tiempo suficiente para superar ese marchito amor—cerré los ojos dejando ir un suspiro—Si él es feliz con su nueva persona especial,yo también merezco que alguién me ame y trate a su igual—Harry no dijo nada solo acarició mi cabeza.

Sabía que sería duro pero ya estaba harta de esa situación,siempre caminar sola con el corazón roto y sintiendo como la oscuridad me perseguía a cada paso que daba.

Al llegar fuí despertada por el grito de emoción de Camila,Sofía y Thiago bajaron con velocidad corriendo hasta la puerta de la gran casa frente a nosotros,mi hermano tomó a Cami como bolsa de papa sobre su hombro y corrió al agua,la pobre chica termino empapada en cuestión de segundos,Chris quitó el cabello que interrumpía su hermosa vista de los ojitos preciosos de mi amiga y la sonrisa que se regalaron uno al otro me hizo sonreír como boba.

—Tan lindos—susurro.

Volví mi vista a la pareja de famosos y al ver el rostro de Matthew mi corazón dolió,reconoció el lugar y sus ojos me miraron,fue cuando aparte la vista con ojos llorosos.

La casa de la playa fue un regalo de los padres de Matthew cuando nos casamos,una casa en donde teníamos privacidad,donde éramos nosotros mismos. Era nuestro lugar favorito en el pasado,cuando nos divorciamos sus padres insistieron en que me diera los papeles de la casa para yo ser el único dueño,no quería nada de él,nada que me recordara mi vida junto a él, pero los ojos llenos de dolor de su familia me hicieron firmar los papeles. Al entrar ya nada era igual,había mandado a cambiar todo hace un tiempo,era una casa totalmente diferente a la que recordaba.

Nuestras fotos de boda sobre la chimenea habían sido remplazadas por preciosos paisajes,el color que habíamos escogido juntos para las paredes de la cocina fueron cambiados de igual forma que los muebles,la habitación principal ya no era ese lugar romántico que era testigo de nuestro amor,ahora era un simple cuarto con dos camas y vista al mar.

Me preguntaba si él recordaba esta casa con cada detalle como yo.

Pero al ver a mis espaldas como toda su atención estaba enfocada en esa pequeña chica emocionada que no dejaba de ver por la ventana la hermosa vista me dije a mi misma lo tonta y patética que era.

Thiago y Sofía corrieron por el pasillo gritando que la habitación de arriba era suya,sonreí.

—La casa solo cuenta con dos habitaciones—Dije—Thiago y Sofi ya escogieron,ustedes pueden quedarse en esta—en ningún momento volví mi vista a ellos—Los demás haremos pijamada—sonreí mirando a Harry.

—Pero...—la suave voz de Lía nos hizo mirarla—Ustedes dos también son pareja—nos señalo al chico a mi lado y a mí.

—Estaremos bien—le sonreí.

—Si queremos privacidad siempre está la playa—el brazo del chico más alto rodeó mi cintura,lo volví a ver sorprendido.

Los ojos de mi amigo estaban llenos de burla mirando directo a los ojos sin expresión de su hermano,le golpee con el codo disimuladamente en las costillas.

—¿Que cosas dices?—pregunté entre dientes con una sonrisa nerviosa.

¿Se estaba volviendo loco?

En la noche nos encontrabamos todos juntos afuera con el hermoso paisaje y el sonido de las olas del mar rompiendo a las orillas de la playa,el sonido de los grillos hacían de esa noche una velada bastante agradable.

Thiago y Sofía jugaban al UNO junto a Harry y Camila que de vez en cuando gritaban desesperados,Christian preparaba el fuego para la parrillada que sería nuestra cena en cuanto yo lo ayudaba alcanzandole lo necesario para que el fuego ardiera.

¿Matthew y Lía? ellos dos habían salido a pasear por la playa de hacia un buen rato,no quería ni pensar en eso.

—Mel ¿puedes traer algunas ramas secas de los árboles frente a la casa?—asentí y me dirigí hacia el lugar.

Tomé un par de ramas del suelo y contenta planeaba volver con los demás,pero paré en seco cuando oí las conocidas voces de mi ex-esposo y su novia.

Sabía que estaba mal escuchar conversaciones ajenas a escondidas, pero casi sin darme cuenta me encontraba oculta detrás de uno de los tantos árboles cercanos a la entrada principal de la casa.

—Te noto distraído—dijo Lía colgado del brazo del mayor.

—¿Distraído? ¿yo?—paró su caminar y sus oscuros ojos miraron a su amor.

—Sí,tu mente parece estar pérdida todo el tiempo—la menor posó su mano con suavidad sobre la mejilla de Matthew y le regaló una carita de preocupación.

—No es nada—besó la frente de la chica frente a él—Solo que este lugar me trae muchos recuerdos—¿recuerdos? No pude evitar prestar aún más atención a sus palabras—Me recuerda a un cuento que leí hace un par de años—se sentaron en uno de los bancos que se encontraban a un un par de pasos de mí.

Y continuó.

—Una pareja de recién casados compraron una hermosa casa en la playa,lejos de todas esas personas que lucharían por separarlos,vivirian en un cuento de hadas al menos por un tiempo,era lo que más querían en ese momento,hasta que la realidad los golpeara de lleno en la cara solo querían amarse y entregarse el uno al otro...

Pero uno de ellos cometió algo imperdonable,lastimó a su pareja sin darse cuenta,la dejó ir sin pensarlo y no tomó en cuenta el dolor que causaría a las personas a su alrededor con la decisión que había tomado.

Quién más sufrió fue él,no podía sacar de su corazón a quien creía ya no significaba lo mismo que antes,pero no quería lastimar a la persona de la que se supone se había enamorado,por la cuál había hecho sufrir de forma desagradable a quien era en su vida lo más importante...

Paró.

—Sigue—habló la más joven enganchada al supuesto cuento que relataba el actor.

—Ahí termina—dijo echando su cabeza hacia atrás,observando las estrellas.

—No puede terminar así—saltó Lía.

Me dejé caer al suelo apoyando mi espalda en el árbol,escuchando atenta su conversación.

—¿Que final le darías tú?—la chica sonrió.

—Que volvieran a estar juntos—miró al suelo y yo solo sentí el fuerte golpeteo de mi corazón en mi pecho.—Uno puede tener momentos de confusión,a veces creemos que nos gusta nuestro mejor amigo y luego de un tiempo nos damos cuenta que no es así,que esos sentimientos de amistad fueron confundidos con amor—la voz de Lía se fue apagando—O simplemente te sentías solo—Matthew volteó a verla con rapidez y yo me paré en mi lugar.

—¡Melissa!—la voz de Sofía llamándome los hizo saltar de sus asientos y a mí casi salir corriendo, pero no podía moverme de mi lugar si ellos seguían ahí.

Sofía se acercó a la pareja preguntando si me habían visto,el rostro de Matthew se volvió pálido en cuanto mi amiga les mencionó que hacia un buen rato había desaparecido,Matthew y Sofi miraron alrededor y Lía corrió con los demás,debía salir de mi escondite pronto o todos se volverían locos de preocupación al seguir buscándome y yo sin dar señales.

Pasarón unos cinco minutos cuando al fin tomé la decisión de salir de detrás del enorme árbol,caminé con las ramas en mano un par de metros cuando la sombra de alguién apareció frente a mí.

Levanté la mirada encontrándolo a él.

Unos brazos me rodearon con fuerza haciendo que las ramas que traía cayeran al suelo,el abrazo no fue correspondido,pero no porque no quisiera sino por lo sorprendida que me encontraba.

—No vuelvas a desaparecer así—acarició mi cabello aún sin soltarme—creí que nuevamente te habían secuestrado—tomó mi cara con sus manos,apretando con cuidado mis mejillas.

—No tienesh que Pleocupalte pol mí—dije con dificultad debido a que mis cachetes estaban siendo apretados por sus manos.

—Siempre me preocupo por tí,si estas bien, si estas mal,si te duele algo,si estas cansada,si ya comiste,si tienes frío,si pasaste bien la noche o si tuviste pesadillas—sus ojos se clavaron en los míos—¿Crees que por qué estoy con ella ya no me preocupo por tí?—sus ojos se llenaron de lágrimas y los míos también.

—¿por qué me haces esto?—pregunté haciendo puchero,estaba harta de todo.—Es una tortura tratar de superarte,ver que eres feliz sin mí...que no hago falta en tu vida—traté de soltarme pero él tomó con más fuerza mis mejillas en sus palmas.

—Mel- —lo interrumpo.

—¿Sabes? a pesar de todo yo nunca deseé no haberte conocido—las lágrimas rodaban por mis mejillas y aunque me sentía patética,continúe.—¿Por que aún te sigo amando Matthew Smith?—Y lloré con fuerza,sin ocultarme.

Cerré mis ojos dejando a las lágrimas seguir su camino cuando sentí sus labios tibios sobre los míos,hacía tanto tiempo no sentía su suave toque, el dulce sabor de sus labios me hizo hipar,los recuerdos de nuestros días juntos a la luz de la Luna en este lugar llenaron mi mente,separó nuestras bocas y juntó nuestras frentes.

—Mi pequeña,lo siento tanto—susurró.

Y sabía que esté era el verdadero final de nuestra relación.