Y el tiempo pasó, casi un año para ser exacto. En ese tiempo, muchas cosas habían pasado. En esos meses, la pareja de bailarines se presentaron al concurso de baile que se realizaba en Buenos Aires y para su sorpresa, ganaron el tercer lugar, algo invaluable ya que competían con parejas ya consagradas.Era tiempo de regresar a casa para Aitana. Los únicos que sabían que la joven regresaría eran Lautaro y Lucas. Quería darles la sorpresa a su madre que vivía llorando y a su querida tía Verónica quien siempre que la llamaba y parecía estar triste por su ausencia, pero aú así la animaba continuamente a quedarse en Buenos Aires y seguir creciendo en su carrera. Lautaro finalmente, se asoció a su amigo para seguir expandiéndose, él no era otro que Nick Turner. Ellos se habían conocido hacia unos años atrás porque la empresa de Lautaro había sido la responsable de construir un hotel para ellos, desde allí habían congeniado y de vez en cuando hablaban y a pesar de que no se veían muy seg
Dias después, Aitana y Julián llegaban a Madrid y allí estaban esperándolos los dos cómplices con una cara de felicidad indescriptible. Lautaro había insistido en que Julián se quedara con ellos hasta que el joven se pudiera acostumbrar a todo el cambio que experimentaría. En su imaginario, él era el novio de Aitana y no había manera de que alguien le hiciera cambiar de idea, ni siquiera Lucas. _ Por favor papá, te lo ruego _ le dijo su hijo mientras esperaban que los jóvenes salieran _ te ruego que no hagas ningún comentario sobre una relación entre ellos, no repitas lo que hiciste en Buenos Aires... ¿Vale? La relación de Lucas con sus padres era muy particular. Quizás por ser el hijo mayor o porque cuando él nació sus padres eran tan jóvenes, los trataba más como hermanos que como padres. _¡Lucas... creo que a veces te olvidas que soy tu padre! _ le dijo Lautaro enojado _ deja de decirme lo que tengo que hacer o no. Me agrada mucho ese muchacho, creo que está enamorado de tu herm
Nick Turner llegó esa mañana a Madrid muy temprano. Había decidido adelantar su viaje para poder asistir a la fiesta que su amigo tan amablemente lo había invitado. Hacia tiempo había dejado de asistir a fiestas y eventos, más precisamente desde aquél día en el que se encontró a Aitana. Ese episodio fue un antes y un después en su vida. Lo mismo sucedió con sus encuentros sexuales, intentó volver a estar con otras mujeres de manera esporádica, pero ninguna podía provocarle lo que Aitana si. Por más esfuerzos que había hecho por olvidarla, le había sido imposible. A veces creía verla en algunos lugares, pero solo eran espejismos. _ Vaya, hice bien en acompañarte amigo _ le dijo Paul sonriendo _ hace tiempo no salimos a divertirnos. Nick lo miró seriamente. _ ¡Paul, te pido encarecidamente que te comportes! Sabes bien que ademas de mi socio, Lautaro es mi amigo. Asi que nada de andar enamorando a nadie en la fiesta. ¡¿Ok?! _ suspiró hondo _ Nos quedaremos solo un par de dias, si te
_ ¿Quieres que nos vayamos? _ le dijo Paul _ Dime... amigo, hacemos lo que tú quieras. Nick lo miró desencajado. _ ¡¿Pero te volviste loco?! _ susurró enojado _ ¿Quieres qué escape del cumpleaños de la hija de mi amigo por esa mujer? ¡M*ldita sea mi suerte! ¡habiendo tantos bailarines en el mundo, los contratan a ellos! _ Bueno, yo decía nada más_ dijo Paul.Todo el empeño que él había puesto para olvidarla fue derribado en un segundo. Ahí estaba ella emponderada y hermosa como si fuese una mitologica amazona. Y otra vez, provocándole el mismo e inexplicable sentimiento : el de poseerla como lo había hecho aquella noche un año atrás en Buenos Aires... _ ¡Por Dios Nick! es maravillosa. Ahora entiendo tu obsesión _ le dijo sonriendo Paul _ verla bailar así, despierta hasta a los muertos... ¡uff que mujer! El lo miró y apretó los labios. Podría odiarla mucho pero, no quería escuchar a ningún hombre hablar en ese tono de deseo hacia ella. _ ¡Callate, no hables así! _ le dijo enojado
Paul estaba hablando con una mujer animadamente cuando su amigo lo tomó del hombro y le hizo una seña para que lo siguiera. _ ¡Es ella!_ le dijo por lo bajo a Paul _ ella es Vera. El otro miró hacia un lado y otro. _ Vera es ella... bien ... ¿y ella sería? _ hizo un movimiento con las manos preguntándole._ Aitana, la hija de Lautaro!_ le espetó. _¡¿Queeé se lo hiciste a la hija de tu amigo?! _ dijo llevándose la mano a la cara _ Esto es peor de lo que pensé. _ Ni me digas. Esto es un desastre... imaginate, tuve que fingir que no la conocía _ resopló molesto_ Sinceramente, no supe que hacer en ese momento. Y resultó ser una niña malcriada y arrogante._ Ay viejo... no sé que decirte. Al menos ya sabes quien es ella... algo es algo. Ya dejáras de pensar en una extraña, para pensar en la hija de tu amigo, y mantener tus manos lejos de ella.Nick lo miró un instante. _¿Te he dicho que eres un idiota sin remedio, no? _ dijo molesto Nick._ Si, a diario _ Le dijo Paul riendo mientras
Verónica observaba desde lejos con curiosidad, la escena entre Julián y Nick. _ ¿Qué se traen estos dos entre manos? _ dijo intrigada frunciendo el ceño _ Acá hay gato encerrado. Los veía charlar, y quiso saber qué era lo que tanto hablaban. Así que lentamente y con mucha seguridad se fue acercando hacia los hombres, Paul la vió venir y decidió intervenir para dejarle una vez más el camino libre a su amigo. Así que decidió salir al encuentro de la mujer. _ Señorita Verónica _ le dijo sonriendo amablemente, mientras Nick y Julián se estaban yendo _ Por favor, hágame el honor de bailar conmigo... ¿Quiere? Ella lo miró con fastidio, pero al ver que los hombres se alejaban, no tuvo más remedio que aceptar. "Quizás logre sacarle a este tonto la verdad, debo saber que es lo que está sucediendo " pensó divertida. Algo que siempre pasaba con Paul, era que siempre lo subestimaban. Posiblemente fuera por su cara de bonachón y que siempre sonreía o hacia bromas. Pero era un hombre extremad
Ambos se quedaron uno frente al otro mirándose fijamente a los ojos, ellos podían detestarse mutuamente, pero era evidente que existía entre ellos una gran química, imposible de dominar._ Terminemos de hablar de una vez... ¿Me llamaste para eso, no? Ella ya ni sabía para que lo había llamado. Lo que sí sabía era que quería irse de ahí lo más pronto posible porque temía quedar nuevamente en brazos de ese hombre. _ Creo que ya no tenemos nada más de que hablar _ le dijo por lo bajo ella _ Todo está perfectamente aclarado... Si, lo habían aclarado y sin embargo parecían no tener absolutamente nada en claro. Nick suspiró profundamente y la miró sonriendo con deseo pero sabía que ella se había vuelto en una mujer prohibida para él, que no podía darse el lujo de cometer una estupidez que lo llevara a arruinar todo con su amigo y socio.Aitana lo miraba desafiante, poniendo límite con sus brazos al amarre que él le había hecho con los suyos. _ Sueltáme _ le ordenó ella _ Ya hemos termi
Nick fue el primero en volver a la fiesta. Afortunadamente nadie se dió cuenta de su desaparición ni de su cambio de ropa. Trató de disimular su molestia sonriendo a aquellos que lo saludaban. _ Diablos amigo, ¿Dónde te habías metido? _ le dijo Paul muy preocupado _ ¡Pensé que iba a tener que soportar a esa mujer durante toda la noche!Nick lo miró por un instante. Tenía los ojos cansados y con una expresión vacía. _ Ya estoy aquí... no me extrañes más _ le dijo bromeando _ ¿De qué mujer me hablas? _ De la tía de tu princesa. He querido toda la noche hablar con aquel caramelito _ dijo Paul señalando con su cabeza a Pilar, pero esta mujer es como un pulpo... ha estado conmigo solo para saber de ti, así que ahora que viniste, te la dejo... ahí viene... _ ¡Eh... no Paul... no te vayas! _ le rogó Nick, pero él otro ya se había ido. Dió media vuelta y allí estaba Verónica, mirándolo divertida. _ ¿Estás mejor de tu problema estomacal? _ le dijo sonriendo ella. El hombre no entendía de