Capítulo 29

Me siento completamente acorralada. El dinero que dejó Françoise, duró menos de lo previsto. Poco a poco he tenido que ir vendiendo mis joyas, para poder mantener mi estilo de vida. Lo poco que pude traerme de la casa, ya está casi liquidado.

Es hora de trazar una estrategia y de poner en marcha mi plan. Debo salir ya de aquí, no soporto ni un minuto más esta situación. Además, que ya Armand me tiene cansada con sus exigencias, ¿qué se cree el muy infeliz? En estos momentos sólo puedo pensar en mí, ya se volvió un estorbo, me molesta que se crea mi dueño, no ha aprendido que ¡YO no tengo dueño!

El no tener a Ann Sophie aquí, me ha sentado de maravilla, me ahorro la niñera, la comida, y estoy con la tranquilidad de no tener responsabilidades que me aten. A veces la extraño, sobre todo cuando mi cuenta decae y tengo que vender mis joyas porq

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