Los viajes de Jessica al departamento se han vuelto constantes.

Jordan ni siquiera hace ni dice nada, quería acercarme y echarla, pero estaban juntos antes de que pensara que podría estar embarazada. No se los prohibiría, pero tampoco me quedaría allí con seguridad. El padre de mis hijos también trató de hablarme, pero no quería, no quería excusas de su parte, solo quería que cumpliera su palabra de estar conmigo y los bebés hasta los primeros meses de sus vidas.

Para completar, sueño todas las noches con el avivamiento que tuvimos y, me duele el pecho sin explicación, no quería sentir eso por alguien que no sea mío. ¿Cómo pude en tan poco tiempo crear sentimientos por un estúpido?

— ¿Samantha? ¿Todo bien para ti si tomo prestado este vestido? voy a salir y no traje nada aqui.— la morena entra a mi habitación sin siquiera llamar.

— Es mi vestido favorito Jessica.— digo y ella pone los ojos en blanco y toma el vestido de todos modos.

— Vamos Sam, ya no te queda bien. Mira cómo está tu