La voz del hombre era solemne.

Gwen se mordió el labio y no pudo evitar volver a sentirse culpable por su insensibilidad. Lo sombrío de su tono le hizo darse cuenta de que había vuelto a sobrepasar sus límites.

Se mordió el labio y se giró para mirarlo.

Se había dado la vuelta porque pensó que sería más sincero pedirle disculpas cara a cara, pero para su sorpresa, cuando él la vio girarse, el hombre extendió las manos hacia las orejas preparándose para quitarse la máscara.

"¡Espera!". Gwen enarcó las cejas y le detuvo. "No te quites la máscara...".

Sus manos se pusieron rígidas. Frunció el ceño y preguntó en voz baja: "¿Por qué no?".

Ya se había preparado para este momento. Después de todo, no tenía sentido seguir viéndose así, y pensó que podría revelar su identidad a Gwen de una vez por todas.

Nunca pensó que Gwen cambiaría de opinión en el último momento.

"Yo...". Gwen se giró rápidamente y evitó su mirada. "Joshua me habló de tu situación".

Las cejas del hombre se fruncier