Ivanna, al parecer no esperaba mi contraataque, porque esta asombrada e incluso, no es capaz de decir algo, por lo que, yo aumento mi drama, llorando aferrada al pecho de Kendrick.
— No puedo entender como puede ser tan cruel con el pequeño. Taddeo solo quería estar con su madre y tú usaste eso a tu conveniencia, incluso fuiste capaz de enviarle mensaje para que saliera de casa, que cruel.— ¡Eso es porque sabía que Kendrick no me dejaría verlo! — grita Ivanna.— Bueno, no es la manera correcta de decirle al padre de tu hijo que fingiste tu muerte y que ahora quieres volver. — digo con molestia.— No quería fingir mi muerte, es solo que ese bastardo era molesto, solo quería llorar y tomar leche de mi pecho, en cambio yo quería seguir bebiendo y disfrutar la vida. — dice Ivanna con molestia.— Entonces, sigue disfrutando tu vida, Ivanna. Porque en loSintiéndome inmensamente feliz, abrazo al hombre que me gustó desde hace muchos años y que por precaución, tarde en aceptar, porque tenía miedo en el poder que tendría sobre mí. Pero, ahora no me importa.De todas maneras perdí alguna ventaja desde que me enamoré de él. Así que, disfrutar de lo bueno, en vez de pensar en lo malo, no me hace tonta. Porque realmente quiero disfrutar inmensamente de él.— Deberías tomar las cosas con calma. — digo y él me sonríe.Lentamente, me alejo de sus labios y veo la sonrisa de Kendrick cuando me observa.— La hemos tomado por meses, querida. Así que, solo estamos tomando lo que hace meses debimos tomar, cariño. — dice Kendrick, colocándome suavemente en la cama.— Parece que conoces este lugar a la perfección. — susurro.— Crecí en
La locura me invade y no sé si es por tanto tiempo en abstinencia, si es por mi deseo sexual hacia mi jefe desde hace años, todos los besos y caricias que nos hemos dado siendo o no novios, o la sumatoria de todo, lo que me lleva a ser en estos momentos insaciable.Porque aunque sus ataques son bruscos y firmes, yo deseo más. Incluso cuando siento que puede romperme en cualquier momento, yo deseo más, porque mi cuerpo, desea mucho más de lo que puede soportar.‘Cada momento que imaginé ser suya ahora se está volviendo realidad.’ Me digo mentalmente.La emoción de que mi amor platónico sea en estos momentos quien intente hacerme madre, es un placer supremo que me hace soportar cada movimiento fuerte que hace contra mi cuerpo, para profundizar más en mí.— Fue una buena idea venir aquí. Con nuestros gemidos hubiésemos despertados a todos en la casa. —
Mi cuerpo cae sobre el pecho del hombre que tanto desee al ser su secretaria y este, me abraza besando mi cabeza, demostrando cuan feliz se siente porque este con él. El agotamiento me invade, pero, mi cuerpo recién satisfecho, no me deja dormir, como tampoco lo permite mi cerebro.Ya que, aunque he recibido muchas atenciones agradables de Kendrick, nada se compara con su confesión de amor. Una que necesito confirmar después del sexo, para no relacionarla al calor del momento.— Yo…— Espera un momento. — dice Kendrick dejándome a un lado, para posteriormente levantarse de la cama.Kendrick no me mira, si no que, se marcha al baño y yo no me quejo, ya que, su espalda y trasero, son una buena vista de la que nunca me cansaría. Por ello, aunque surgen pensamientos negativos de un posible rechazo, rápidamente son desechados, porque Kendrick ha sido demasiado bueno, para ser una aventura
Trago duro e intento pensar en algo cuerdo que decir, pero, no me es posible mencionar algo cuando su confesión es algo que no me esperaba. Después de todo, ¿Quién en su sano juicio pensaría que mi serio y respetable jefe tenía pensamientos lujuriosos conmigo?— No sabes el alivio que sentí cuando la mujer que por momentos me hacía pensar cosas placenteras, se llevaba bien con Taddeo. Fue por eso que no dude, ¿acaso no notaste que desde el principio te traté diferente? — pregunta Kendrick.Un recuerdo vago aparece de chicas de la mansión de Kendrick opinando lo mismo. Pero, ni antes ni ahora me atrevo a confirmar ello.— No lo sé, no conocía su forma de actuar en su casa.— Bueno, no es normal para mí hacerle un oral a mis empleadas, Shantelle. Eso debió darte una señal clara de que te trato diferente.— Eso aun no lo
Kendrick realmente está determinado en acabar conmigo, porque al poco tiempo de estar duchándonos, el agua de la tina se derrama, porque él me ha posicionado para poder quedar él sobre mi cuerpo y así, adentrarse en lo más profundo de mí.Aunque estoy agotada, las sensaciones me hacen mantener despierta aferrada al cuerpo húmedo y resbaladizo de mi esposo insaciable que gime en mi oído, causando que su voz sea el estímulo en mi cuerpo para no saciarse.En este punto, ya no me importan lo fuerte que gima ni mucho menos, si alguien llama a la policía porque crean que me están matando. Ya que, básicamente es lo que sucede, me están matando de la forma más placentera posible y lo peor, es que sabiendo ello, se lo permito.‘Así de lujuriosa me ha vuelto.’ Me digo mentalmente.— Creo que te he arañado. — susurra Kendrick.&
Horas despuésPoco es lo que he dormido y la verdad, creo que la falta de sueño se me va a notar durante el día, porque el desgaste físico es grande. Mi cuerpo, cede ante la fricción y yo saboreo el orgasmo que se acumula en mi cuerpo.— Déjate llevar, querida. — susurra Kendrick y yo quiero golpearlo por hablar de forma pausada, baja y ronca.— No hables, tu voz ahora me excita y no creo que pueda más.— Bueno, seis orgasmos en nuestra primera noche nos dice que tu cuerpo puede y mucho. — dice Kendrick atacándome de forma menos violenta, pero, igual de satisfactoria.No puedo quejarme, aunque siento mi intimidad quemada por tanta fricción y que mi cuerpo arde con el sudor, porque he sido arañada por sus agarres violentos, no puedo quejarme.Porque cada cosa que experimente durante la corta madrugada, aunque no era lo que imaginaba ni lo que podía
Rápidamente, me marcho al baño y como medida de seguridad, tomo las llaves del pomo de la puerta y cierro con seguro, para quitarme la poca ropa que tengo, con la seguridad que no seré sexualmente abordada por mi lujurioso esposo.— ¡¿Por qué le colocas seguro?! ¡¿A qué le tienes miedo?! — grita Kendrick golpeando lo puerta.No respondo, con lo agotada que me siento, toda energía que puedo usar para hablar, mejor la uso para moverme. Ahora mismo estoy en energía de reserva y responder a Kendrick que es como un ladrón de energía, no sería muy inteligente de mi parte.— Contesta, mi señora Cappelletti. No me castigues con el látigo de tu indiferencia. — pide Kendrick y yo lo ignoro, para entrar a la ducha donde con agua fría tensiono hasta mi alma.‘El agua fría debe despertarme, ¿verdad?’ me pregunto
En poco tiempo, los Cappelletti ya están listos al punto que han rentado una casa rodante lo suficientemente grande para dormir los cinco en esta. Aunque me había esforzado en tomar comida para llevar, apenas vi el gran bus, supe que era innecesario hacerlo.— Mejor preparémonos con un poco de ropa para cada uno, ¿pueden ayudarme con ello? — pregunto al servicio doméstico con temor de que me digan que no soy la señora de esta casa.‘Debiste hacer las cosas por tu cuenta. No estás en tu casa para ordenar.’ Me digo mentalmente.— Lo siento, intentaré hacer…— No se preocupe, señora Cappelletti, nosotros nos haremos cargo.‘Señora Cappelletti… se escucha tan irreal.’ Me digo mentalmente.— Solo llámenme Shantelle.— ¿Por qué deberían llamarte así? A mí no me llaman Ken