Capitulo 2

Dasha

El rojo de mi cara no a desaparecido desde que vi a Dylan desnudo, sonrío nunca vi a ningún hombre desnudo completo, sin camisa ya estoy cansada ya que los lobos les gusta alardear de su musculatura pero ninguno la tiene tan bien formada como el.

Estoy limpiando los pisos que conectan al jardín siento una mirada fuerte pero no veo a nadie, quisiera ser como los de mi especie, tener los sentidos agudos, correr con rapidez, conseguir mi mate, siempre quise una relación parecida a la de mis padres, llena de respeto y amor, pero nada es como uno lo desea sin lobo no tendré mate, por qué no puede oler mi esencia, si fuera humana sería perfecto por qué si tengo un mate destinado el si podría llegar a mi.

Estoy limpiando con mis shorts ajustados y mi camisa de tiros, no traje mucha ropa y la que tengo es vieja pero me gusta.

Veo a uno de los soldados que cuida la mansión acercarse a mi— Dime Muñeca, me han contado que eres la esclava del Alpha, que puede hacer contigo lo que quiera, no veo la hora que se canse de ti y nos deje jugar contigo— Me tenso.

Por instinto golpeó su mejilla— Mira perro sarnoso no tienes el derecho de ofenderme, vine a trabajar y si es verdad el alpha me compro pero no para lo que estás insinuando—

Veo irá en sus ojos y me asusto, cuando cierro los ojos por qué me va a golpear, el golpe nunca llega, abro mis ojos y la imagen que llega a mi es a un hombre sangrando por la nariz y un enojado dylan.

— Esto va para todos, aquí no se tocan a las mujeres, se cuidan, el soldado que vea faltando el respeto a cualquiera de las mujeres de esta casa, lo voy a castrar y se los echare a mis bebes—

Sus bebés no entiendo, tiene hijos.

Me mira y sus ojos cambian a rojo, me acuerdo que eso pasaba cuando estaba muy enojado.

Lo veo irse y quiero seguirlo para darle las gracias pero mirar al soldado me hace correr adentro de la casa.

— Dios esto solo me pasa a mi—

— Hola chica, sabes que hablar sola es un síntoma de locura— Me dice una hermosa chica, santo cielos es lindísima, va vestida con ropa que huele a nuevo, será la señora de esta casa.

— Disculpe, no quise molestarla— Cuando me voy, ella vuelve hablar.

— No te conozco, eres nueva en la casa, mi primo me presento todos los empleados cuando llegue—

Es su prima.

— Me llamo Dasha, soy nueva trabajando aquí, apenas llegué hoy, pero creo que los problemas me persiguen—

— Hola Dasha soy Luna y no te rías, mi madre tenía una obsesión con la diosa luna—

— No iba a reírme, solo te iba a decir que tu nombre es hermoso—

— Muchas gracias, sabes me has caído bien, estoy sola casi todo el día, cuando las empleadas me ven corren despavoridas como si yo las voy a meter en problemas con Dylan, necesito una amiga, quieres ser mi amiga Dasha—

No se qué decir, en mi vida solo he tenido una amiga y es Mariana, hablando de ella debe estar muy preocupada.

— Si somos amigas puedes prestarme tu celular— Sonríe.

— Claro que si, te espero a las 7 en mi habitación, dile a Teresa que te indique dónde queda, llevas gaseosa y galletas para que hablemos un rato—

Se despide y está chica me a caído bien, voy en busca de Teresa para que me indique qué haremos para la cena, siento un olor a tierra mojada ligado con chocolate, busco por todos lados pero el olor desaparece, solo veo pasar a Dylan y 5 hombres que se encerrarse en el despacho.

***********

Termine de ayudar en la cocina, ya estoy libre, voy subiendo las escaleras para ir a la habitación que me indico Teresa, cuando paso por la habitación de Dylan siento ruidos extraños, la puerta está entre abierta y mi curiosidad me mata, lo veo encima de una mujer de cabello negro, no se quien es ella, pero ella tiene sus piernas enroscadas en las caderas de el, mientras el se mueve.

Siento que me ahogo, estoy mareada como puedo llegó al balcón de la casa y me siento en el piso, el aire fresco me golpea el rostro, las náuseas son horribles no entiendo que me pasa.

Pasan unos minutos y me calmo, quizás me afectó ver ese acto sexual, nunca lo había visto creo que fue la impresión, me levanto y voy en busca de luna para distraerme un poco.

Llegó al cuarto donde creo que duerme y toco suavemente, sin previo aviso se abre la puerta y una sonriente luna abre la puerta.

— Pensé que ya no vendrías, pasa—

Entro y el cuarto es grandioso, nada que ver con la mini habitación que me asignaron, pero no debo quejarme por qué tengo un techo y comida.

— Estaba terminando de ayudar, y me distraje—

Ella asiente— Dasha una pregunta, por qué una chica tan linda como tú, trabajas como limpieza para mi primo—

— Es una larga historia—

— Tenemos toda la noche para escucharla—

— Cuando cumplí mis 16 años, no obtuve mi lobo es decir, no despertó o no tengo lobo, todo el mundo me rechazo y se alejaron de mi los pocos amigos que tenía menos mi mejor amiga Mariana, a la semana de ese evento hubo una emboscada y mis padres murieron en batalla, como no tenía recursos ya que mis padres tenían una deuda que nadie supo explicarme y perdí todo. Tuve que vivir los últimos 2 años en una casa de acogida hasta que para pagar la deuda  me vendieron para recuperar lo gastado, tu primo me compro y aquí estoy.. quizás suena masoquista pero me alegro que halla sido el y no otra persona...

— WoW, es sorprendente todo lo que has vivido en tu corta vida, yo apenas cumpliré 18 en 3 meses, vivía en otra manada con mi madre, mi hermano es beta de mi primo y mano derecha, me trajo a vivir aquí ya que en la otra manada han habido muchos ataques, mama no quiso venir—

— Sabes hubiese querido tener un hermano pero mis padres luego de mi secuestro solo se quisieron quedar conmigo—

— Si no cambiaría a mi hermano por nada, bueno puede ser que por mi mate— Dice emocionada y yo me pongo triste pero lo disimulo para que no pregunté sobre eso.

— Mira te voy a decir algo, Dylan no es malo es muy sobre proyector y antes muy cariñoso pero luego del asesinato de mi tía no es la mismo. Solo debes tener un poco de paciencia, mi primo no es mala persona—

— No digo que lo sea pero da miedo, desde que me compro no ha hablado conmigo, del chico que conocí no a quedado nada—

— Las actitudes de las personas se basan a experiencias vividas— No digo nada, por qué en parte tiene razón.

— Bueno iré a descansar, máñana será un largo día—

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo