5 años después.Los gemelos, pintan sus dibujos concentrados, mientras veo por la ventana de mi oficina.—Mami, Mijaíl está tomando mis crayolas—se queja Lucia de que su hermano la molesta como es su costumbre.—Deben compartir—digo cuando me acerco, entonces me inclino para darles un beso a cada uno en sus frentes—recuerden estar siempre unidos.—Lo siento—se disculpa mi pequeño Mijaíl, con una sonrisa de angelito.Pronto cumplirán cinco años de edad y últimamente me preguntan por su padre, no voy a negarles que hui de él, pero eso lo sabrán más adelante, simplemente cambio la conversación.Desaparecimos de su radar y el de mi familia llevamos una vida tranquilos, donde estoy jamás, nos encontraran a pesar de que llevo una empresa productiva, mi rostro no está plasmado en ninguna parte, nadie sabe a ciencia cierta quien es en verdad el dueño, utilizamos el rostro de la vice presidenta. Con mi abuelo tenemos un leve contacto, mi madre está con nosotros y vivimos felices, pero sé que
¿Como se atreve?—Intenta sonreír con sarcasmo o esto se nos ira al caño—ella hace el vano intento, no habíamos tenido este inconveniente antes, como es posible que con solo verlo se haya puesto así.—No se dé que habla, podríamos terminar con esto sin siquiera haber comenzado señor Novikov, debido a su falta de cortesía. —repite ella el discurso que le acabo de dar, un poco más segura.—No creo que sea falta de cortesía—se cruza de piernas restando importancia a nuestros reclamos—explicaba que hubo inconvenientes respecto al caso de cambio de persona.—Para eso existen los cellares.—Y los correos electrónicos—acota con cinismo—dígame ¿Qué le molesta? ¿Que haya venido yo o que no le crea que es la presidente de la compañía?Es un descarado de primera, aprieto los puños y llamo a mi asistente por teléfono, mientras me levando para salir del local.—Si—responde ella al instante—Pásame a ese desgraciado—Pero…—Es una orden—digo entre dientes molesta, me quedo en la parte trasera del r
¿Exige verme? ¿Quién demonios se cree ese ogro? —Que no lo dejen pasar de la recepción—ordeno de inmediato—no debe pasar del primer nivel. Es un hombre, muy caprichosos y si sospecha algo, hará lo que sea para descubrir la verdad, sea cual sea. La recepcionista pone el altavoz para que pueda escuchar la conversación —Lo lamento señor, pero, si sigue asi, llamaremos a seguridad —Dudo mucho que su presidente, arriesgue su identidad, por que si lo hace puedo publicar el fraude que están haciendo—¡desgraciado! —Dile que suba! —ordeno molesta por tal desfachatez. —Ya escucho—le dice la chica—suba al ascensor, piso 0 No se que cara tiene, es seguro que se esta preguntando si es una trampa. —¿Va a recibirlo? —inquiere mi asistente a lo que asiento. Ella asiente y sale, mientras activo el dispositivo de las ventanas, estas de inmediato se cierran y solo queda una luz tenue en el lugar. Me siento para esperar al ruso, y rogar que no descubra quien soy. Después de esperar varios minut
A mi parecer al ogro ruso, debo bajarlo de esa nube.—¿Como es que tiene mi número de celular? —aprieto los labios en frustración, y pido al cielo clemencia.Estuve tan tranquila y feliz con la idea de que no nos encontraría, y aunque me dolió, hizo su vida, que tenga sus propios hijos y que nos deje en paz.Llegamos a casa con la esperanza de descansar, pero creo que la presencia de ese ogro ruso de regreso en mi vida, trae consigo calamidad.Y, sobre todo, miedo…Dando gracias al cielo que hoy es viernes, dejo a mis niños arropados durmiendo como los angelitos que son.Coloco sobre el cabello una peluca de color rojo, corta, me maquillo y me pongo lentes de contactos, es la única forma en la que puedo salir.Rumbo a uno de los mejores clubes del país, intentaré despejar mi mente.—Hasta que al fin llegas—mi asistente Alina y Keyla, me sonríen, tomando mi mano y adentrándome con apuros hasta el lugar. Keyla también hace lo mismo, se disfraza para protegerme.—Lleno como todos los vie
Veremos quien tiene más poder.—¡Que agradable sorpresa! —dicta mientras entra a mi oficina, se sienta sin esperar a que se lo pida, cruza sus piernas como el empoderado que es.—Si, suelo darles el honor de estar en mi presencia—me burlo—Lo que no me sorprende es que se siga ocultando tras la cortina—Es por mi propia seguridad.—¿Solo la suya?—No es de su incumbencia, lo llamé, para informarle que podemos hacer negocios si así lo desea mientras se mantenga con la boca cerrada ante el resto de clientes.—Tiene miedo de perderlos.—Lo que no entiendo es su intención, ¿Qué ganaría con eso?—Su atención.—Esa ya la tiene.—Me intriga la razón por la cual se oculta ¿huye de algo?—No es de su incumbencia, ya accedí a su estúpido capricho ¿Qué mas quiere? No diré más, acepta lo que le doy o se larga de aquí, y haga lo que quiera. No crea que le temo Novikov.El silencio se apodera del lugar, lo veo, pero él no puede ver la expresión que tengo, lo veo como si todas las emociones se agrup
Ahora tengo la familia que jamás tuve.Sin mas problemas con el ruso, la semana pasa con mas tranquilidad, lo que me lleva a tener un mejor descanso tanto físico como laboral.—¡Bienvenida a casa!—abrazo a mi madre feliz de verla después de quince días, aunque estuvimos comunicación la extrañé demasiado—tengo tanto que contarte.—Lo imagino con la poca información que me diste por teléfono.—Señora—me habla el ama de llaves—sus invitados están aquí, ya está todo preparado en el jardín.—Muchas gracias—camino para recibir a mis invitados con mis nenes tomado mi mano—¡Bienvenidos! —Keyla, su esposo Oleg, y su cuñado vienen a nuestro encuentro.Los gemelos, corren hacia ellos, Matvey toma a Lucia y la levanta, ella ríe a carcajadas, para ser sincera la imagen es preciosa. Aunque no tienen a su padre cerca, Matvey ha sido para ellos una figura paterna.Con mi hija aun en brazos y sosteniendo la mano de Mijaíl, camina hacia donde estoy, sonrío al verlo, me regala un abrazo después de bajar
No recuerdo cómo se respira.Sigo pegada a su cuerpo, su pecho sube y baja, igual que el mío, no lo había visto tan desencajado.Toco su pecho y me nuestras miradas se cruzan,— ¿Por qué estas frustrado? Eres el hombre con mas paciencia de todo el mundo.—No es así cuando se trata de ti, desde que me dijiste lo del padre de los mellizos, temí, no solo por ti, sino por ellos. Son mis niños también, podría ser para ellos el tío Matvey, sin embargo, sabes bien lo que siento—toma mi mano y deja un beso en la palma de esta por unos segundos, que me parecen una bella eternidad.—¿Serias capaz de hacer eso por mí? De hacerte pasar por mi esposo, es a lo que me refiero.—Haría cualquier cosa por ti, y por tus niños…por mis niños.—No quiero lastimarte—acaricio su mejilla y siento mi corazón romperse— eres un hombre excepcional.—Lo sé, pero quiero una sola cosa, deseo que lo enfrentes y me digas si sigues amándolo.Me abraza, dejo que lo haga, cierro los ojos dejándome llevar por el momento, d
Eso de sentirse culpable, ya no es lo mío.—El descaro no tiene límites Margot—mi recatada madre, me acusa de que el plan de tener un esposo falso es descarado y descabellado. Eso que no se da cuenda de donde es que me voy a meter de vez en cuando.—Antes de señalar piensa en que lo hogo para que el ruso no se lleve a los niños—no dice una sola palabra pensando en lo dicho—si eso quiere empaco sus cosas y tu misma se los llevas.Nuestra relación no tuvo cambios, solo que ahora si me responde y yo a ella, somos personas sin ningún tipo de restricción, ya no está nuestro verdugo, aunque no fue el mejor padre del mundo, su muerte no fue exactamente linda, era un tirano, sin embargo, era mi padre.—¡No exageres! —rueda los ojos a lo que me acerco para darle un abrazo fuerte—no deseo eso, simplemente y estoy de acuerdo con Matvey, de que debes enfrentarlo, de frente es mejor así sabrás de donde vendrá el ataque.—Te quiero madre, pero, la decisión la tomaré por mi cuenta.Sin querer meterm