― Explica a detalle tu propuesta ― pidió el Rey con voz firme, lo que hizo callar todas las objeciones
― Todos saben que hace días estuve en el bosque, fui en busca de los lobos para pedirles su ayuda en esta guerra ― comenzó a explicar Serena
― Así es, involucraste a mi hijo en esa misión suicida y ambos volvieron muy heridos y al borde de la muerte ― protestó el primer ministro
― Pero volvimos gracias a ellos, los encontré, tuve una pelea con los lobos, yo hablé con ellos y aceptaron ayudarnos, si no hubiera sido por eso entonces su hijo y yo estaríamos muertos ―
― ¿Por qué aceptarían un trato contigo? ¿Ya olvidaron lo que paso con el Rey anterior? Fue comido por los lobos, fueron esas bestias las que destrozaron la ciudad ―
Las protestas generalizadas comenzaron, en la habitación todos recordaban la terrible devastación que sufrieron a manos del Fenrir hacia muchos años atrás, Serena ya tenía conocimiento de esto, pero no pensaba que las co
Serena no pudo contenerse más y se envolvió en una esfera de magia para ir a lado de su hermano, llegó hasta el campo de batalla y se puso frente a él ― Oliver soy tú hermanita, dime que aún puedes recordarme ― ella trató de que su hermano la escuchará, pero éste solo seguía avanzando ― Oliver te lo suplico, escúchame soy tú pequeña Abu ― ella no quería aceptar que su hermano pudiera olvidarla El enmascarado tomo su arma y trató de atacar a Serena, ella logró esquivar el ataque, pero no quiso alejarse o atacar a su hermano. En lo alto del muro Matías sabia que ella no respondería el ataque y tuvo que bajar rápidamente para asegurarse de que ella no se dejara morir a manos de su querido hermano Los ejércitos avanzaban, la guerra iniciaba nuevamente. Las catapultas comenzaron a funcionar, lanzando enormes rocas hacia los muros, algunas envueltas en llamas. La reina y los magos creaban escudos para evitar los daños, algunos otros destruían las rocas antes de que pudiera
― Anthony ¿Qué haces aquí? ― preguntó ella sorprendida― Vi que te estaban dando una paliza y pensé en ayudarte ― contestó él con una sonrisa engreída ― ahora levántate o nos mataran a ambos ―El escudo de diamante de Anthony aguantaba a la perfección la temperatura del ataque de Oliver. Serena se levantó y evaluó la situación ahora que tenía un momento de claridad ― Matías ya debe tener listo el hechizo, tenemos que distraer a Oliver para que pueda quitarle la máscara ―― No estás peleando con todo tu potencial ― le reclamó Anthony― ¿Qué? ―― He peleado contra ti, sé que tus habilidades en combate son mejores que esto, así que ahora me pregunto ¿Por qué no lo has vencido? ―― Yo… No puedo hacerle daño, él es mi hermano ―― Eres una tonta ― las pal
Arturo ya había retirado las suturas de la boca y ojos de Oliver, y las heridas estaban sanando gracias a su magia, aunque tardaría un poco de tiempo él se recuperaría por completo. Pero ahora enfrentaban una situación muy complicada. Serena estaba perdiendo el control y si no hacían algo pronto ella devastaría el lugar destruyendo todo a su paso. Pero ninguno quería hacerle daño, y aunque así fuera, la cantidad de poder que tenia ella en ese momento no podía igualarse con nadie en el lugar. La reina estaba tratando de encerrar a Serena en una capsula que le impidiera destruir las cosas, pero el Rey sabia que ella si hacia eso, entonces Serena se destruiría a sí misma ― ¡Detente! Si sigues con eso ella morirá ― ― Es mejor eso a que nos mate a todos ― contestó la Reina El Rey que conocía la verdad sintió una punzada en su corazón al escuchar que su esposa estaba dispuesta a dejar morir a su hija, sintió el impulso de decir la verdad en ese momento, per
― Claro, pero… ― ella o estaba segura de como recibirían a Oliver en la ciudad ― ¿Él puede venir conmigo? ― preguntó con la esperanza de que lograran aceptar a su hermano― Él debe ir como prisionero, en cuanto se acerque a la ciudad lo van a apresar ―― Pero él no hizo nada malo, todo esto fue culpa de ella, por favor, Matías ―― No es mi decisión, tendrá que ser absuelto por el mismo Rey para ser perdonado, pero dudo que eso suceda ―― Tranquila, yo estaré bien ahora que te he visto ― Oliver trataba de tranquilizar a su hermana, pero él también estaba nervioso y asustado por lo que pudieran hacerle dentro de la ciudad, había sido prisionero durante mucho tiempo y por nada deseaba seguir en esa situaciónAmbos fueron escoltados por Matías hacia la ciudad, al entrar las ovaciones no se hicieron esperar al ver a Serena entrar con Oliver, aunque todos pensaron que Oliver era un prisionero de guerra y que su heroína era ella. Realmente todos estaban felices de terminar c
Camino por callejones, entre sombras, cubierta con una gran capa larga que ocultaba su rostro, el sigilo con el que se movía la volvía imperceptible. Logró llegar al palacio, pero no podía simplemente presentarse y llamar a André, los guardias no le permitirían verlo y la llevarían a casa de Héctor en el acto. Usando el sistema de alcantarillado del castillo logró entrar, una vez dentro solo debía encontrar a su hermano. Una vez dentro una idea radical cruzo su mente ― ¿Para que buscar a André?, él no puede liberar a Oliver, si logró una audiencia con el Rey, quizás pueda convencerlo de liberar a Oliver ― con este pensamiento se dirigió a la alcoba principal. Paso por varios pasillos, ocultándose de los guardias, pero entre más cerca estaba del Rey, se encontraba con más y más guardias. No podría llegar a él sin ser vista. Logró llegar a la habitación, pero no podría pasar a los guardias personales del Rey que estaban justo en la entrada, sin darse cuenta golpeo una
― ¡No! ― el Rey interrumpió ― Esta bien, solo ha venido para hablar conmigo, la atenderé en el salón del consejo ―― ¿Qué? ― la Reina no entendía el comportamiento del Rey ― No te quedes a solas con ella, deja que los guardias se la lleven ― ― Tranquila, ella no es una amenaza ― el Rey tomo las manos de su esposa para calmarla ― Volveré pronto, tú trata de descansar ― le dio un beso en la mejilla y se dirigió al salón ― vamos Serena ― ― Lamento haberla asustado majestad, con permiso ― Serena trataba de disculparse con su madre, lo que menos quería era seguir generando enemistades con ella, siguió al Rey hacia el salón del consejo Al llegar el Rey dejó entrar a Serena y pidió a los guardias dejarlos solos, los guardias se miraron entre sí por un momento antes de obedecer la orden del Rey. Cuando todos salieron el mismo Rey cerró la puerta
― Oliver y yo no somos hermanos de sangre, pero crecimos juntos y hemos pasado por muchas cosas juntos, desde niños él siempre me cuido y protegió de todo, incluso cuando fuimos llevados al campamento para entrenar, él siempre trató de hacer las cosas un poco mejor ― ― Si, recuerdo que André menciono algo sobre eso ― en ese momento el Rey estaba más curioso por saber sobre la vida que había llevado su hija ― Si, en ese lugar nos entrenaron para hacer muchas cosas, la líder nos entreno para ser parte de su ejército, Oliver siempre trató de resistirse a obedecer, por ello lo castigaban y torturaban. Pero las cosas fueron peor desde hace 5 años, en ese entonces Oliver y yo teníamos una misión importante en las costas de Neramar, se nos ordenó capturar a un mercader muy importante de la región, Oliver sabía que al hacerlo ese hombre moriría de una forma horrible, pero no podíamos negarnos o nosotros moriríamos en su lugar de una forma aún más terrible, sin embargo, confo
Serena terminó el relato con lagrimas corriendo por su rostro, omitió la mayor parte de los detalles turbios sobre sus vidas, pero necesitaba convencer al Rey Alfonce de perdonar a Oliver. Para ese momento el Rey tenia el estomago revuelto, una gran incomodidad en el pecho y un nudo en la garganta no esperaba que su hija hubiese tenido que pasar por todo eso en su corta vida, las lagrimas estaban contenidas, y su expresión era de disgusto. Sus sentimientos eran remolinos, yendo y viniendo entre el odio, la culpa, el amor… ― ¿Qué has venido a pedirme? ― dijo el Rey con dificultad y la mirada baja ― Yo… vine a suplicarle por la vida de mi hermano, si usted pudiera otorgarle su perdón, entonces por fin él podría ser libre ― Se hizo una pausa en la conversación, el Rey conocía las posibles consecuencias de perdonar a un prisionero de guerra, pero en ese momento estaba más preocupado por su hija, en ese momento no le importaba nada ni nadie más ― Si le otorgo el p