CharlotteAl llegar, mientras Fabrizio dejaba todo en el hotel, fui a encontrarme con las personas encargadas. Adriano se quedó durmiendo, al parecer todo esto hizo que tuviera una gran cantidad de estrés. Por supuesto se lo puedo decir que sus palabras en el avión me dejaron desconcertada y bastante emocionada, tal vez.La verdad no pude responderle algo, ¿Casarme con él? No tengo idea de que tan probable sea eso, pero lo único que sí tengo claro es que así como él ha demostrado hacer todo conmigo, yo también puedo hacerlo, en estos momentos siento que necesito a un hombre como él en mi vida. Al llegar allí veo a los cuatro hombres de Caruso, la persona a la que voy a empezar a distribuir la mercancía. Él es uno de los principales distribuidores y conseguir contacto con él es demasiado complejo. Entré moviendo mi cadera y haciendo resonar mis tacones, sonrío cuando lo veo allí sentado en aquella silla de piel, cuando me ve levanta su rostro y con una sonrisa me dice que siga, él ex
CharlotteDejó las cosas a un lado, mientras él estira su mano para poder llevarme hacia adentro, miró a mi alrededor todo está lleno de flores, pétalos de rosas por donde se mire.—¿Y todo esto? La verdad pensé ya te iba a encontrar descansando, ¿A qué se debe todo esto? ¿Hay algo que deba saber? —levanté una de mis cejas preguntaba con cierto grado de coquetería en mi tono de voz.—Te dije que de ahora en adelante haría todo para demostrar que estoy de tu lado y no solo eso sino también mostrarte que soy capaz de renunciar a mi vida como la conocemos tan solo por ti,—Que no es necesario que hagas todo esto hoy. Porque la verdad es algo que… —Él me sisea, para luego besarme con gran intensidad. —Mereces esto y más Charlotte —dice con su respiración agitada. Luego me levanta sosteniéndome de los muslos para besarme, apoya mi cuerpo contra la pared mientras siento su cuerpo presionado con el mío. Sus besos son intensos, mientras sus manos comienzan a tocarme con lujuria. Mis gemido
CharlotteLlegamos a la fiesta, antes de entrar, Adriano entrelazo su mano con la mía. Mientras con una sonrisa me daba a entender que él iba a estar ahí para mí. Al entrar nos recibió Caruso con una copa para cada uno. Entramos y pude conocer a unas cuantas personas que estaban allí, Adriano me tomó de la cintura acercándome a él. Pude sentir su olor delicioso entrando por mi. —Te ves hermosa… perfecta. —Siempre igual de adulador. Vamos a saludar a algunas personas. —Él besó la comisura de mis labios—. En este mundo, los contactos son lo más importante, porque si no los tienes los peces grandes te comen de un solo mordisco. —Eres muy sabia, por eso te voy a seguir toda mi vida. —Reí ante su comentario—. Aun no me has dado respuesta, sé que no me esforcé en pedirte matrimonio, pero las palabras fueron ciertas. Solo solté una enorme carcajada y caminé hasta donde estaban esos hombres. A lo largo de los años, he hecho todo para poder sobresalir entre todo este mundo machista. Muc
CharlotteNicol estaba allí parada allí apuntando a Adriano, sonreí mientras la miraba con desafío. —Me da bastante curiosidad saber ¿Quién te ayudó a escapar? porque la verdad no era tan fácil hacerlo, sobre todo tú no eres tan inteligente como para hacerlo. —Nicol aprieta sus manos, puedo ver como se llena de impotencia. —Siempre me has subestimado, siempre creíste que yo no era capaz de nada, pero te equivocas. Soy capaz de mucho y ahora haré algo que he estado esperando desde hace mucho. Hacerte sufrir poco a poco. —Es increíble que pienses que lo puedes hacer, deja de creer que eres más que yo, porque nunca lo has sido, nunca lo serás —espeté con seguridad. Eso sin duda hace que ella se enfurezca un poco, se nota como se le marcan las venas en su frente. —Eso es lo que dices ahora. Porque no te alcanzas a imaginar cómo sufrirás cuando el hombre que amas y tu hermana, seguramente estén comiendo gusanos debajo de la tierra.Ruedo mis ojos, porque normalmente cuando alguien hab
AdrianoAbro mis ojos lentamente, lo primero que veo es la imagen de Charlotte. Ella me observa con una sonrisa. Poco a poco llegan a mi cabeza los recuerdos de lo que pasó. El golpe que me dieron fue bastante fuerte. —Por fin despiertas —ella comenta con su tono de voz tranquilo—. De nuevo pensé que no ibas a despertar, que te quedarías así. Como que te gusta retar a la muerte. —Solté una leve carcajada.—Lo único que me importa es estar vivo para poder estar contigo. —¿Qué fue lo que pasó? ¿Cómo fue que llegaste con esa mujer? solo me fui a hablar con ese hombre y ya, por unos minutos y al volver a verte, estabas allí amarrado. Bajé mi cabeza, en realidad fue muy estupido de mi parte lo que hice. —Adriano, necesito que me digas la verdad, ¿Qué pasó? porque si te soy honesta, no creo que una mujer, una sola persona haya sido capaz de hacer todo eso. —No fue una persona… la verdad es que fue Donato el que me dijo que habláramos en otro lado. No tengo idea como él llegó allí, pero
AdrianoLuego de llegar, Charlotte fue a resolver sus asuntos. Mi destino era otro, uno que muchas veces le di la espalda. La rivalidad entre nosotros siempre ha existido, al menos no tan evidente de mi parte, sin embargo, él parece ser la parte controversial de todo esto, es su especialidad. Llegué hasta el lugar indicado, un lugar despejado, sin duda un lugar que guarda mucha melancolía. Puedo ver la tumba de mis padres allí, fue un desafío que casi no se puede lograr, que ellos quedaran juntos a pesar de todo. Subo mi cabeza cuando escucho los pasos de Donato viniendo hacia mí. Se escucha como carraspea con su garganta mientras su mirada se ve profunda, su rostro está marcado por unas ojeras infernales y su imagen se ve completamente alterada, diferente a como lo conozco, se ve dejado y sin duda alguna aturdido. —Aquí estoy Donato —le dije, gritando desde mi lugar. Él sonrió con amargura para luego caminar, dando unos cuantos pasos más para acercarse. —Sí, eso veo. Pensé que n
AdrianoEstar enfrentado a la muerte, es algo a lo que prácticamente uno no se acostumbra. A pesar de que pueda hacer algo constante en todo esto, las circunstancias cambian cuando es uno mismo que se enfrenta a esta una y otra vez. Todas las cosas que he vivido, tanto buenas o malas, pasaron por mi mente. Sobre todo la imagen de ella, esa mujer que me enseñó que el amor verdadero existe, pero que sin lugar a duda me enseñó que el amor puede vencer cualquier cosa. En estos momentos no hay nada más importante en mi vida que ella y pensar que después de haber encontrado el amor suceda todo esto. Observó la cara de mi hermano, su rostro pálido como un copo de nieve. De sus ojos brotan una que otra lágrima, mientras su mirada penetra en mí. Nos separamos luego del forcejeo, levanto mis manos y están manchadas de un tono rojo. Doy unos cuantos pasos hacia atrás, lo suficiente como para ver como Donato cae de rodillas mientras que por su boca también derrama sangre. Limpie mi mejilla, e
CharlotteEmpezar mi día, precisamente ese día, al lado del hombre que amo, simplemente no tiene comparación. No puedo dejar de mirarlo, no puedo dejar de sentirlo… porque él, Adriano me ha hecho cuestionarme muchas cosas de la vida, cuestionar el porqué hago las cosas y simplemente sí debo o no continuar con esto.Pensar que en algún momento de mi vida voy a estar sin él simplemente porque alguien quiere alejarlo de mí, imaginar que en algún momento lo puedo perder tan solo porque alguien quiere arrancarlo de mi lado, es algo que en verdad me aterra. Estar enamorado no es el mejor sentimiento del mundo, porque generamos ansiedad, tristeza y un sin fin de sentimientos incontrolables. Creo que lo que en verdad uno de los mejores sentimientos es poder tenerlo junto a mi y poder sentir todo lo que él provoca en mí. Me pongo de pie para ir al baño, sé que será un día largo, un día que no me gusta celebrar al recordar todo lo que sucedió ese día. Dejé a Adriano allí y abrí la ducha, que