AdrianoLuego de llegar, Charlotte fue a resolver sus asuntos. Mi destino era otro, uno que muchas veces le di la espalda. La rivalidad entre nosotros siempre ha existido, al menos no tan evidente de mi parte, sin embargo, él parece ser la parte controversial de todo esto, es su especialidad. Llegué hasta el lugar indicado, un lugar despejado, sin duda un lugar que guarda mucha melancolía. Puedo ver la tumba de mis padres allí, fue un desafío que casi no se puede lograr, que ellos quedaran juntos a pesar de todo. Subo mi cabeza cuando escucho los pasos de Donato viniendo hacia mí. Se escucha como carraspea con su garganta mientras su mirada se ve profunda, su rostro está marcado por unas ojeras infernales y su imagen se ve completamente alterada, diferente a como lo conozco, se ve dejado y sin duda alguna aturdido. —Aquí estoy Donato —le dije, gritando desde mi lugar. Él sonrió con amargura para luego caminar, dando unos cuantos pasos más para acercarse. —Sí, eso veo. Pensé que n
AdrianoEstar enfrentado a la muerte, es algo a lo que prácticamente uno no se acostumbra. A pesar de que pueda hacer algo constante en todo esto, las circunstancias cambian cuando es uno mismo que se enfrenta a esta una y otra vez. Todas las cosas que he vivido, tanto buenas o malas, pasaron por mi mente. Sobre todo la imagen de ella, esa mujer que me enseñó que el amor verdadero existe, pero que sin lugar a duda me enseñó que el amor puede vencer cualquier cosa. En estos momentos no hay nada más importante en mi vida que ella y pensar que después de haber encontrado el amor suceda todo esto. Observó la cara de mi hermano, su rostro pálido como un copo de nieve. De sus ojos brotan una que otra lágrima, mientras su mirada penetra en mí. Nos separamos luego del forcejeo, levanto mis manos y están manchadas de un tono rojo. Doy unos cuantos pasos hacia atrás, lo suficiente como para ver como Donato cae de rodillas mientras que por su boca también derrama sangre. Limpie mi mejilla, e
CharlotteEmpezar mi día, precisamente ese día, al lado del hombre que amo, simplemente no tiene comparación. No puedo dejar de mirarlo, no puedo dejar de sentirlo… porque él, Adriano me ha hecho cuestionarme muchas cosas de la vida, cuestionar el porqué hago las cosas y simplemente sí debo o no continuar con esto.Pensar que en algún momento de mi vida voy a estar sin él simplemente porque alguien quiere alejarlo de mí, imaginar que en algún momento lo puedo perder tan solo porque alguien quiere arrancarlo de mi lado, es algo que en verdad me aterra. Estar enamorado no es el mejor sentimiento del mundo, porque generamos ansiedad, tristeza y un sin fin de sentimientos incontrolables. Creo que lo que en verdad uno de los mejores sentimientos es poder tenerlo junto a mi y poder sentir todo lo que él provoca en mí. Me pongo de pie para ir al baño, sé que será un día largo, un día que no me gusta celebrar al recordar todo lo que sucedió ese día. Dejé a Adriano allí y abrí la ducha, que
Charlotte.Voy camino a casa junto con Adriano, no puedo pedir más porque desde el inicio de este día él se ha encargado de hacerme pasar muy buenos momentos, lo observó con disimulo a través del rabillo del ojo, a pesar de que no es una persona emotiva noto en su rostro que se encuentra feliz. Algo que sin duda hace que los niveles de dopamina de mi cuerpo se nivelen, él es la persona que hace que mi cuerpo y mi cerebro estén acorde a todo. De un momento a otro giro su cara directo a mi, estira su mano y roza la mía; llevé la mirada fijamente en su cara y dibuje una leve sonrisa, obviamente no sale desde mi interior por la fecha, pero trato de corresponder de la manera mejor posible. Imaginarme casada con él, imaginar que él es mío en todo sentido, es algo que me hace sentir de una manera indescriptible. —Estoy ansioso porque llegue aquel día en que estés vestida de novia frente a mi y jures darme todo tu amor —su voz provoca en mí miles de emociones—. No tienes idea Charlotte todo
Charlotte Fui a tomar algo, necesitaba pensar. Para mi no era nada fácil darme cuenta que mi hermana, la única persona que me ha importado más que mi misma, se quería ir de mi lado, solo por esto, por lo que vivo ahora. No puedo evitar maldecir, mi vida está cambiando y no sé si eso es lo que quiero. Mojo mi cara, esto es un completo desastre y al fin al cabo, yo me estoy convirtiendo en un completo desastre. Me giré cuando alguien abrió la puerta. —¿Me estabas esperando mi querida sobrina? —me dice Julie, entrando con un arma en sus manos—. No podía estar bien sin darte tu regalo. ¿Me extrañaste?—Tu nivel de confianza es tan grande que me sorprende, ¿estás segura que esto es lo que quieres? —Sí, quiero matarte el día de tu cumpleaños. ¿No te parece buena la idea? —comienzo a reír. Ella no me asusta. —La verdad, no entiendo porque sigues acá. Debí no escuchar a Lía todas las veces que me pidió que te dejara quedar en la casa. —Sí, ella es una tonta que cree que todos son buenos
CharlotteVer como una de las personas que más quieres en este mundo se muere desangrado enfrente tuyo, es algo que posiblemente iba a pasar en algún momento de mi vida, pero sinceramente no era algo que esperaba. Me agaché lo más rápido que pude para poder ayudar a Luciano, no obstante, así como le quitamos a la vida muchas veces, la vida también nos quita. Lía estaba en shock. Ella miró a su madre, quien intentaba escapar como diera lugar mientras se arrastraba. Mi hermana me observa, lo que menos quiere es que yo le dispare a esa mujer, ella se atraviesa una y otra vez. Sin embargo, el karma es poderoso. Adriano entra y observa la escena, con la mirada pude decirle todo y él no lo pensó mucho para dispararle a Julie.Siento que las cosas no pueden postergarse más de lo que debían ser, por mucho tiempo le di largas al asunto de esa mujer, teniendo algo de consideración con mi hermana. Pero, hay límites a los que se deben llegar.En ese momento, supe que era claro que no solo iba a
Luego de que Adriano aceptara escapar junto a mí tomamos el auto y conduje a toda velocidad, lo único que deseaba con todas mis fuerzas era salir de allí lo más pronto posible. Quizá esta es la decisión más difícil de mi vida, dejar a un lado lo que en verdad conozco, la mafia, las armas, el poder… pero ¿qué podría salir mal? simplemente quiero esto, no quiero quedarme sola, tal vez ese es mi mayor miedo. Al mirarlo a él, me di cuenta que estamos hechos el uno para el otro, que somos solo uno, almas gemelas que no deben separarse tan fácil. —Tranquila, todo irá a cambiar. Si eso es lo que quieres, así será. Por mi parte, no me queda más que tu, así que haré todo lo que esté en mi alcance para poder estar junto a ti. —habla con su tono de voz suave y al mismo tiempo afirmando seguridad. Me acerco y lo beso, sus besos son lo que me da la fuerza que necesito. Miro atrás, el pasado queda allí, esa parte que siempre estuvo en mi. Perder a mi hermana, fue suficiente para poder pensar qu
Charlotte. Me despierto completamente desubicada con un largo pitido en mi oído izquierdo, el cual provoca un completo aturdimiento; trago saliva, la cual está llena de sangre. A mi alrededor hay humo, se puede escuchar sonidos que no son fáciles de diferenciar. Trate de moverme para safar el cinturón de seguridad y sale desde mi interior un grito desgarrador. —¡Carajo! —expresé, al sentir dolor en mi vientre. Me duele hasta el alma, pero al ver que Adriano se encuentra aún inconsciente mi mente logra sobrepasar el dolor; como pude logré salir del auto, caí sobre el césped húmedo, pero logre nuevamente ponerme de pie e ir hacia el costado del carro donde se encontraba el amor de mi vida. La puerta se encontraba atascada, por lo cual debí forcejear con las últimas fuerzas que quedaban en mi, para lograr abrir, al cabo de unos cuantos minutos conseguí hacerlo, ya no solo estaba saliendo sangre de su pierna, si no que también de su cabeza. «Mi3rda, no te puedes morir, esto lo estoy