Me pierdo en esa pasión que se desliza por tu piel, me hundo en la humedad de tu cuerpo, me convierto en adicto de tu sabor, de tu aroma, de tu lujuria.AlexanderPierdo el control cuando veo a Isabella desmayada en el piso. La furia explota dentro de mi pecho provocando que vea rojo. Me giro hacia el tipo que se atrevió a tocarla y sin pensar descargo los puños sobre él una y otra vez sin darle tiempo a reaccionar o a responder.Cae al piso y sin perder tiempo me subo a horcajadas sobre él, intenta cubrirse, pero mis puños consiguen impactar en su cara una y otra vez. Escucho el crujir de su nariz, siento como la carne se abre a cada golpe y como la sangre salta en todas las direcciones posibles.Jadeo.Mis nudillos se tiñen de sangre, incrementando el deseo de acabarlo con mis propias manos, por lo que dejó de golpearlo y lo sujeto del cuello, ejerciendo tanta presión como me es posible. Se sacude debajo de mí e intenta soltarse, pero es una lucha en la que las consecuencias me impo
Tu mirada desata en mi interior una furia opresiva que no consigo definir. Me siento amo y esclavo, pero solo soy un niño tembloroso y asustado que no te quiere perder y tampoco quiere amarte.AlexanderNo sé qué hacer, no quiero revivir el dolor, no quiero volver a sentir que me muero, pero dejarla ir, intentar mantenerme alejado tiene el mismo efecto. Me siento incompleto, sin vida. ¿En qué momento se metió tan dentro de mí? ¿En qué momento me perdí en ella? ¿Qué fue lo que hiciste conmigo, Isabella?Quizás todos tengan razón y ya no vale la pena continuar negándolo, esto que siento, esta ausencia tan honda que me reclama su presencia, esta agonía de pensarla en otros brazos sabiendo que me pertenece. Esto es amor, no puedo darle otro nombre: necesidad, dependencia, adicción, apego, adoración.Me sentía el rey del mundo, pero no era más que un bastardo en busca de una reina, en busca de la mujer que fuese capaz de dominarme por completo, de someterme con su dulzura y su amor. Estoy
Atada a ti, aprisionada contra tu piel, tu alma, tu voz... atrapada en este laberinto de pasión en el que, solo tú, conoces la salida.IsabellaSiento el corazón arder, aún no puedo creer que las palabras de Alexander sean ciertas. Es tan inverosímil, tan etéreo y surrealista, que me parece estar soñando con el país de las maravillas. Unas semanas atrás ni siquiera teníamos idea de la existencia del otro, luego su obsesión con llevarme a la cama mientras yo intentaba huir de todo lo que produce en mí.Ahora estamos aquí, en su cama, envueltos entre sabanas, extasiados de placer y lujuria, mientras mi corazón late tan fuerte que me parece que va a explotar en cualquier momento. Su voz retumba en mi cabeza formando un eco infinito que me hace ilusionar a la vez que mi alma implora al cielo que esto no sea solo un sueño. No quiero despertar y ver que en realidad nunca sucedió.De verdad me ama, me pertenece y yo soy solo suya.Fijo la mirada en la suya cuando con su pulgar limpia la lágr
Ahora mismo quisiera verte, pero no te encuentro. Te escondes entre las sombras del miedo y atormentas mi espíritu.IsabellaPasa de medio día y no sé nada sobre Alexander, no se ha parado en la oficina en todo el día, he tenido que atender a varias de sus citas y aplazar otras para la próxima semana. Diseño, necesita la aprobación de Alexander para avanzar y adquisición, requiere también de la aprobación de los insumos y equipos nuevos.Rebeca no puede hacer nada para agilizar ningún trámite pese a su posición de poder dentro de la empresa.—Adelante. —La secretaria de finanzas entra en mi oficina cargando con más trabajo para mí.Perfecto, lo que me faltaba.—El pago de la nómina está listo, solo necesitamos la firma del señor Castle para aprobar los pagos y que los cargues al sistema. —Recibo los papeles; sin embargo, hasta que el jefe no aparezca, nadie podrá recibir su sueldo.—Bien, en cuanto llegue el señor Castle haré que las firme. —Sale y de nuevo me deja sola con mil cosas
Mi sangre hierve. Mi corazón se destroza. Mi alma gime. Y tú te burlas de mí.IsabellaLa piel me arde, siento cómo me incendio por dentro, como todo se derrumba en mi interior. Como el amor y el miedo se mezclan y se convierten en dolor, mientras Alexander devora la boca de su ex. Sus manos la sujetan con fuerza, como si no la quisiera dejar ir, luce posesivo y ansioso por tenerla.Mis pies avanzan pesados, no me doy cuenta de lo mucho que me he acercado hasta que al fin el hombre que me dijo que me amaba alza la mirada y en sus ojos veo la sorpresa por ser descubierto. No puedo pronunciar ni una sola palabra pese a que tengo miles para decirle.Aspiro intentando llenar mis pulmones, pero duele. Mis lágrimas caen desconsoladas al piso, al tiempo que una secuencia de todos los momentos en los que me demostró lo importante que era para él, pasan por mi mente hasta llegar a sus palabras de anoche: Te amo, Isabella, te amo y te pertenezco.Su voz resuena en las paredes, eliminando el mur
Agonizo pronunciando tu nombre. Estoy en medio del silencio susurrante de la muerte y de tu amor. ¿En dónde estás? Ven y hazme vivir de nuevo.AlexanderJuro que Laura va a pagar por lo que me hizo, no se saldrá con las suyas y así tenga que levantar piedra a piedra hasta encontrarla. Lo haré y entenderá quién soy de una vez por todas. Estoy seguro de que la madrastra de Isabella tiene mucho que ver en todo esto, pero no tengo cómo demostrarlo.No es una coincidencia que esa mujer me haya llamado para hablar y resolver la situación que nos rodea y, justo, Laura se presenta en mi departamento con la misma excusa. Pero cometí un error al acceder. No quería que me armara un espectáculo aquí en el departamento delante de Isabella y mi familia, pero fue peor haber ido con ella a ese restaurante.Por más que busco en mi mente, no recuerdo en qué momento colocó la droga en mi bebida. En realidad, las imágenes de anoche son demasiado confusas, ni siquiera estoy seguro de haber visto a Isabell
Un beso tuyo me devuelve a la vida, pero, en cambio, me das un adiós mudo y sin voz que me arrebata el corazón y el alma al mismo tiempo. Me conviertes en un condenado a muerte.Rogert (Inteligencia)No puedo hacer esto solo, necesito ayuda y no cualquier ayuda. Si no la mejor. Espero que no se encuentren al otro lado del mundo, jodiéndole la vida a algún idiota. Saco el teléfono satelital que siempre llevo conmigo y que solo tiene un número configurado. Disco la tecla de llamada y espero.—En un momento te atiendo, cariño —responde con voz agitada y deja la llamada abierta.Escucho los sonidos típicos de una pelea cuerpo a cuerpo, golpes, cosas partiéndose, cuerpos cayendo e insultos arrogantes y las burlas resabidas de mis amigos para provocar a sus oponentes. Un fuerte golpe resuena, algo se rompe y un grito retumba con intensidad mientras se pierde a lo lejos.»Listo, cariño, dime qué necesitas. —Ruedo los ojos.—¿Cómo sabes que necesito algo? —Subo al auto y apago los auriculare
El fantasma de mi deseo agoniza por un beso de tus labios, se engaña `por piedad. Ansia el aliento de vida que tu boca promete, que yo anhelo, pero es una mentira. Tú eres una mentira.IsabellaEsta es la decisión más difícil que he tenido que tomar en toda mi vida. Siento que mi corazón está envuelto en llamas, que ya no tengo una vida, que perdí todo al probar sus labios. Sabía que las cosas saldrían mal y aun así seguí adelante con toda esta mierda que me destruyó por completo.Hoy estoy a cientos de kilómetros de mi familia, del dolor, de la pena. Estoy lejos de todo lo que una vez llenó mi mundo de colores para luego aplastarlo de un solo golpe. Ahora estoy aquí, en una ciudad extraña, en un país diferente, rodeada de personas que no me conocen. Soy las ruinas de una mujer que intenta convertirse en una nueva, una que no volverá a cometer los mismos errores que la trajeron hasta este lugar.Ignoro si algún día volveré, pero si de algo estoy segura es que si la vida me hace regres