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Capitulo 4: ¿Nestor?

Al ver esta escena corrí a auxiliar a la señorita —¡Suéltenla!—grite de lejos para que los bandidos logren verme.

—¡La policía! Corre—Se fueron corriendo y no voltearon a ver, entonces me decidí hablarle a la señorita y preguntar dónde estaba, cuando la señorita levanto el rostro para agradecerme vi a mi amigo Néstor vestido de mujer, tenía un vestido rojo con una cinta negra en la cintura, unos zapatos de charol rojos y una peluca rubia, este me miro y se acercó gritando —¡MI HEROE!—, se me colgó del cuello

¡Gracias! ¡Gracias! Si no hubieras llegado que me hubieran hecho esos desalmados, ahora te voy a dar a ti tu recompensar, junto los labios intentando darme un beso.

Me asusté mucho al ver eso así que me solté y me fui corriendo —¡¿Dónde diablos estoy!?—grite mientras corría alejándome de Néstor que aún me seguía con la idea de querer darme mi recompensa, la cual no quería ni saber que era, corrí como si me persiguiera el diablo, después de alejarme lo suficiente me detuve para descansar y solo alcance a pensar una cosa; ¡ya no estoy en el mundo real!.

Camine sin dirección alguna entre pasadizos y callejones, pensando en lo que vi,—¿Por qué Néstor estaba vestido de mujer? Y ¿Por qué siento que estoy en una novela antigua de detectives?—, me detuve bajo de un poste que iluminaba toda una calle oscura y me pareció ver a alguien al fondo mirándome, pero con todo lo que había pasado hasta ahora no le preste atención

—¡¿Mónica dónde estás?!—grite como loco pensando que todos mis amigos estaban en ese lugar, pero no era así; atrás mío escuche un ruido, era como el que había escuchado en la montaña cuando aparecieron las puertas; voltee curioso y

que había aparecido una de color rosa, esta vez arriba decía Mónica; sin dudarlo me acerque corriendo y entré.

De nuevo caí a la nada y sin saber dónde estaba.

—¿Qué me esperara ahora? –Pensé mientras caía –Esto parece magia o una maldición después de ver a Néstor así—dije cuando vi una puerta aparecer al frente mío abierta, mientras caía cerré los ojos para esperar el golpe, pero no sentí nada.

—¡Yuhuuu! ¿Qué es esto?—Dije mirando al suelo al darme cuenta que estaba rebotando —¿El piso es de goma? ¡Genial!—

Me reía rebotando en el suelo y mientras intentaba equilibrarme para poder investigar donde me encontraba, —¿Dónde estoy? El mundo es ¡¿Un dibujo animado?!—Grite al ver el lugar donde estaba, todo parecía un dibujo animado, Las rocas tenían cara, las nubes me sonreían.

—¡Hola!—me dijo alguien desde arriba y cuando mire quien era, eran unas palomas que pasaban volando, –Ahora si me estoy volviendo loco—Dije, pero al verme las manos me di cuenta que no era así, yo también era un dibujo animado.

Me limpie los ojos pensando que estaba viendo mal, pero todo es real mis manos son gorditas, mis mejillas son grandes y tenía panza; era más pequeño y tenía una voz graciosa – ¿Este soy yo? ¿Dónde me he metido?—pensé ya más tranquilo, ya que después de haber pasado por lo de la montaña y ver a Néstor como mujer este mundo me pareció más seguro.

Camine por un bosque viendo a los animales sonriendo o jugando entre ellos, era algo muy cómico; también vi a unos cerditos jugando póker contra un lobo, pero el lobo estaba perdiendo.

—Qué mundo tan raro—pensé, camine buscando la salida de este lugar y a lo lejos escuche unas risas, me dirigí al lugar del sonido —¡Oww! Que tiernos—dije al ver unas criaturas pequeñas de color verde, tenían el cabello de color purpura, estaban llevando comida a una aldea que pude ver a lo lejos; así que las seguí.

—Que pequeñas casitas, pero también viendo el tamaño de las criaturas que me podía esperar—dije mientras seguía a los pequeñines con la comida, mientras

camine detrás de ellos vi un castillo enorme —ahí están llevando la comida—me dije, mientras miraba de lejos.

Me escabullí para ver que estaba sucediendo adentro, ya que de lejos se escuchaba música pude comprender que era una fiesta, entre al castillo y dentro habían dos tronos enormes —¿Quién gobernara este lugar, para ser así de grande el trono que usa?—al rato se escuchó un ruido que venía de un pasillo enorme.

—¿Mónica?—dije mientras la veía entrar vestida con vestido largo blanco perlado y una corono en punta, luego entro su acompañante y empecé a reírme —¿Qué hace Christian vestido así? esto debe ser una broma—Christian vestía un traje azul elegante muy pegado y una corona rosada, —Sabía que estaba comiendo demasiado, pero aquí está exagerando—estaba muy gordo y comía como un barril sin fondo cada vez que pasaba comida al frente de el

.

Me causo mucha gracia ver esa escena —¡Que buena música!—Comían y celebraban, bailaban y reverenciaban a los reyes; era una escena muy hermosa —¡Qué asco!—dije al ver como Mónica besaba a Christian, era una escena muy perturbadora

—Pero ellos en la vida real se odian o eso creo—pensé, pero en medio de la celebración una de las pequeñas criaturas verdes se tropezó, dejando caer una copa de vino dorada y ensuciando el piso.

—¿Qué paso?—me pregunte a mí mismo al ver como se detuvo la música y todos volteaban a ver a la reina asustados. —¡Corran!—grito una de las criaturitas y yo no sabía porque, entonces vi como la reina se ponía roja y crecía por la furia de ver la escena que hizo el pequeñín en su fiesta.

—¡Tu!—Grito Mónica muy enojada, agarro a la pequeña criatura y se la metió a la boca. —¡No!—grite al ver como entraba en su boca aún vivo, no puedo dejar que se los coma.

—¡CORRAN! Yo me encargo de ella—les dije mientras saltaba en frente de la reina con mi espada en la mano preparado para luchar. —¡JA! ¿Quién eres tu pequeño valiente? Y como osas enfrentarte a mí la reina de este lugar—me dijo Mónica con los ojos rojos de tanta ira.

—Soy Simón y vengo a detener esta masacre—le dije mientras le apuntaba con mi espada, la reina furiosa me lanzo el trono, salte a un lado para esquivarlo y logre evadirlo con las justas.

Christian se reía a carcajadas al ver como la reina me sometía lanzándome cosas, entonces vi un pedazo de pan tirado en el suelo y se lo lance a la cabeza —¡Auch!—grito el rey, Mónica al ver eso se enfureció más y empezó a crecer.

—Fue un gusto asistir a su baile pero ya debo irme—Les dije y empecé a correr.

Le lance una copa de vino al rostro para poder distraerla y aproveche cuando miro hacia otro lado, corrí escapando de la bestia que me quería matar.

—Nunca pensé que Mónica tenía tan mal temperamento—Dije saltando hacia un lado para esquivar una mesa que caía volando hacia mí, seguí corriendo escapando de la gigante y logre salir del castillo sin sufrir lesión alguna.

La reina me seguía cada vez más furiosa y más grande, todos los animales corrían despavoridos, intentando salvar sus propias vidas; pero no todos corrían con suerte, una sola pisada de la gigante y ellos desaparecían.

Esquive árboles y salte sobre algunos lagos escapando de una muerte segura, algunos animales me ayudaron poniéndose en frente de la reina o tapándole la vista tirándole frutas, —¡Quiero salir de aquí!—grite mientras corría con la esperanza de que aparezca otra puerta, pero nada pasaba; luego recordé que cuando pensé en Mónica apareció una puerta con su nombre al frente mío, así que pensé en Liliana, ya que ella era la más seria del grupo.

—¡Liliana! ¡Liliana! ¡Liliana!—grite con todas las fuerzas pero no aparecía ninguna puerta.

—Patitas para que las quiero—grite esquivando la mano de la reina que por poco y me atrapaba –No creo que te guste mi sabor, estoy muy salado—Le dije mientras huía de la bestia, hasta que llegue a una montaña y ya no tenía escapatoria.

La gigante estaba cada vez más cerca y yo me estaba desesperando, —¡Quiero ir con Liliana!—Grite con todas mis fuerzas y esta ve oí un ruido atrás mío.

—¡La puerta!—grite al verla pegada a la montaña, en ese momento sin pensarlo me lance hacia la puerta abierta y al voltear vi la mano del gigante que paso a través de la puerta intentando atraparme, pero yo ya estaba muy lejos de sus regordetas manos.

Mientras caía vi varias puertas con nombres pasando alrededor mío, algunos nombres los reconocía, otros no; pero lo que más me sorprendió es que no tenían fin; de un momento a otro caí a través de una puerta y caí sobre una cama.

—Estoy en mi habitación—dije emocionado —al fin pude salir de ese mundo tan raro, sabía que todo era un sueño—me levante de la cama y fui al baño, me moje el rostro para despertarme y me mire al espejo.

—¡AHHHH!—grite al ver mi reflejo, —¡¿ese soy yo?! Estoy diferente, tengo la barbilla más grande, tengo el pelo largo, tengo músculos y ¿Tengo vellos en el pecho?—me sorprendí al verme, regrese a mi habitación y me senté en la cama, estaba atur7dido por lo que vi.

Se abrió la puerta de mi habitación y entro Liliana.

—¿Estás bien cariño?—me dijo ella preocupada –Escuche que gritaste y subí lo más rápido que pude, ¿Todo está bien?—

Yo la mire asombrado, tenía el pelo suelto y se veía muy bien, un vestido amarillo largo y un delantal puesto, estaba maquillada y tenía unos tacos negros –Estas hermosa—le dije sin penarlo, ella se sonrojo y me dio un beso en la frente, en ese momento sentí un calor por dentro, mi corazón empezó a latir rápidamente y me sentí muy extraño; algo que nunca me había pasado en mi vida, pero solo alcance a mirarla y sonreír.

—Amor no te olvides que tenemos la cena con tus padres esta noche, así que báñate y cámbiate que estoy preparando unas cosas para llevar—la mire y asentí, cuando ella se fue me coloque la almohada en la cara.

—¡AHHHHH! ¿Dónde me metí ahora? ¿Por qué Liliana me dice amor? ¿Por qué se veía tan linda?—grite mientras pensé que nada de lo que está pasando tiene sentido, así que supuse que aún estaba dentro del sueño o de ese mundo extraño.

Echado en la cama reflexione sobre todo lo que ha pasado hasta el momento, primero llegue a una montaña que nunca había visto en mi vida con animales que creo que no existen, luego entre a un mundo que parecía una película antigua de detectives, después un mundo donde todos son dibujos animados y Mónica es un monstruo enorme, nada tiene sentido.

—¿Qué hago ahora?—di vueltas en mi cama pensando que puedo hacer. —Ya se cada vez que paso de un mundo a otro siempre es atravesando una puerta, de repente puedo encontrar una de esas acá—decidí buscar por toda la casa y probar suerte con cada una de las puertas.

—Esta no, esta tampoco, aquí nada—Intente con cada una de las puertas que habían en la casa, pero no tuve suerte; pase por la cocina y Liliana estaba cocinando.

—Huele muy rico—dije sin darme cuenta que ella también me escucho

—¿Cariño ya estás listo?—me dijo sin voltear a mirarme —Si—le respondí mientras me escabullía de nuevo a mi habitación.

—¿Qué estoy haciendo mal? ¿Qué me falta para poder ir a otro lado?—me repetía mientras caminaba en círculos en mi cuarto –A ver, cada vez que aparecía una puerta, era porque estaba en peligro y pensaba en mis amigos recordando mis momentos tranquilos antes de perderme aquí—pensé durante un tiempo.

—¡Ya se!—grite eufóricamente –Debo pensar en alguno de mis amigos y se abrirá una puerta, pero ¿En quién pienso ahora? Néstor me asusto al verlo vestido de

mujer, Mónica me quiere comer y acá no esta tan mal pero me siento raro; me quedan Camilo y Christian, así que decidí echarlo a la suerte.

Saque una moneda de mi pantalón –Si cae cara me voy donde Christian, si cae cruz voy donde Camilo—Lance la moneda y espere a ver que caía, entonces la moneda giro en cámara lenta, como si fuera una película de acción y cayo cruz.

—Entonces decidido voy donde Camilo—dije para mí mismo, cerré los ojos y grite —¡Quiero ir donde Camilo!—entonces al frente mío apareció una puerta con el nombre de Camilo arriba, así que me acerque decidido a atravesarla, pero antes de hacerlo cerré los ojos

–Que no aparezca nada extraño—pensé, abrí la puerta y salte.

Mientras caía por el túnel de puertas, pensé en como llegue a este mundo y porque son tan raras las dimensiones a las que llego, dentro de mi sentía que tenía la respuesta, pero no sabía cómo descifrarla —la caída está demorando demasiado—pensé mientras veía los nombres pasar al frente mío.

Al ver que demoraría en llegar a mi destino me puse a meditar a ver si encontraba respuesta alguna —¿Porque las puertas tienen los nombres de mis amigos? ¿Por qué los mundos coinciden con la personalidad de ellos?—mientras caía analice todo lo que paso –A Mónica le gustan los dibujos animados y los pequeños trolls, pero ¿porque ella reacciono de esa manera?; Néstor es fanático de las novelas de detectives; ¿pero porque estaba vestido de mujer? y por ultimo Liliana—me sonroje mientras pensaba en ella y recordaba cuando entro a mi habitación —¿Porque parecíamos una pareja de esposos? No tiene sentido, a ella yo no le gusto o ¿sí?—me dije cuando vi la entrada al siguiente lugar —¿Qué me esperara ahora?—

En ese momento atravesé la puerta y caí en un lugar con una apariencia antigua, parecía el renacimiento o el medio—evo con los castillos antiguos, las princesas y los caballeros.

—¿Dónde estoy?—Pensé mientras caminaba mirando las calles, parecía uno de esos libros de caballeros que me leían cuando era niño —¿Camilo?—vi a mi amigo a lo lejos coqueteando con unas mujeres así que decidí ocultarme y ver desde lejos.

—Un momento—mire asombrado detenidamente a toda la ciudad —¡Todas son mujeres!—grite asustado al darme cuenta que en la ciudad solamente caminaban mujeres, en cada tienda, en cada casa y en cada callejón solamente veía mujeres y el único hombre era Camilo.

En ese momento recordé que él es un Play Boy y que siempre intenta ligar con todas, así que sonreí de lado pensando en que hará el en este lugar; en ese momento alguien me sujeto del hombre

—¿Quién eres?—me hablo una mujer muy bella mirándome a los ojos

—Me llamo simón—le dije sonrojado al ver su hermoso cabello castaño y sus lindos ojos marrones tenia tez blanca y el cabello largo, llevaba una armadura pesada y una espada colgada al lado; parecía de la seguridad del pueblo.

—No sé quién eres pero debes acompañarme—me dijo mientras me jalaba del brazo, no entendía que estaba pasando, pero tampoco me opuse a ir con ella.

—Sabes que en este sueño todas son mujeres y si se dan cuenta que eres un hombre te mataran—me dijo mientras caminábamos fuera de la ciudad; en ese momento me puse a pensar que ella era como yo, estaba dentro de este mundo en contra de su voluntad.

—¿Quién eres?—le dije mientras me zafaba de su agarre —¿Sabes dónde estamos? Y ¿Qué está sucediendo?—

—Ten enteraras después—me dijo mientras me empujaba, en ese momento apareció una puerta atrás mío –Piensa en algún lugar donde quieras ir—

Mientras caía por el túnel de puertas, vi como ella cerraba la puerta por donde había caído y solo alcance a pensar que nada tenía sentido en ese momento.

—¿Por qué me dijo que esto era un sueño?—me pregunte a mí mismo mientras miraba nuevamente las puertas con nombres —¿Quién es ella? Y ¿Qué hace en este mundo?—Pensé en la razón por la cual yo entre y al ver que hay más como yo, pude darme cuenta que en algún momento encontraría una respuesta. Así que solo me puse a pensar en cuál sería mi próximo destino y como hallarle sentido a todo esto lo que está ocurriendo.

Mi vida estaba tomando un rumbo extraño y esto cada vez se ponía peor ya que yo no era el único en este mundo o universo o sueño como ella lo llamo.

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