Me pongo el casco y comienzo los entrenamientos, Andrea está raro, parece que quisiera decirme algo pero que no se atreviese del todo a hacerlo, no sé que sea pero como sea haré que me diga que es lo que mierda le pasa, de verdad me tiene preocupada.

Esquivo a Mateo, estaba tan distraída pensando en mi hermano mellizo que no lo había visto y no estamos para provocar un accidente hoy, ni tampoco ningún día, los accidentes le pueden costar la vida a alguno de los dos y lo último que yo necesito es sentirme culpable por la muerte de este inútil.

Termino la vuelta sin estar del todo cómoda, este nuevo compuesto me molesta, se desgasta rápido, ya lo dije ayer pero me hacen poco caso, algo que por cierto me cabrea.

Bajo de la moto molesta, me quito el casco y resoplo al ver a Roberto Cavalli, este hombre colma mi paciencia, me reprendió al llegar a Estados Unidos porque todas las caden