No había pasado ni quince minutos, desde que Alejandro, se había ido, cuando volvió a sonar el timbre de la casa de nuevo, ella como estaba perdida en sus pensamientos, no lo escucho la primera vez, hasta que volvió a sonar de nuevo y de inmediato se preguntó ¿quién será ahora?Luego de hacerse esa pregunta, fue a la puerta y ver quién era, y apenas había abierto la puerta, se dio cuenta de que era Alejandro de nuevo. Ella de inmediato lo miró mal y le preguntó: ¿qué quieres ahora?Y de inmediato volvió a decir, o se te olvido amenazarme con algo más.Alejandro la hizo a un lado y entro sin esperar que ella le diera permiso. Luego de ya estar a dentro, le dijo: le prometí a mi hijo que hoy dormiría con él, pero como te lo trajiste sin decirme nada, me toco buscar tu dirección por todas partes, porque no le quiero incumplirle la primera promesa que le hice a mi hijo, así que, como vez hoy me quedaré a dormir aquí.Kelaya solo se apretaba el puente de la nariz sin saber qué decir, y com
Después de un rato, Alejandro, al ver que Kelaya, se había quedado dormida, comenzó a tocarle muy delicadamente su rostro, mientras le decía: "por qué eres la única mujer que en un instante me haces enojar, pero también me hace querer ser una mejor persona para ti y mi hijo.Él que estaba con sus pensamientos, cuando miró que su hijo abría la puerta de la habitación, diciendo, mami, tengo hambre. Alejandro, al ver a su hijo, se levantó despacio para no despertar a Kelaya, luego le puso una almohada para que la abrazara, mientras le decía a su hijo que hiciera silencio para que su madre no se despertara y se lo llevaba a la cocina, para ver que le preparaba de desayuno.Después de estar en la cocina, le preguntó al niño, ¿qué quieres para desayunar?El pequeño le respondió que quería desayunar con omelette y tostada con sirope de chocolate, pero Alejandro, que no tenía ni idea como se hacía, le dijo: "Mejor comamos sándwich, que es más saludable y fácil de hacer", y se dispuso a buscar
Kelaya de inmediato le respondió: ¿Me tienes que dar una semana para esto, ya que mañana muy temprano me voy de viaje y no puedo aplazarlo?Alejandro le preguntó ¿y para dónde te vas?Brasil le respondió ella.Alejandro se quedó un poco callado, para luego preguntarle de nuevo ¿y qué vas a hacer a Brasil?Kelaya le dijo, voy por trabajo, pero en una semana estaré devuelta y por esto no nos podemos casar como tú quieres.Él le preguntó ¿y con quién vas a dejar al niño?Al principio me lo iba a llevar conmigo, pero lo dejaré con su madrina, ya que mi hermana ha estado muy ocupada en su negocio para dejarlo con ella.En ese momento, Alejandro le dijo: ¿Y por qué mejor no lo dejas con mis padres? Y te puedo asegurar que con ellos estará muy bien cuidado y estos serán los abuelos más felices cuidando de su nieto.Ella, sabía que esto iba a pasar, si este hombre se enterara de su viaje, ya que desde que supo que tenía un hijo, pretendía saber todo sobre los movimientos del pequeño. Así que
Kelaya en ese momento se dio cuenta de que, en parte, él tenía razón, ya que ella, si no hubiera sido amenazada por él, no le fuese dejado compartir en ningún momento con su hijo, ni siquiera el niño se hubiese enterado de que tenía un padre y con estos pensamientos en su mente, se fue a su habitación sin decirle nada, puesto que odiaba darle la razón a este. Además, ella lo quería evitar porque se había dado cuenta de que ese hombre le gustaba mucho más de lo que ella quisiera y era mejor tenerlo lejos y así evitaría enamorarse de aquel hombre.Alejandro, que no necesitaba una respuesta de ella, de inmediato entendió que era así como él, se lo había dicho y seguiría haciendo su voluntad, si ella se negara a sus sugerencias.Al día siguiente, ella le había empacado las cosas a su hijo, para que se quedara con sus abuelos, luego paso a dejárselos a esto, y antes de irse, le dio un listado de lo que podía comer y lo que no su hijo.Los señores muy felices cuando se enteraron de que se
Alejandro, al ver que su hermano estaba hablando de esa mujer como si se tratase de una santa, así que le dijo, algún interés debe de tener en medio, porque uno no ayuda así, por así.Fabián le respondió: ¿Acaso olvidas que tú también tienes una fundación? Que no estés a cargo de ella ahora es diferente, pero antes de que tu mujer muriera, te gustaba ayudar, así o más que Susan Jos.¿Ese es su nombre?, preguntó Alejandro.Ese es su seudónimo, ya que nadie sabe cómo es su verdadero nombre, le respondió, Fabián.Alejandro luego le dijo: volvamos a nuestro tema principal, puesto que nos desviamos un poco, ¿Cuál es el plan que tienes en mente?Fabián le respondió: quiero que ella promocione nuestros productos.Entonces hazlo, le dijo Alejandro, con su voz escéptica. Hay un problema, ya que ella no ha hecho publicidad a ninguna marca, luego dijo bueno a una sola, la cual se trata de una que venden accesorios, puesto que siempre que va a un evento público lleva puesto algo de esa tienda y
Kelaya, que había pensado durante un instante que aún, él no era consciente de que era ella, pero no había terminado sus pensamientos internos. Cuando él ya se había marchado, ella le dijo de inmediato a su asistente que por hoy dejarían allí, para continuar con la firma el día siguiente, que le notificara a Kevin. Tomó su bolso y su teléfono, y se fue dejando a su equipo solo con toda la gente que faltaba por autógrafos.Kevin, que sabía que eso iba a pasar, ya tenía todo solucionado y solo había hecho planes para firmar solo la mitad de las personas y la otra parte la había dejado para el otro día.Cuando Kelaya llegó a la cafetería, Alejandro ya estaba esperando en la mesa más apartada. Ella apenas lo miró, se sentó al frente de él y le preguntó: ¿Qué quieres de mí?A Alejandro le pareció familiar esa voz y de inmediato la miró, pero por más que la miraba, no podía ver nada de su rostro. Él en ese momento no le prestó mucha atención, ya que solo había ido por un propósito, así que
Entonces vamos juntos, que yo también no he comido nada aún y se fueron juntos, en la salida lo estaba esperando Fabián, junto a su asistente, Alejandro, de inmediato le presentó a Kelaya.Y este le dijo: es un honor conocerte cuñada, sabes que mi madre no tiene otro tema que hablar de ti por haberle dado un nieto tan hermoso, que si por mi madre fuese, te hacía un altar.Alejandro lo miró y le dijo: deja la payasada más bien, toma y le entrego el contrato, luego le dijo, anulas los puntos que ella tachó y agrégale esto y la suma la cambia por el doble y se lo envías a su correo personal y le mostró dónde estaba anotado su correo.Fabián no lo podía creer, que su hermano, ya haya conseguido lo que él, llevaba un buen tiempo tratando de conseguir. Luego dijo: —Me voy, Alejandro, eres el mejor,Pero Kelaya lo detuvo, mientras le decía: porque mejor no nos acompaña.Fabián casi le respondió de inmediato, diciendo: "Otro día, cuñada", porque quiero dejar este contrato listo, para así pode
En ese instante, Kelaya le comentó, el mundo si es muy pequeño, ¿cierto?, ya que entre tantos hoteles que hay en esta ciudad, te quedes en el mismo que me estoy quedando yo, esto es una casualidad o destino, ¿cuál dices tú que sea?Alejandro, en ese momento pensó, es el destino que yo me estoy forjando contigo, para que mi hijo tenga un hogar completo, ya que se había metido la idea a la cabeza que todo lo que estaba haciendo, lo hacía solo por el bienestar de su hijo y nada más. A él se le había olvidado responderle, así que ella le dijo: "no importa ya, igual, gracias, por lo de hoy" y se bajó del auto. Cuando Alejandro se dio cuenta de que ella se había bajado, también lo hizo y le contestó: creo que es el destino, ya que se dice que todos tenemos un destino que cumplir en este mundo y quizás el nuestro es que estemos juntos, ¿no lo crees?Kelaya no le respondió nada, solo se fue reflexionando en lo último que él le había dicho. Después de que se vistió fue al programa donde tenía