Margie, qué se asustó mucho por el grito que su amiga, la miro con cara de preocupación y le había preguntado ¿qué te pasa?Kelaya, al ver que había preocupado a su amiga con aquel grito, le respondió, nada, y continuó hablando, lo que quise decir es que mejor no te quedes a vivir en mi casa, porque tú tienes tus cosas que hacer, además tu novio y tus padres que dirán si de la noche a la mañana te vienes a vivir conmigo, yo feliz de tenerte conmigo claro está. Luego dijo, pero no me habías dicho que tu padre no te dejaba vivir sola.Margie le respondió sí, eso me dijo cuándo le dije que iba a buscar un apartamento y vivir sola, pero como no voy a vivir sola, sino con mi mejor amiga y su hermana, mi papá de seguro estará de acuerdo, así que no te preocupes por mí, más bien deberías de preocuparte por mi ahijada y alimentarte mejor.Kelaya se había vuelto a quedar estupefacta, ya que no sabía qué decir para que Margie cambiara de parecer y se quedara en su casa, pues se había quedado co
Después de que Kelaya y Margie habían ido a la casa de esta última, estaban en dirección a la tienda, cuando Margie detuvo el coche en un centro comercial, y de inmediato le había dicho a su amiga que necesitaba comprar algo de suma importancia que, si no lo compraba en ese instante, se podía morir.Kelaya la miró, mientras le decía: no serías tú, si no me hicieras perder mi tiempo, luego dijo vamos antes que se me acabe la poca paciencia que me queda contigo, y te doy quince minutos, para que compres lo que tengas que comprar y nos vamos que necesito ponerme a trabajar, ya que tengo trabajo pendiente que hacer.Margie, emocionadísima, porque Kelaya le había dicho que sí, había salido del carro y le dijo a su amiga: "vamos, que no nos queda mucho tiempo, por el hecho de que solo me diste quince minutos".Luego de estar dentro del centro comercial, en el segundo piso se encontraba ubicada una tienda para bebes y era esto lo que Margie tenía tanta urgencia en comprar, ya que desde que s
Margie de inmediato le dijo papá, tú sabes cómo son los chismes, esos zapatitos se lo compre para un regalo de una amiga que, si está embarazada, la cual yo seré la madrina del bebe que viene en camino y todavía no entiendo por qué la gente comenzó a decir que yo estoy en embarazo y peor aún que no sé quién es el padre.Kelaya, que estaba a su lado y estaba viendo todos los comentarios que se habían difundido de su amiga por las redes, solo la miró y le dijo eso te pasa porque todo lo quieres publicar en las redes sociales.Luego dijo ahora no le vas a decir a nadie que yo soy tu amiga la que está embarazada porque si le dices a alguien sobre mi embarazo te voy sacando de la lista de mi mejor amiga.Margie se sentía un poco culpable por el embarazo de su amiga, y por ese motivo se comportaba tan protectora con esta, igual ella se dijo así misma que tenía que buscar la forma y contarle sobre esto a Alejandro.Ella pensaba que apenas Alejandro se enterara del embarazo de su amiga, la bu
Al día siguiente que Alejandro estaba en su hacienda, vio los exámenes que le había dado Margie en su escritorio de su estudio y no sabía el porqué, pero le entraron una curiosidad inmensa de ver aquella ecografía.Después de haber visto la ecografía impresa, había puesto la memoria en la ranura de su portátil para verlo mejor, luego de abrir la carpeta pudo escuchar el sonido del latido del corazón del ultrasonido, tanto fue su emoción en aquel momento que se le comenzaron a salírseles sus lágrimas y no sabía precisar en ese instante si era porque se había recordado de la primera vez que escuchó latir el corazón de su bebé que nunca vio la luz del día, o era porque su corazón sentía una alegría que hace mucho tiempo no había sentido y eso lo asusto mucho.Él de inmediato se levantó de la silla donde se encontraba sentado y tomó su teléfono en la mano para llamar a su hermano y regañarlo por no querer hacerse cargo de su propio hijo.Después de que Julián le había respondido el teléfo
A Margie se le comenzaron a salir las lágrimas cuando abrió sus ojos y el resultado no había cambiado para nada, ella se puso a pensar que le había hecho un mal a su amiga con aquella idea y lo peor de todo que se decía ser su Ada madrina y ahora por eso el karma la había alcanzado, para que pagara por su error.Margie seguía llorando desconsolada en el baño donde se había hecho aquella prueba de embarazo sin saber qué hacer, en ese momento solo quería estar con su amiga que, desde que la había conocido, la entendía a la perfección.Ella sacó su teléfono de su bolso y llamó a Kelaya, pero esta no le contestó, porque había dejado su teléfono en la oficina cargando y ella en ese momento estaba en la caja registradora cumpliendo con su trabajo.Margie al ver que su amiga no le había respondido la llamada se sintió más desconsolada aún, y estaba pensando que ese era su castigo que tenía que pagar por haber tramado en contra de su buena amiga y se prometió que le diría toda la verdad a Ale
Margie después de haberle dicho estas palabras a su novio, sacó su teléfono y volvió a llamar a Kelaya, esta vez si había contado con mejor suerte que la primera vez que la llamó, ya que apenas había timbrado la primera vez. Su amiga le respondió la llamada, preguntándole: ¿dónde estás, que no has vuelto? Margie, con mejor de ánimo, le respondió:, no pensé que la señorita Kelaya, fuera a notar mi ausencia, por el hecho de que siempre está diciéndome: "Margie déjame respirar un poco".Kelaya le respondió por eso mismo, como no voy a notar que no estás si siempre vives encima de mí.Margie le dijo para que veas que, si te dejo respirar.Kelaya le contestó con un poco de impaciencia: déjate de payasada y solo dime si estás bien. Ella, que conocía mejor que nadie a su amiga, sabía que algo le había pasado.Margie solo le dijo: "Luego te cuento", después le preguntó: ¿Cómo superaste tan rápido lo de tu embarazo?Kelaya dijo: todavía no lo he superado del todo, solo me he hecho a la idea q
Margie en ese momento había tomado todo el coraje que tenía para contarle de una vez por todas, todo a Alejandro, que el ultrasonido que le había dado anteriormente era de su amiga, la cual estaba embarazada de él.En la mente de Margie se imaginaba que apenas le dijera estas palabras, a Alejandro saldría corriendo a buscar a su amiga y así convencerla de que se casara con él y todo feliz.Margie, como siempre en su imaginación, ya se veía vestida para aquella boda y a su amiga se la imaginaba con un vestido blanco con una gran cola y un velo largo, el cual le cubría el rostro por completo.Ella en solo pensar en esto se sonreía sola, hasta que la sacaron de su ensoñación, y cuando había abierto sus ojos todos la estaban mirando raro.Margie tuvo que toser dos veces para salir por completo de sus pensamientos, los cuales siempre le jugaba una mala pasada.Julián se le acercó al oído y le dijo deja de estar riéndote de esa forma, que cualquiera supondría que conseguiste lo que estaba b
Margie al escuchar sobre la ecografía de su amiga se había quedado atónita, porque en su mente estaba pensando que Alejandro ya sabía toda la verdad sobre su amiga, ella solo lo miró con una cara que reflejaba el pánico en ella.Luego de un rato sin decir nada, ella le preguntó tartamudeando un poco ¿Y qué piensas hacer con eso?Alejandro, que todavía no le quitaba la mirada de encima, le dijo, solo quiero saber por qué me diste la ecografía de una persona que ni siquiera conozco.Cuando Margie había escuchado esas palabras fue que había podido respirar normal, ella le respondió con una gran sonrisa en sus labios, era solo una pequeña broma que le quería hacer al amargado de mi cuñado.Pero Alejandro no estaba por dejarla ir tan fácilmente, él le dijo no me has sacado de la duda que tengo sobre tu embarazo todavía.Margie en ese momento dijo, tú has escuchado el cuento del pastorcito mentiroso, ¿no es cierto?Alejandro le dijo no me digas que por estar mintiendo te salieron las cosas