"¿Qué estamos haciendo?". La madre de Ruth salió de su habitación y le dio una patada. "¡Maldita z*rra! ¿Dónde está tu conciencia? ¿Cómo te atreves a pasar por encima de tu hermana para entrar en la alta sociedad? ¿Eh? ¿Cómo puedes ser tan vulgar? ¿Tantas son tus ganas de pertenecer a la alta sociedad? ¿Quieres quitarle los recursos a tu hermana? ¿No son hermanas? ¿Cómo puedes ser tan tacaña? ¡Qué desvergonzada!”.

Su madre pateó con rabia a Ruth unas cuantas veces más. Ruth gemía de dolor, no podía ver nada con la cabeza en el saco, así que solo podía suplicar. "Mamá, ¿puedes quitarme esto primero? Déjame ver y puedes regañarme o pegarme como quieras, ¿de acuerdo?".

"¡Podemos dejarte ver!", dijo su padre. "Pero primero debes darnos tu teléfono y hasta el último centavo que tengas en tu bolso. Tenemos que atarte antes de quitar el saco".

Sus padres comenzaron a revisar su bolso. Le quitaron el teléfono, el dinero en efectivo y la tarjeta de compras que Sabrina le había dado. Mindy ta