Había estado rodeado de situaciones sangrientas la mayor parte del tiempo, y no había calidez en absoluto.

Aparte de Alex, a quien acababa de salvar, Sebastian realmente no tenía a nadie que fuera cercano a él y se dirigiera a él cariñosamente como señor como Kingston.

No había nadie así en el extranjero. Tampoco había en su país. En ese momento, los hermanastros de Sebastian no veían ninguna diferencia entre él y un mendigo.

Por lo tanto, cuando Kingston trató de dejarse permanecer al lado de Sebastian dirigiéndose a él como señor, instantáneamente derritió el corazón de Sebastian.

“¿Has sido entrenado en combate?”, preguntó Sebastian.

Kingston inmediatamente le respondió felizmente: “Mi familia ha sido entrenada en combate durante generaciones. Mi padre es muy hábil en las peleas, y obtuvo su experiencia al meterse en peleas reales con otros desde la infancia. No mucho después de que yo naciera, incluso antes de que supiera caminar, él ya había comenzado a dejarme hacer estirami