Por Franco

Estoy en mi oficina y me suena una alarma en mi celular, las chicas ya se habían ido, no me dijeron porque salieron antes, supuse que era por algún asunto de la facultad, cuando miro la cámara de casa que me dio aviso, ellas estaban en el sector del gimnasio.

Miro bien, porque las veo con dos hombres que parecían albañiles o de mantenimiento.

¡Estaban poniendo dos caños de baile!

Las quiero matar, al final, de verdad van a practicar el baile del caño.

Llamé inmediatamente a mi hermana.

-¿Qué están haciendo?

Le pregunto enojado.

-Menos de lo que hacés vos.

Me contestó Mili y me cortó.

No me dio tiempo de decir nada.

El sábado siguiente las veo con una chica, es la profesora que les va a enseñar bailar en el caño.

Mauro, que estaba en casa, quedó completamente loco con la chica que les estaba enseñando a Orne y a Mili a bailar sobre el caño.

Se acercó, se presentó y le pidió que le enseñe a él.

Es un caradura, le pido un baile privado, la chica le dijo que estaba equivocado,