¡Está aquí! No puedo creer que Lima esté en el pueblo. Viajo de Francia hasta aquí para darme la sorpresa. Cuando lo vi, creí que estaba viendo un espejismo. Sin embargo, su beso me demostró que estaba equivocada. Lincoln fue a recogerlo temprano. Cuando estaban por llegar, mi madre me envió por los huevos. ¡Es una lianta en toda regla! Pero, agradezco que nos dieran espacio. Ninguno se ha aproximado hasta donde Damián y yo estamos. Decidimos dar un paseo por la granja para poder hablar de lo que nos compete. A pesar de que nos fundimos en un abrazo cuando llego, ahora caminamos lado a lado. Él con las manos dentro de sus bolsillos y yo con mis brazos cruzados sobre mi pecho. —¿Cómo te has sentido? —inquiere. Puedo notar que está nervioso. No puedo negar que, yo también lo estoy. —Los vómitos han disminuido y, me he sentido genial, a decir verdad—murmuro—¿Cómo fue el rodaje? Damián respira profundo antes de darme una mirada rápida, para después desviarla. —Duro, reconfor
No podría sentirme más feliz.Era mi boda.La ceremonia fue hermosa y emotiva.The one de Kodaline suena mientras Damián y yo nos movemos de manera suave en medio de la pequeña pista de baile que han dispuesto.—¿Te gusta como quedo todo? — pregunta en voz baja.Lo miro ante de dejar un suave beso en sus labios.—Lo amo—suspiro.Miro su mano donde la alianza descansa.La mía es igual, solo que más pequeña.Son de platino y en el interior tienen la fecha de hoy.Las ha traído desde Francia.—Al fin, todas van a ver que estás tomado—bromeo.—Hace mucho que estoy tomado.—Respuesta correcta.El lugar es perfecto. Las luces se extienden por todo el espacio y las flores le dan un toque romántico y, al mismo tiempo dándole sofisticación al sitio. Hay una gran mesa decorada con altos centros de mesas.El banquete lo servirán en un momento un par de chicas que mamá contrato. Y, para evitarnos que alguien hiciera de esto un comercio, Damián ha publicado unas fotografías oficiales anunciando el
Seis meses después.Si el año pasado me hubiesen dicho que está seria mi vida ahora. Creo me habría reído en su cara. Antes pensaba que tenía la vida soñada. Sin embargo, hoy, puedo tener la certeza de que, estaba equivocada.Tengo un esposo maravilloso, un bebé que está por nacer. Ambos tenemos carreras fructíferas y estamos rodeados de personas que nos quieren y apoyan.En definitiva, la vida que llevo ahora, si puedo catalogarla como perfecta. Y, sí. Hay discusiones, desacuerdos, pero al final del día nada de eso importa porque lo más importante es que estamos juntos como familia.Damián está ahora en casa.La película por fin está terminada después de meses de trabajo. Hace poco que, la post-producción ha finalizado. Ahora solo resta el estreno que será durante el primer trimestre del próximo año.Poso mis manos en mi abultado vientre mientras descanso un poco y veo con deleite como mi esposo se ejercita del otro lado de la piscina.Sí. Soy una perra con suerte. Damián se ve cada
De pie, frente a mi puerta está la persona que tuvo el poder de hacerme creer que no era buena. Él, con su desapego me hizo creer que no valía la pena intentar mis sueños y que lo mejor, era vivirlos a través de los suyos.Estaba muy equivocado.—No tenemos nada de qué hablar.—Cara. Sé que me odias, lo entiendo—dice—Pero, necesito hablar contigo.Sé que no sé ira y no quiero un escándalo.Me hago a un lado y dejo pasar a Lucas.No lo he visto en mucho tiempo y, lo último que escuche de él. Es que, estaba trabajando en un disco, pero al parecer tuvo que retrasarlo por una sobredosis.Sí. Los excesos y problemas habían llevado a Lucas al alcohol y su carrera estaba en un gran bache.Cierro la puerta y le hago un gesto hasta el salón. En silencio él camina y toma asiento. Yo me siento en otro.Me observa un momento en silencio y una sonrisa suave aparece es sus labios.—¿Quieres algo de beber? —pregunto por cortesía—No. Está bien—suspira—Había escuchado la buena nueva—dice refiriéndose
POV DAMIÁN.Nos sentamos a la mesa y me sorprende no ver a nadie de servicio. Al parecer, mis padres quieren que sea una cena solo de los cuatro.—Sé que ustedes, tienen sus reservas para con nosotros—comienza mi padre en la mesa— Sin embargo, hemos tenido tiempo de poner en perspectiva nuestro fututo y analizar lo que estábamos haciendo.—Únicamente queremos una oportunidad de poder remediar la situación, antes de que sea tarde —susurra mamá—Quiero pedirte disculpas por no haberte apoyado con lo de Hamilton —mira a Abby—También, por enojarme cuando supe de tu relación con Zane.—Sí. En cuanto a eso—dice mi hermana antes de levantar su mano y enseñar el anillo.Me preparo para el drama, pero la sonrisa que mamá le regala no tiene precedentes.—Estoy feliz por ti, hija—dice.—Gracias—se aclara la garganta—La boda será para navidad.—¡Tan rápido! —Abby asiente—Pues, pueden usar el jardín para la ceremonia. Hay que ver lo de las flores, la comida, tu vestido—la cara de Abby vacila un poc
—¿Estás nerviosa?Volteo ante la pregunta de Damián que, me mira desde el sofá de su oficina mientras lee un guion que le han enviado.Me alejo de la ventana y le miro.—Puedo ver que tú también lo esté—fruncen el ceño sin saber a qué me refiero.—Has estado leyendo la misma página por diez minutos.Hace una mueca.—Pienso que mis padres quieren hacer las cosas bien. Sin embargo, hay que estar preparado para cualquier cosa.Asiento.—¿Has hablado con Linda? —pregunta haciendo referencia a mi madre.—Llegarán en dos días—respondo y miro a Damián ladeando la cabeza, —Pero dicen que, como esperan permanecer hasta que la bebé nazca, están buscando una casa para alquilar.—Eso, es ridículo—bufa.—¡Lo sé! Pero, ¿Cómo le saco esa idea a mis padres? —levanto las manos de manera exasperada.Damián deja a un lado el Guion y se endereza en el sofá.—Cuando lleguen, hablaré con ellos—murmura—Podemos preparar la habitación del ala izquierda, no es como si no tuviéramos espacio.—Buena suerte, con
Mi respiración se vuelve superficial mientras veo Damián dar un paso hacia atrás.Sin embargo, no se hace a un lado. A mi lado Rose está pálida.La mirada de Martín se centra en Henry que tiene está atento.—Tú también, muévete.Henry da unos pasos al lado.—¿Cómo entraste aquí? —inquiere Damián— ¿Cómo burlaste a la seguridad?—Vine con los repartidores—sonríe moviendo el revolver.—Celeste—susurro.—¿Qué dices? —inquiere sin perder la sonrisa de mierda que me tiene. Los nervios de puente.Me aclaro la garganta.—¿La señora que nos ayuda en casa?—Ah. Está tomando una siesta.—Eres un enfermo—siseo.—No estás en condiciones de ponerte al brinco.—¿Qué quieres? —Damián llama su atención. —Saldar cuentas con la perra de tu mujer—anuncia.Sus ojos se envuelven fríos.—Ella arruinó todo. Ella y la otra perra—chasquea los labios—Ya de esa traidora me encargaré.Siento que voy a vomitar en cualquier momento.Las piernas me fallan al escuchar sus palabras y una punzada baja me hace jadear
—¡Es la niña más hermosa que he visto! —Canta mi mamá con una gran sonrisa.Oculto la diversión mientras veo como la arrulla.Aunque estoy cansada, me siento feliz. A mi lado, Damián ahoga un bostezo.No durmió en toda la noche al pendiente de Kaia. Fue paciente y algo torpe, pero se le perdona. Después de como la traté el día de ayer.—Es idéntica a ti—miro a mi madre.—No. Es igual a mi Damián—salta Rose de pie a su lado.—Pues, mi niña era así —Tiene los ojos de Damián. ¿No lo ve? —abro los ojos como platos.Mamá le da una mirada.—Bueno. Ya la tuviste mucho, ahora me toca a mí—Rose alarga los brazos y mi mamá se aparta. Kaia duerme ajena a todo el revuelo que está causando.Viste un mameluco rosa y luce una extravagante diadema que Abby trajo para ella.—Está dormida y, podría despertarse—el tono de mi madre es marcado.Kaia escoge ese momento para hacer ruiditos y, por el tiempo que ha pasado. Eso solo significa una cosa.—Señoras—digo pasando mis manos por el rostro—lamento inf