Estrella añadió: —Sí, así es, Grant estaba jugando solo una vez y nadie le vigilaba, cuando le encontré se estaba manchando todo el suelo con mi pintalabios.

Elisa nunca cuidó a un bebé durante mucho tiempo, y el niño con el que más se relacionó fue Sonny, que siempre le pareció mono e inteligente, pero nunca pensó que tuviera una faceta que ella desconocía.

Creía que los niños eran tan puros como ángeles.

Su sobrino no era nada bonito cuando nació, pero con el paso del tiempo, el pequeño parecía diferente cada día.

Elisa hacía muchas fotos a su sobrino cada día y decía que quería hacer un documental sobre su crecimiento.

Este pequeño era un llorón.

Tanto si tenía hambre como si hacía caca, lloraba, como todos los niños que no sabían hablar.

Estrella charló un rato con Serenity y oyó los llantos de Arlo, sabiendo que los dos bebés estaban despiertos, así que se levantó y fue a abrazar a su hijo. En cuanto a Ruby, Ben ya la tenía en sus brazos.

Ben sujetaba a su hija con una mano y tira