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De los sueños también se vive

Era un lugar maravilloso lleno de muchas flores de distintos colores, árboles grandes y pequeños, con una hermosa cascada cayendo, cuando de repente siento atrás de mi una calidez, un aroma tan varonil que recorre todo mi cuerpo. Sentir ese toque en mi cintura que me lleva al cielo, al girarme era él mi chico de ojos verdes pantanos, mirándome tan lleno de pasión y deseo. Se me iba acercando a mi labios cuando de repente siento;

La música de mi despertador "Love me like you do"

Todo era un sueño, un maldito sueño con ese chico que no sale ni una vez de mi cabeza - como va a salir de tu cabeza si es todo un galán.

Mi conciencia a veces no me ayuda para nada. Decidí salir de la cama y cambiarme porque ya estaba retrasada para la escuela. Cuando baje vi una nota en el refrigerador de mi mamá que dice;

"Mi niña desayuna en la cafetería de la esquina de la escuela que se me presentó un problema en el trabajo, que tengas un excelente día"

Super feliz salí de la casa porque amaba desayunar con mis papitas fritas. Cogí rápido el bus y me dejó en la misma esquina. Al entrar en la cafetería rápido hice mi pedido que más me gustaba el zumo de fresa con papitas fritas.

Al dirigirme para la mesa de repente choco con un mesero y se me cae el bolso al piso, al bajarme para recogerlo cuando levantó mi vista y veo esas ojos que anoche me hicieron ir al cielo hasta el infinito, de mis labios salió;

- Usted tiene que ver por donde camina ya que siempre esta chocando conmigo-ohhh de donde te salió esa valentía.

Ni yo misma se de donde me salieron estás palabras.

- Hay diculpame es que como soy nuevo aquí trabajando quiero dar la mejor impresión de mi y no me fijé que iba caminando muy rápido.

- Mira fíjate que para ser un buen trabajador no tienes que ir tumbandole las cosas a la primera chica que se te aparezcan en el camino- este hombre te pone de pies a cabeza.

-Tienes toda la razón, mis diculpas para usted señorita. Me llamo Alejandro y me mudé para acá hace tres semanas para esta divina ciudad y no tengo muchos amigos, quisiera que fueras mi amiga y conocernos mejor, se podrá- Por algo se empieza.

No paraba de ver sus ojos y sus labios, de la forma que me mira y nada más de pensar que en mi sueño me iba a besar y en el momento más importante tuvo que sonar mi despertador.

-Te repito puedes ser mi amiga.

-Ohh diculpe es que no te estaba atendiendo- por supuesto que lo estabas atendiendo pero no específicamente a sus palabras.

- Por supuesto que podemos ser amigos.

- Podré saber como te llamas.

- Me llamo Caridad y es un gusto ser tu amiga Alejandro.

De repente entro Mónica a la cafetería en el mejor momento y ella si no se queda callada;

- Cari, amiga tu si que no pierdes el tiempo.

- Moni vine a desayunar como de costumbre- y por cierto, ya se me había olvidado.

- Ya veo, yo también quiero pedir mi pedido al mismo mesero- A veces quisiera sacarle los ojos a mi amiga.

- Que graciosa, Mónica te presentó Alejandro él se mudó hace poco. 

- Mucho gusto Mónica, es un placer tener amigas como ustedes.

- El placer es mío.

-Señorita aquí está su pedido.

Cogí mi desayuno, lo envolví y lo meti rápido para mi bolso y le dije a Mónica;

- Amiga tenemos que apresurarnos que ya son las ocho.

- Cari no importa así nos saltamos el matutino.

- Bueno Alejandro fue un gustó y tenemos que irnos que vamos super tarde para la escuela. 

- Fue un gusto en conocerte Cari y a ti también Mónica, gracias por ser mis amigas. Creen que puedo invitarlas una tarde de zumos en la playa.

- Si por supuesto. 

Mi amiga nunca se puede quedar callada y esperar que yo contestará- Pero si ibas a responder lo mismo. A veces no podía guiarme tanto por mi conciencia.

La mañana en la escuela se me a ido volando, nada más pensando como la vida te pone nuevos amigos y el destino hace sus jugadas. Los turnos de clases se fueron volando como la espuma. 

Al horario de almuerzo me fui hacia la biblioteca para buscar el libro "El secreto de amar y de ser amado" me han hablado tanto de este libro que me llamo la atención en buscarlo. En el turno último de la tarde me entró una llamada de un número desconocido y no le vire la llamada para atrás. A la hora de la salida nos encontramos las tres y nos pusimos a conversar;

-Chicas vamos para la playa.

-Ahí si Mónica diste una gran idea. Hoy está haciendo un inmenso calor y lo más que se me antoja es un buen baño.

- Ahí chicas no, mejor vamos para mi casa vemos una película juntas, revistas y así nos pasamos una tarde de chicas.

- Pues no es mala idea tampoco, que dices Moni.

- Estoy de acuerdo vamos para la casa de Cari a pasar tarde de chicas.

Sé que estoy huyendo para así no poder encontrarme con Alejandro y me monte esta excusa para así alejarme de él. Nos fuimos para la parada y cogimos el ómnibus y nos llevó directo hasta mi casa.

- Cari a mi si que no me mientas y eso por qué no quisiste ir a la playa.

-Tengo más ganas pasarmelas aquí con ustedes en vez de estar quedándome en la playa.

-Pues Cari amiga tienes que hacer los pankakes que tanto me gustan.

Se que Mónica se ha dado cuenta pero no le iba a dar la razón y por supuesto ahora mi castigo por no ir a la playa era hacer los pankakes que tanto le gustaban a Susy. Al rato después ya los había preparado con sirope y acompañado con un vatido de mamey. Lo devoramos en constantes de segundos entre risas y charlas;

-Bueno Cari no le vas a contar a Susy lo que pasó hoy por la mañana con Alejandro.

Moni siempre tiene que meter la pata siempre

- Claro que si, lo que estaba esperando el momento oportuno, pero tu como siempre de metiche metiéndote en las cosas que no te llaman.

- Yo nada más estaba diciendo, no es para que te pongas así.

- Mira Susy hoy por la mañana me encontré con el en la cafetería, por eso está señorita y yo llegamos tarde al matutino y el nos brindó su amistad.

-Estoy sin palabras el destino le está haciendo tremenda jugada a ustedes dos, ya son tres veces que se chocan y sabes que es una señal a demás se ve que es un chico educado y también apuesto.

- Es verdad amiga pero tu sabes que yo no creo en nada de eso del destino.

- Pues entonces amiga piensas llegar virgen a los 18.

-Tu cállate Mónica, siempre diciendo cosas sin sentido.

- Niñas pensé que iban a estar en la playa.

- Hola Andrea íbamos a ir pero a tu hermosa hija le cogió miedo a los cangrejos.

- Verdad, yo no sabía que en esa playa había cangrejos.

-No le hagas caso Andrea que Mónica hoy dice cosas sin sentido.

- Les voy a creer, voy para la cocina. Las dejo que tengan una buena charla.

Al cerrar la puerta le tiré una almohada por chismosa a Moni y nos pasamos toda la tarde viendo películas y leyendo revistas de modas y hablando de chicos.

Como a las siete y pico se fueron cada una para su casa. Cené con mi mamá y estuvimos hablando sobre su trabajo. Después nos pusimos a ver la novela "Fruto Prohibido" que amabamos ver juntas siempre. Al acabarse los capítulos que entraban semanal, me despedí de mi mamá y subí para hacer las tareas de los turnos que me tocaban mañana.

Haciendo mi tarea de matemáticas- que no soportas. Me entro la misma llamada de por la tarde y decidí en colgar, no soportaba que me entraran números desconocidos, es algo que no podía tolerar. 

A la mañana siguiente tome la decisión de mejor desayunar en la casa para así evitar ir a la cafetería aunque extrañaba con la vida mis zumo y mis papitas fritas. Cuando ya estaba entrando a la escuela me sonó el teléfono con la misma llamada de anoche- coge la llamada. No lo iba hacer porque si era algo importante me hubiesen mandado un mensaje, de pronto siento esa voz;

-Que mala educada eres. ¿Por qué no coges la llamada?

Mi mundo se me vino abajo al escuchar esa voz de él, al voltearme ahí estaba, vestido de negro completo y con una mirada que parecía que me iba a comer en carne viva. De mis labios salieron;

- Que te piensas, yo no contestó llamadas desconocidas y más que sepa yo no te eh dado mi número telefónico- te estás portando en estos mismos momentos como una idiota.

Definitivamente este hombre me sacaba cosas de mi que jamás pensaba tener y se que me estoy comportando como toda una gilipollas.

- Disculpa si no te lo pedí directamente a ti pero el gerente tiene tu número y bueno se lo pedí. Para así poderme comunicar contigo y tu amiga.

Tiene la mirada fija en mis ojos, era algo que me intimidaba pero a la vez luchaba por algo en su interior.

-Bueno ya no te preocupes entonces para que me estabas llamando.

-Para invitar a ti y tus amiga a la playa.

-Ahhh verdad que si ayer lo dijiste, pues te voy a pasar el número de Mónica porque yo no puedo.

Tengo que alejarme de él, ningún hombre me ha echo sentir con tanta tensión de estar cerca de él y no va a ser él que me va poner así- pues no te engañes que ya te esta poniendo.

- Pues si así lo prefieres estaré esperando su número, pero porque te pones tan nerviosa si lo que vamos es ir a la playa para así podernos conocer mejor.

-Quién te dijo a ti que yo me pongo nerviosa.

-Tus acciones- Oh Caridad te descubrieron es que tus hechos hablan por sí solos.

Este hombre no me iba más intimidar y si lo que quiere es que valla a la playa nosotras con él. Pues le daré el gusto porque el a mi no me pone para nada nerviosa- no te engañes.

- Yo no me pongo nerviosa y si quieres por la tarde iremos a la playa las chicas y yo.

-Pues las estaré esperando.

-Nos vemos por la tarde.

-Adiós princesa.

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