Ethan se encontraba en el departamento de Brassi al parecer la mujer se encontraba dispuesta a aceptar el trato, él se casaría con ella y muy pronto comenzarían a ser la pareja numero de la ciudad, tenían que opacar a los Andollini. Tengo un as bajo la manga — hablo Smith con firmeza, se encontraba abrazando a la mujer que se encontraba desnuda entre sus brazos y ella lo miraba — aun lo tengo oculto, te lo contare a su tiempo, ahora dime, ¿Cuándo quieres que sea la boda?, tenemos que hacer una ceremonia hermosa, ¿invitaras a tus padres? —el hombre se escuchaba tranquilo. Mis padres nunca me quieren hablar,ellos no aprueban el ritmo de vida que llevo y mucho menos me acepto desde que se enteró de la aventura con Jean Carlo, ellos siempre han pensado que somos menos que los Andollini, aunque pertenezcamos a la misma familia y tengas dinero — hablo con resentimiento la mujer. Todo eso se va a terminar, Constanzza, yo igual he tenido sentimientos de sentirme menos, Anabella siempre est
Anabella entro a casa de sus padres, al parecer todo se encontraba en silencio, sus padres se suponían tenían que regresar ese día, pero no, había enviado un automóvil por ellos, pero el chofer había regresado sin ellos, el hombre había preguntado por los vuelos provenientes de México, para ser más exactos de Cancún, pero ninguno de los vuelos de esa ciudad del caribe que arribaron llegaron los señores Connor. Estoy en casa de mis padres, Jean Carlo — hablo Anabella — vine a ver si habían llegado antes sin avisarnos, pero está vacía, los empleados me confirmaron la fecha y era ayer, pero no hay señales de ellos, ni de mi abuela, me encuentro preocupada por ellos — miro el lugar y todo se miraba tranquilo — Señorita Anabella —hablo una de las mucamas — tiene una llamada, es el señor Gerald, al parecer le hablaron a su casa, y alguien les dijo que se encontraba aquí —mujer le entrego el teléfono a Anabella — Anabella —se escuchó la voz de su padre un poco rara — regresaremos el día
Los padres de Anabella llegaron el domingo, un chofer de los Andollini se encontraba esperando a los señores Connor, estos llegaron y tenían el rostro demacrado y con señales de no haber dormido lo suficiente. El chofer se encargó de las maletas de los señores, estos se encontraban en el hangar privado de los Andollini, Jean Carlo había enviado su avión privado por ellos, quería evitarles el dolor de tener que abordar un avión comercial que, aunque fuera primera clase sería doloroso entrar con la urna de las cenizas de la abuela Katherine. El señor Gerald llevaba las cenizas en sus brazos, en su rostro se podía leer el dolor y una pena enorme, llevaba días sin poder dormir como se debía, debido a lo acontecido, tenía que haberle dicho que no era buena idea de entrar al rio, decirle que no, decirle que no era prudente por su edad, pero no su madre siempre, si desde que él la conocía hacia su voluntad, por eso era respetada Katherine Connor, ella se encontraba acostumbrada a eso, ¿Qué
Durante la semana un médico había ido a visitar a la madre de Anabella, la señora Connor se encontraba un poco mal de los nervios, había tenido un ataque, necesitaba jugar para bajar el estrés, pero nadie en la casa le permitía tener un teléfono cerca o llaves de automóviles, el internet el señor Connor había cambiado la contraseña para evitar tentaciones. En la clínica les comentaron que algún suceso fuerte podría hacer que regresaran las ganas de jugar o de apostar así que debían tener medidas si eso llegara a suceder. Nadine parecía que no podía contenerse, quería quitarse de la memoria como su suegra se caía delante de ella, el rostro de Gerald cuando le daban la noticia que su madre había muerto, no había visto casi a Anabella, si bien iba a diario casi no hablaba con ella, al parecer Anabella no quería estar cerca de ella por mucho tiempo, o eso sentía ella, pero no era así, los medicamentos que el medico receto la mantenían dormida y tranquila. Así que cuando Anabella iba ell
El día del funeral de Katherine, la casa de los Connor se encontraba llena o mejor dicho la casa de Katherine, Gerald y su esposa seguían viviendo ahí, a pesar de que su casa ya se las había regresado, ese había sido el regalo de bodas de Jean Carlo para Anabella, o mejor dicho uno de los regalos. I started a jokeWhich started the whole world cryingBut I didn't seeThat the joke was on me, oh noLas personas les daban el pésame a los dolientes, y el abogado de Katherine se acercó a Gerald — Gerald, sé que han sido momentos difíciles, la perdida de ella quien se veía tan fuerte como un roble, pero es mi deber decirte que por órdenes de Katherine es mi deber leer su testamento en cuando termine el funeral —hablo el abogado de Katherine llamado Lucas Maccio. ¿terminando el funeral? — cuestiono con intranquilidad el hombre, en verdad ahora menos comprendía a su madre — ¿Por qué? — miro al abogado con interrogación. Yo solo sigo las ordenes de tu madre, Gerald, ella lo dispuso así, e
al llegar a casa Anabella se quedo mirando a Jean Carlo, era bastante rara la actitud con la cual se había despedido su padre fue fría y distante, como si le doliera que su abuela haya pensado en ellos, ¿acaso su padre le molesto eso?. Su abuela siempre había sido cariñosa y muy generosa, incluso en estos momentos cuando su madre había hecho lo de la falsificación, lo de ponerlos en aprietos, los había recibido en su casa, pero ahora, su padre parecia odiarla, si bien no justificaba a su abuela, intentaba comprenderla, pero sobre todo no juzgarla. Esperaba que la empresa de aceite de oliva se encontrará en buen estado financiero, pero estaba cien por ciento segura que así lo era, del abogado recibio,una llave de una caja fuerte del banco, le dijo que ahí se encontraban las joyas de más valor, y que podía tomar las joyas que se encontraban en casa. Anabella fue acompañada por su madre con dirección a la recamara principal que era la de Katherine y tomo el joyero de su abuela,Anabell
Gerald se encontraba vistiéndose, ya era tarde, así que tenía que regresar a casa — bueno es hora de irme, mañana tendrás el depósito en tú cuenta — se acercó para besar a la mujer que se encontraba vestida con un camisón de seda negro; ella le regreso el beso al hombre. No te preocupes, pensé que ya te habías olvidado de mí — le dijo ella mientras le acomodaba la corbata al hombre — mañana iré con Ethan, dentro de poco anunciaremos el compromiso — ella hablo en tono monótono, ¿por qué no te divorcias?, llevamos muchos años de amantes, ahora me tendré que casar con ese estúpido —ella se encontraba enojada por esa situación — Te he dicho que no es posible, tengo que seguir manteniendo las apariencias, dame tiempo, necesitaba dinero y lo estoy obteniendo de nuevo, deja que Nadine vuelva a caer en el juego y la recluiremos en el centro de adicciones para siempre — habló él. Necesitamos pensar bien las cosas, planea la boda y cuando llegue el momento serás la esposa del alcalde de la
Al día siguiente Anabella despertó y al parecer Jean Carlo ya se había levantado y se encontraba en el vestidor terminando de elegir el vestuario que usaría ese día, tenía la mañana y tarde cargada de juntas. Deberías de descansar, cariño — menciono Andollini con cariño — quiero que te relajes, te quedes acostada, pediré que te traigan el desayuno — habló el hombre. Yo quiero desayunar contigo — hablo Anabella, mirándolo con carita de “quédate” Pediré que me suban el desayuno, y lo tomare aquí — el hombre beso a su esposa — pasaste mala noche, sentí como te movías, y después que no podías dormir — menciono el hombre — y después quiero que te vuelvas a dormir, yo tratare de venir a comer — el hombre se acercó al intercomunicador y apretó el botón de la cocina. Tomaremos el desayuno arriba, gracias, después de eso, ustedes pueden comer —menciono el hombre. Eres extraordinario — le dijo Anabella — si no pude dormir, me sentía extremadamente preocupada, y si e encuentro cansado — hab