Narra Katherine.
Todavía recordaba la primera vez que había visto a Liam, fue en una fiesta yo tenía apenas quince años, en el momento en que lo vi, mi corazón dio un vuelco extraño que nunca antes había sentido, en un instante en la fiesta él volteó a verme, me dio una sonrisa y de nuevo se dispuso hablar con las personas que lo rodeaban, mi corazón latió salvajemente con esa mirada. Liam me recordaba a los príncipes con los que las chicas siempre soñábamos: Alto, guapo y caballeroso. Su cabello castaño oscuro estaba peinado hacia atrás, tenía un pequeño hoyuelo en su mejilla derecha cuando sonreía.
El día que me enteré que se casaría con Jessica Johnson, estaba desilusionada. Luego supe de su rompimiento y eso me lleno de alegría, porque ahora que tenía dieciocho años tenía la posibilidad de hablar con él en las fiestas que se realizaban en Jefferson, quizás tendría una oportunidad con él, pero había un problema: se rumoraba que él estaba buscando a su futura esposa y eso significaba que tendrían que recurrir a la lista dorada. Cómo recién había cumplido la mayoría de edad mí nombre todavía no estaba inscrito, pero según mi madre, mí padre se encargaría de eso para poder estar en ella.De repente escuché golpes en mí puerta, está se abrió lentamente.
—Katherine, ¿puedo hablar contigo?—Preguntó mí padre.
—Si—respondí dejando el celular a un lado para prestarle atención, él se sentó a la orilla de mí cama, guardó silencio por un momento hasta que habló.
— Sabes que tenemos reglas en nuestro mundo. Las que todos debemos seguir a pie de la letra—mencionó haciendo una pausa—. Tuve una reunión con Liam Brown, creo que tu madre te dijo que me haría cargo de tu inscripción en la lista dorada ¿cierto ?—simplemente asentí con la cabeza—. He logrado más que eso: Tu eres la esposa elegida para el CEO—me informó —. Serás su esposa dentro de siete meses—añadió.
Sus palabras me dejaron literalmente muda, estaba realmente sorprendía por tal anunció, era algo con que siempre había soñado.
—¿De verdad?—pregunte sin poder creerlo.
—Claro que lo es—me confirmó.
Sonríe levemente, estaba sumamente alegre, pero traté de disimular un poco para no parecer una loca.—Dime papá, ¿Crees que en realidad él quiera casarse conmigo?—interrogue.
—Por supuesto hija, quien no querría casarse contigo, si eres un ángel—dijo cariñosamente.
Solo pude dedicarle una sonrisa. Estaba segura que todo era una trato, los matrimonios arreglados era común en Jefferson, eran pocas las parejas que en realidad se enamoraban y se casaban porque así lo deseaban. Mis padres se casaron por medio de uno, según mí madre, no estaba enamorada de mí padre al comienzo, pero que con el tiempo ambos se enamoraron. También estaba consciente que esté matrimonio tendrían beneficios financieros, ya que tener vínculos con el CEO y millonario más importante del país era una gran victoria. Mí familia era de clase media-alta, pero con este matrimonio pronto mí familia tendría más dinero y poder.
Antes que mí padre se marchará de mí habitación, me informó que el anunció oficial de mí compromiso con Liam sería en cuatro meses. Cuando le pregunté porque tanto tiempo él simplemente me respondió que él lo había decidido así. Supuse que quería tener un espacio para sanar las heridas que seguramente tenía en su corazón, para nadie era secreto que él estaba enamorado de Jessica, se rumoraba que ella se habia ido a los brazos de otro hombre, aunque todavía nadie sabía la identidad de dicha persona.
***A la mañana siguiente, me levanté con una sonrisa. Había soñado con Liam toda la noche, no podía esperar para hablar con Cinthia sobre eso, aunque era secreto todavía, ella era mí mejor amiga y confiaba que ella no diría nada hasta que fuera oficial.
Cuando bajé a desayunar mis padres ya habían comenzado, mí hermano quien era un año mayor que yo, no estaba, supuse que se había ido temprano a trabajar. Luego mí padre me informó que estábamos invitados mañana en la noche a la fiesta de cumpleaños del señor Edwin Fredison, el alcalde de la ciudad de Jefferson. Las familias más adineradas e importantes estaban invitadas, entre ellas Liam y su familia. Iba ser la primera vez que lo vería siendo mí prometido, en las últimas fiestas jamás me vio, para él era invisible, tampoco estaba segura si él me reconocería o si por lo menos me conocía por fotografía.
Lo importante era que yo había sido la elegida para el CEO más importante del país y no podría estar más feliz. Mí sueño de ser su esposa y que él fuera mí esposo estaba a punto de cumplirse.
***
Nota: está es una historia corta de romance.
Narra Liam.A pesar de mí aceptación, un sabor amargo permaneció en mi boca después de contárselo a mí padre. Tenía Dudas si Katherine y yo tendríamos algo en común, ni siquiera la recordaba, no estaba seguro si la había visto alguna vez en algunas de las fiestas, no tenía idea de cómo lucía su rostro.Al día siguiente, visité a mis padres. Tomé el ramo de rosas blancas y una pequeña caja de cumpleaños y bajé del auto. Mí hermana todavía vivía con ellos, cosa que agradecí, después de su accidente ella necesitaba a su familia más que nunca, pero antes de ingresar a la casa mí teléfono vibró, vi en el identificador que se trataba de mí mejor amigo Dylan.—Dime, ¿Qué pasa?—le pregunté.—Me acabo d
Narra Liam.El día de la fiesta de cumpleaños del señor Fredison había llegado. En el momento que entre a la mansión la atención de la gente se centró en mí. Busqué al alcalde y lo felicité por su cumpleaños, no era necesario entregarle un regalo, ya le había dando un donativo personal por el mismo. Luego me acerque a mí amigo, me dio una sonrisa de ánimo.—No sé si me están mirando a mí o a ti—comentó Dylan.—Sabes que es a mí. Están viendo al novio abandonado —respondí con una voz forzada y en broma.En ese momento los ojos de Dylan se dirigieron hacía al lado derecho, por inercia voltee a ver lo que observaba. El señor Wood junto a una chica muy hermosa de cabello castaño claro y ojos color ámbar se acercaban a nosotros. Me quedé impacto por la belleza de la chica, me imaginé que se trataba de Katherine, mí prometida. Nunca creí que fuera tan hermosa.—Brown, ella es mí hija Katherine—me la presentó su padre.—Es un plac
Narra Katherine.Seis meses después…Me encontraba examinando mí celular, específicamente la sección de farándula donde Liam aparecía últimamente con chicas Pelirrojas a su lado, esto ocurría desde la fiesta del alcalde dónde Jessica apareció del brazo de que ahora era su pareja, cuando todos nos enteramos de su embarazo fue la comidilla durante un par de días. Pero muchas fotografías de Liam con las pelirrojas eran borradas pocos después, seguramente él se encargaba de eso, para no levantar más chismes, pero era tarde, todos comenzaban hablar de su libertinaje y pensaban que nunca buscaría una esposa para formalizar su vida. Todos estos meses ni siquiera ha venido a verme, los mensajes que me había enviado habían sido pocos y cortantes. Mi mente iba a cien millas por hora. No podía desahogarme con mí hermano, él ya se había independizado, se había mudado a un departamento cerca del centro, él se graduó de médico y tenía su propi
Narra Katherine.Cuando regrese a casa, mí madre se paró en seco al verme. Nuestras ojos se encontraron. Me di cuenta de inmediato que ella no era fanática de mi nuevo peinado.—¿Te teñiste el cabello?—dijo perpleja. Su mirada recorrió mi cabello, casi como si no pudiera creer lo que estaba viendo.—Si—respondí—. Quería un cambio—agregue.Ella suavizó su rostro.—¿Estas segura de eso o se trata de Liam?—interrogó, imaginándose que lo había hecho por él.—No se trata de él—mentí haciendo una pausa—. Se que está enamorado de ella todavía, no creo que le importe mí color de cabello—añadí.Mí madre negó con la cabeza y resopló.—Quizás se enamoró de ella por la aparecía que reflejaba, por la imagen exterior perfecta que ella representaba, no de su verdadero yo. Lo único que está herido es su orgullo y no su corazón, así que dudo mucho que siga enamorado de ella —mencionó muy segura de sus palabras, quizás ella tenía razón
Narra Liam.Salí de la casa de los Wood realmente enojado. No esperaba ver a Katherine con el cabello rojizo. Había estado pasando el rato con pelirrojas durante estos meses solo para sacar de mi mente a Jessica, claramente eso no funcionó. Ahora que se acercaba el anuncio de mí compromiso, había dejado de asistir a este tipo de lugares, tuve que mover mis influencias para quitar las fotografías dónde aparecía acompañado de esas mujeres. Mí vida era un caos, pero tenía que reponer y enderezar mí camino. No quería ser cruel con Katherine, pero verla de esa manera me enloqueció porque tenía la esperanza de que ella pudiera hacerme olvidar a Jessica y no recordarla.Cuando llegue a casa, vi a Isabela en el jardín pintando, ella tenía mucho talento para eso. Estos últimos meses su estado de ánimo ha estado mejorando mucho, salía temprano de trabajar para estar con ella y pasar tiempo como hermanos, al principio fue difícil pero poco a poco ha ido saliendo adelante de su de
Narra Katherine.No podía creer que me había atrevido hablarle de esa manera, pero no me arrepentía de nada. Con mi nuevo look me sentía otra mujer, una mucho más fuerte. Sin embargo, debo admitir que cuando tomó mí mano sentí cosquillas en mí estómago. Tuve que reponerme al instante para no reflejar debilidad, lo que me sorprendió fue conocer a su hermana, supe de su accidente, pero realmente se veía muy hermosa está noche, sus cicatrices eran poco visibles, me pareció una chica muy dulce, al parecer teníamos la misma edad, lo que no podía creer era que conocía a mí hermano y que él le hubiera hablado de mí. En ese momento lo busqué, cuando lo encontré me acerqué y le pregunté porque no me había contado sobre su cercanía con Isabela y Liam.—Lo siento hermana, se me pasó por alto—dijo disculpándose.Me sentí un poco triste de que él ahora no me contara sobre las cosas que le pasaban, cuando vivía con nosotros éramos muy unidos, pero ahora que se había independizad
Narra Katherine.Llegué a la cabaña con Cinthia. Ella estaba muy entusiasmada por este paseo, al parecer le gustó Dylan, al ingresar solo puede ver a mí hermano, Dylan e Isabela. Liam al parecer llegaría pronto, las chicas y yo compartiríamos habitación, Cinthia e Isabela se agradaron desde la noche de la fiesta, las tres nos habíamos convertido en buenas amigas.—Sera mejor que nos demos prisa, ya quiero ir al lago —mencionó Cinthia.En ese momento la quedé viendo. Sabía que su urgencia por salir era para mostrarle su figura en traje de baño a Dylan.Yo también me puse mí traje de baño de dos piezas, no frecuentaba a mostrar mucho de mí cuerpo, pero quería tentar un poco a Liam para jugar con él. Había una regla importante en los arreglos matrimoniales y esa era tener sexo hasta la noche de bodas. Por esa razón quería hacerlo sufrir un poco, mostrarle que yo era hermosa que podía ser deseada por cualquier hombre, estaba consciente que estaría jugando con fue
Narra Liam.En el pasado, nuestros encuentros habían sido fugaces. No la había visto como una mujer a la cual quería follar, pero estos dos últimos encuentros había notado un cambio en ella que me atraía, ahora era imposible ignorarla, ella realmente era bella. Noté su hermoso rostro, su increíble cuerpo, era toda una mujer. Mentiría si no dijera que no la deseaba sexualmente. También noté que me veía con coqueteo, pero yo también le correspondí, todo esto parecía una tentación peligrosa.—¿Tienes frío?—le pregunté cuando terminamos de llegar a la orilla.—Si respondió.Visualice una toalla y se la coloqué en sus hombros. Luego caminamos lentamente con dirección al muelle de madera que estaba aún extremo del lago donde se encontraba una lancha al final del camino. No sabía si estar alejados de los demás era una buena idea. Más cuando le prometí al señor Wood que no me aprovecharía de su hija ante de la boda. Cuan