El bebé de Lucien Black Di Monti y Milán Costelo, estaba por llegar al mundo, la joven Costelo, estaba con los nervios que le recorrían todo el cuerpo, este era su primer bebé, sabía lo que decían que era lo más doloroso del mundo y eso era lo que la aterraba másDespués de veinte minutos el doctor salió a dar noticias al CEO, sabía que con ese hombre debía andarse con cuidado— Señor Black, hemos revisado a su esposa, colonia ha roto fuentes el trabajo de parto ya empezó, solo que todavía falta que el bebé baje lo suficiente para nacer, entonces vamos a dejar que su esposa camine por los pasillos de aquí cerca para ayudar a la criatura, debe saber que el trabajo de parte es doloroso y usted va a ser el apoyo de su señora, ahora pase con la enfermera que le dará ropa esterilizada para que se la ponga encima del trajeLucien, siguió las indicaciones y pronto estuvo junto a una Milán que ya se encontraba con una bata puesta, en la mano llevaba una intravenosa, ésto era por si se complic
Tanto Lucien, como su padre, estaban de lo más contentos con que el bebé bebé se les pareciera a ellos, está vez los genes Black, se habían impuesto y ganado con mucha ventajaAngelina y Angelo, también estaban bastante felices con la llegada de un nuevo miembro a la familia — ¿Con que tú eras el antojadizo bebé que me despertaba por la madrugadas eh? espero que por lo menos por eso obedezcas a tu tío Angelo — el joven CEO le hablaba a su sobrino, pero el niño comenzó a llorar— Angelo, deja de estar amedrentando al bebé, mira, ya lo hiciste llorar, ¿ahora qué hacemos para que deje calmarlo?— Seguro es que tiene hambre, es por eso que llora — dijo Angelina, y efectivamente, una enfermera llegó con un biberón esterilizado, está vez fue su padre quien le dió la fórmula, el niño comía muy hambriento, habían pasado muchas horas desde que había probado alimento en la barriga de su madreMilán por fin llegó y lo primero que hizo fue cargar a su bebé, Lucien se lo colocó en el pecho, el beb
Lucien, llegó a su oficina alrededor de las nueve de la mañana, estaba hasta el cuello de trabajo, Angelo y el habían comenzado el multimillonario proyecto de los centros comerciales de lujo y su agenda estaba al tope— ¿A ti que te pasó Lucien? voy a tener que pedirle a Bety, la secretaria que me preste un poco de maquillaje para ocultarte un poco las tremendas ojeras que en el rostro — Dago, nunca había visto así al CEO, ni siquiera cuando había demasiado trabajo— Mi pequeño Lucien, eso es lo que me pasa, me levanta por lo menos dos ves en la noche a darle de comer o a cambiarle el pañal, Milán y yo nos turnamos, pero aún así es agotador— Hay que dios me libre de tener un bebé a estas alturas de mi vida, estoy seguro que me volvería loco — dijo Dago con mucho enfasis — Ni siquiera tienes una novia, ¿cómo podrías tener un bebé? — el honesto Lucien, aterrizaba a su asistente de una sola vez— No quiero tener una novia que es muy diferente a no tener a alguien que se interese en mi,
Por la tarde, Lucien, llegaba a su mansión bastante agotado y hasta con un ligero dolor de cabeza, Milán apareció en su encuentro cargando en brazos a su bebé, el niño miró a su padre y se removió en los brazos de su madre— Hola pequeño Lucien, ¿extrañaste a papá? hoy he tenido un día muy pesado, espero que está noche si puedas dormir de corrido — dijo el padre mientras daba un beso a su hijo y otro a su mujerEl niño hacía ruiditos de bebé, no le despegaba la mirada a su papá, se tranquilizo hasta que lo cargó, el CEO, alimentó al pequeño por qué ya era la hora de su comida, pero también había entrado en la etapa que de pronto vomitaba y en esta ocasión el costoso traje del empresario sufrió las consecuencias— Joder, Lucien, ¿mira nada más como me has dejado? me has vomitado todo, ahora también eres una pequeña bomba de tiempo de vómitos, ¿qué más hay de los bebés que no sepa? ¿muerden, comen padres? ya no sé que más esperar de ti pequeño demonioAl pequeño Lucien poco le importaban
Lucien, había pensado en darle una sorpresa a su esposa al venir por ella al trabajo, nunca se imaginó encontrarla abrazada de su asistente mientras que parecía estaba llorando, pero como fuera eso no aplacaba su rabia, quería saber que demonios estaba pasando y por qué su mujer estaba abrazada de otro hombre que evidentemente no era él— ¿Me puedes explicar qué está pasando aquí, Milán? estamos casados, tenemos un bebé de solo meses de nacido …y tú.... ? ¡¿me estás engañando con tu asistente?! ¡si es así apartarte por qué este tipo y yo vamos a ajustar cuentas!— CEO Black, jamás me atrevería a poner los ojos tan alto, yo solo soy el asistente de su mujer, está mal interpretando las cosas — el asistente estaba teniendo por su vida, Lucien era conocido por ser despiadado, la paciencia no era su fuerte, y él en este preciso momento tenía abrazada a su mujer— ¡Lucien Black! ¡¿qué tonterías estás diciendo?! ¿estás insinuando que te estoy engañando? ¿pero como te atreves a siquiera pensa
Por un momento el frío e indiferente Lucien, dejó de respirar, es verdad que el tampoco esperaba que se diera un embarazo tan pronto, su pequeño bebé le consumía su tiempo y sus energías, además el trabajo era abrumador, pero el bebé ya venía, era su sangre y su carne, de él y de su amada Milán— ¿Quieres interrumpir el embarazo, Milán? ¿es que el bebé que llevas en tu vientre no merece tener el amor de su madre solo por qué no fue planeado? estoy esperando que me respondas — la seriedad en la voz del CEO podía erizarle la piel a cualquiera— ¿Pero qué? !no digas estupideces Lucien! no esperaba un embarazo tan pronto eso es verdad, el solo pensar que tengo que volver a pasar por los espantosos dolores de parto hace que me aterre, pero nunca escúchalo bien, nunca me desharía de un bebé tuyo y mío, es nuestro, nuestro hijo, ya está en camino y lo vamos a recibir de la misma forma en la que recibimos a Lucien, con todo nuestro amor Al CEO le volvió el alma al cuerpo, si su esposa hubie
FLASH BACKAngelo, había ido a comprar unos artículos personales a un exclusivo centro comercial, estaba de arriba a abajo y por si fuera poco atendiendo una llamada de uno de sus socios cuando la vióLa hermosa chica caminaba con un par de libros en la mano, llevaba puesto un uniforme de preparatoria, falda corta de pliegues, camisa blanca corbata y un saco azul marino, su largo cabello oscuro lo llevaba en una coleta alta, ella llevaba zapatos escolares y calcetas hasta los muslosEl CEO la vió entrar a una tienda de mascadas, ella las observaba con la intención de elegir una que le quedará a su uniforme, por fin se decidió por una que llevó a la caja a pagar, en ese momento el joven empresario sacó su tarjeta exclusiva para pagar por la prenda— Permítame por favor — su varonil voz, el porte de príncipe, y su seguridad bien plantada, descolocaron a Rocío Ferrer, una estudiante que estaba a punto de graduarse de la preparatoriaLos ojos azul zafiro de la bella chica se fijaron en An
Los días pasaron y como no pudo sacarla de su cabeza, Angelo fue a buscarla a la escuela, espero afuera a la hora de salida hasta que la vió venir con unas amigas y entonces se le puse de frente— Hola Rocío, ¿podemos hablar? — la mirada de cachorro herido del joven CEO, no ayudaba mucho a la resistencia de la joven, además él joven Black, ya le había robado el corazón, las amigas de la joven no podían dejar de ver a Angelo por lo apuesto que era — Está bien, vamos por un café, las veo luego chicas — cerca de la escuela de ricos había un par de buenas cafeterías, Rocío se dirigió hacía una de ellas mientras que Angelo la seguía en silencioUna vez adentro tomaron una de las mesas, el hombre se apresuró a abrir la silla de la chica, y después de ordenar un par de capuchinos el CEO comenzó a hablar— Entonces, ¿cómo has estado estos días, Rocío?— Yo muy bien, ¿y tú? ¿qué tal lo has pasado? — la joven estudiante no le iba a decir que lo había pasado muy triste sobre todo por la nula lle