Sesión ordinaria de la Secretaría de Gobernación de Carixis
—Khan Karzat XXI —le dijo Ker, un viejo cártagik de mirada severa y rostro soberbio, mientras se levantaba de su curul, rodeado de los otros alcaldes. —¿Quién tomó la decisión de incorporar al Imperio Brakionés dentro de la Afiliación?—Fui yo. —Respondió Karzat sentado frente a los alcaldes al lado de Rupert.
—¿Usted solo?
—Sí. Para los brakioneses el Khan es un dios. Un ser divino encarnado. Mis decisiones son incuestionables.
—¿Quiere decir que todos los brakioneses están de acuerdo en afiliarse? ¿Nadie adversa la idea?
—Nadie adversa los mandamientos de un dios.
—Y... ¿qué pasaría si usted muerte y el próximo Khan decide que los brakioneses deben matar a cuantos afiliados encuentren cerca, una vez que ya están dentro de la Afiliación? ¿Es eso posible?
—Sí. Pero improbable. Una vez dentro de la Afiliación, los brakioneses los consideraremos nuestros hermanos y estaremos dispuestos a dar nuestras vidas por la Afiliación.
—Algo me preocupa, sinceramente, Khan —continuó Ker de forma inquisitorial— tenemos conocimiento de que los brakioneses sacrifican personas a sus dioses y que gran parte de sus saqueos incluye el secuestrar víctimas para dichas inmolaciones...
—He abolido el sacrificio de personas...
—Pero... ¿qué pasaría si los brakioneses son presa de algún tipo de furor religioso en el futuro?
—¿Qué pasaría si lo son los cártagiks? —preguntó Karzat. Rupert no pudo evitar expresar una leve risa.
—Sus argumentos no me convencen, Karzat. Mi propio padre murió en un ataque brakionés a una nave civil y muchos amigos míos fallecieron durante su más reciente ataque. Para mí son un peligro, una amenaza a la Galaxia entera.
Después de decir esto, Ker salió del edificio y a su lado los alcaldes que normalmente se plegaban a la influencia de Ker.
—No salió muy bien —le dijo Rupert— pero Ker normalmente es así con todo. Talvez... con algo de tiempo...
—Comprendo. —Dijo Karzat enigmático.
Barrios bajos de Solaria
Ciudad xirgona en Carixis
Un aeromóvil conducido por Kriggs y Zílog sobrevolaba cerca de una vieja bodega abandonada. Habían enviado una micro-sonda espía, un aparato volador del tamaño de una mosca, que transmitía sonidos e imágenes a un computador.
—Los tengo —dijo Kriggs a Zílog mientras observaban la consola del ordenador en el aeromóvil— la microsonda los está filmando.
La pantalla mostró a diez xirgones toscos y malencarados con típico aspecto de criminales.
—Están hablando xirgón —apuntó Zílog— pon el traductor electrónico.
—Hablo xirgón —le respondió Kriggs— es más eficaz si traduzco yo que el traductor electrónico...
—Shalak ashakarg velakist mekordarg Shamak Xirgónush —decía el que parecía líder del grupo.
—Pronto seremos los nuevos gobernantes del Imperio Xirgón —tradujo Kriggs.
—Geretorg nashak Makush Decontik shemmelak surgot Shamak sakorturg nashik feshalak mashukorg.
—Como corresponde los Escuadrones de la Muerte purgaremos al Imperio de sus enemigos internos y externos.
—¿Gashakamorg dukast nekorirg Fasha Kamok shas? —dijo otro xirgón.
—¿Pero donde conseguiremos la Ojiva de Agujero Negro?
—Shammakok nashirg bresk dénuzeb nekorirg Shann velekomman shakarg shash. Shakamakot zukorg belashirg fasha mekotam shammakok deshamamak ashammekorg disahakort commushiamek. Mekoshirg velakotish makurasj nekargorg...
—Nos será entregada por un importante empresario dénuzeb llamado Shann. Tiene contactos con el gobierno imperial y logró robar la ojiva. Cuando la tengamos, la venderemos a un buen precio y con ello financiaremos nuestra revolución...
—Shammalok tengashik Felashiammak, Vegash Kataorg kash Devorirg Mekoshato kashamarg lekot nisha sakammarg Shammak Xirgónush.
—Tras lo cual la Afiliación, el Reino Vegano y todo el Concejo Galáctico temblarán ante el poderío inmenso de nuestro régimen en el Imperio Xirgón.
—Suficiente, vámonos —alertó Zílog.
Algunos minutos después discutían la información recopilada en el despacho de Rupert al lado del resto del equipo.
—Una Ojiva de Agujero Negro —explicaba Shikha— o como poéticamente la llaman los valtáricos; “La Semilla de la Destrucción”, es el arma de destrucción masiva más terrible que se conoce, capaz de destruir planetas enteros. Básicamente, replica de forma artificial a un agujero negro que es la fuerza destructora más grande de la Galaxia. Solamente se ha utilizado dos veces y en ambos casos fue contra planetas colonias, nunca contra un mundo—hogar.
—Sin embargo —recordó Rupert— debido a su potencial destructivo el Tratado de Carixis prohibió el uso de las tecnología de agujeros negros contra cualquiera de los miembros del Concejo y estableció como prohibido la creación de nuevas ojivas de agujero negro. Hasta donde se sabe solamente tres Estados de la Galaxia cuentan con dicha tecnología y con ojivas; la Alianza Valtárica, la Afiliación y el Imperio Xirgón. La principal razón por la cual se conservan las ojivas ya existentes es por supuesta defensa contra el Planeta Oscuro.
—Gracias a la información que conseguimos de Inteligencia logramos escuchar la conversación de estos xirgones —explicó Kriggs. —Miembros del Escuadrón de la Muerte, un grupo radical xirgón conformado por fanáticos nacionalistas. Se les considera altamente peligrosos y responsables de atrocidades cometidas contra veganos y carlagianos. Generalmente, el Escuadrón realiza “limpiezas étnicas”, ataca villas alejadas donde comete asesinatos masivos, torturas y humillaciones. Dejan con vida a unos pocos para que sirvan de testigos aterrados de sus horripilantes crímenes. Hace dos semanas atacaron un pueblo en Marte de 500 habitantes, donde asesinaron a todos los humanos. Sólo quedó viva una niña de 12 años cuyo estado prefiero no describir.
—Sin embargo —mencionó Zílog. —Los xirgones cuentan ya con tecnología de agujero negro, por lo cual es poco probable que el Escuadrón desee utilizar la ojiva. Se puede deducir de su conversación que su fin último es vender la ojiva para recaudar fondos y tomar el poder en Xirgón. El problema es a quien piensan vender la ojiva. Puede ser desde un gobierno hostil como el sarconiano hasta la mafia organizada.
—No nos queda más remedio que buscar a Shann —dijo Rupert.
—Pero según me informaron en Inteligencia —respondió Kriggs. —Shann dejó Carixis hace un mes y viajó a alguna parte del Imperio Xirgón. Para encontrarlo tendríamos que buscarlo en todo el Imperio... que es bastante grande...
—Pues aunque tengamos que recorrer cada centímetro del Imperio, deberemos hacerlo —sentenció Rupert.
—¿Y cómo pretendes que las autoridades xirgonas nos permitan viajar libremente por todo su territorio? —preguntó Maktub. —Las relaciones entre la Afiliación y Xirgón nunca habían estado tan tensas...
—Sólo hay una opción —reconoció Rupert— recurrir a la ayuda de Ushuk Larg. Es un hombre razonable.
4 horas después
La nave Sephirot se preparaba para partir en su misión de búsqueda de Shann dentro del Imperio. Zílog, Kriggs y Maktub viajarían solos por tratarse de un caso de espionaje donde no podían llamar demasiado la atención. Al lugar llegaron Rupert, Ushuk, su esposa Sashak y tres xirgones.
—Hemos accedido a cooperar en este caso —dijo Ushuk— viajaremos con ustedes en la misión y nos aseguraremos de que no vayan a espiar a favor de la Afiliación y en detrimento del Imperio.
—Comprendido —dijo Zílog. —Su presencia será muy bienvenida, no sólo por su experimentada carrera militar, sino además porque es la única forma de poder transitar el Imperio Xirgón sin problemas.
Finalmente la Sephirot sobrevoló el cielo púrpura de Carixis 2 hasta perderse de vista.
Colonia agrícola de Cronos 15
Imperio Xirgón
Día 13 del Mes 1 del Año 2103 D.A.
—¿Está seguro que no ha visto un dénuzeb por acá? —consultó Rupert a un viejo campesino xirgón curtido por el sol que detuvo su labor de arar las fértiles tierras para atenderlo.
—No señor —dijo con fuerte acento xirgón— no hemos visto a ningún extranjero en muchos thriliaks. Lo lamento...
—Gracias.
—Shannak. De nada.
—¿Tuviste suerte? —le preguntó Zílog aproximándose.—No. Estos campesinos son muy humildes y la mayoría habla valtárico bastante mal. Espero que Kriggs y Larg hayan tenido mejor suerte. Al menos ellas hablan xirgón.
—El informe de aduana de Carixis aseguraba que Shann dejó el sistema con rumbo a alguna colonia rural en la frontera. Esta es la más cercana a Carixis.
Poco después llegaron Larg y Kriggs.
—¿Algo? —consultó Rupert. Ambas negaron con la cabeza.
—Shann es un gusano de cinco metros de altura —adujo Kriggs— no creo que pase desapercibido fácilmente. ¿Qué se sabe de los dénuzeb?
—Bueno —comentó Ushuk— al igual que Xirgón, Istaria y Dashán, el Planeta Dénuzeb era una provincia bajo el dominio del Imperio Valtárico, y tras el colapso de éste pasó a ser provincia de su sucesor, el nuevo Imperio Xirgón, al igual que Istaria y Dashán. Pero de todas las provincias xirgonas son los más sumisos. Jamás han tenido movimiento independentistas. Es más, se adaptaron plenamente al Imperio y se consolidaron como los principales mercaderes del mismo. Muchos dénuzeb han sido ministros de la Corte Imperial como el actual chambelán, Zinn. Y hasta practican la religión xirgona. A cambio, el Imperio les permite tener gran autonomía y elegir al gobernador de Dénuzeb de entre su pueblo.
—Por tanto, —mencionó Rupert— Shann puede moverse libremente por el Imperio. Tendremos que...
—Disculpe Gobernador —interrumpió un comandante xirgón. —General Larg, hay un reporte de Inteligencia Imperial que ubica a un dénuzeb identificado como Shann en el Sistema Gálathos.
—¡Vamos para allá! —dijo Sashak.
Sistema Gálathos
Imperio Xirgón
Día 17 del Mes 1 del Año 2103 D.A.
La Sephirot sobrevolaba en el espacio cerca de la órbita de Gálathos 5, capital de la colonia.
—Excelente —aseguró Sashak— la aduana de Gálathos registra la entrada de Shann...
—Rupert —dijo Kriggs escuchando un mensaje que llegaba desde el hiperespacio a todas las naves afiliadas y probablemente a las xirgonas también— creo que deben escuchar esto:
—Atención todas las naves afiliadas —decía el mensaje proveniente del Comando General— hace media hora la Guardia Imperial Xirgona atacó e invadió el Planeta Lobaria. Repetimos; el Planeta Afiliado de Lobaria ha sido invadido por el ejército xirgón. Se convoca a todas las naves afiliadas a que viajen a Lobaria para defender territorio afiliado. Repetimos, todas las naves afiliadas deben viajar a Lobaria de inmediato...
Ushuk y sus subalternos sacaron sus armas láser y las apuntaron a los afiliados. Zílog y Kriggs hicieron lo mismo de forma simultánea.
—¡No permitiremos que esta nave vaya a atacar al Imperio! —dijo Sashak.
—¡Esta es una nave de la Afiliación! ¡Quedan arrestados! —dijo Zílog.
—¡Basta! —gritó Rupert. —De nada nos sirve matarnos mutuamente. Zílog, te ordeno que bajes tu arma...
—Tu mandas Rupert.
—¡Kriggs! —comandó Rupert, la soth continuó ignorando la orden. —Kriggs, soy gobernador, tu superior jerárquico. Te ordeno que bajes tu arma... —Kriggs obedeció.
—Si... señor... —dijo sarcástica.
—General Larg, le suplico que haga lo mismo —pidió Rupert. —No sólo no tiene sentido que nos matemos. Estamos en una importante misión contra un enemigo común de nuestros pueblos.
—De acuerdo —dijo Ushuk— bajen las armas —todos obedecieron al instante. —Hagamos un acuerdo de honor, Gobernador. Durante el resto de la misión ignoraremos el hecho de que nuestros gobiernos están en guerra y no nos traicionaremos. Que este acuerdo perdure hasta que la Sephirot esté fuera de territorio xirgón.
—Trato hecho —dijo estrechándole la mano.
Sistema CarixisNam comandaba la flota afiliada que confrontaba violentamente a la flota xirgona. Debido a la fiereza de la contienda, el Puente mostraba estragos por todas partes; humaredas, consolas destruidas, paneles caídos, cables chispeantes que colgaban del techo, y dos oficiales muertos en el suelo.—Señora —le decía Cheng desde su consola— tenemos daños masivos en toda la flota. No podemos confrontar la nueva tecnología xirgona...—¿Hablaron con los valtáricos y los veganos?—Sí, señora —le respondió el insectoide Arg— y están librando batallas contra los xirgones en sus respectivas fronteras...—¡Que el Único nos ayude!—Señora —le alertó Cheng— nuestra nave está siendo invadida por soldados xirgones. Pene
Sistema CarixisSede del Concejo Galáctico Día 2 del Mes 2 del Año 2103 D.A.—Señor Secretario General —le dijo un militar brazzky— ante usted, el Presidente de la Afiliación Democrática de Planetas, Rupert Barrington.Barrington entró al lugar seguido de un séquito de soldados afiliados con uniformes verdes. Eran aproximadamente diez hombres y mujeres de todas las especies afiliadas. Rupert y Barrignton estrecharon sus manos e intercambiaron amistosos saludos.—Señor Secretario General —anunció un militar xirgón— ante usted, Su Majestad Imperial, Niurg I, Emperador de Xirgón y soberano del Imperio Xirgón.Con un saludo mucho más frío y seguido por otros diez soldados xirgones en rojos uniformes, de los cuales sólo uno er
Planeta MarteProvincia del Imperio XirgónDía 14 del Mes 4 del Año 2103 D.A.Jadi transitó por los Barrios Árabes de Marte. La ciudad de Nueva Meca, centro económico y social de las colonias árabes en Marte, aún mostraba los estragos provocados por el bombardeo xirgón de algunos meses atrás. Sin embargo, alto se erguían las mezquitas con sus atalayas y domos, las madrazas estudiantiles, los edificios públicos y los cafetines todos en arquitectura islámica típica.Era de día y las rojizas arenas se levantaban como polvaredas ante el paso de los aeromóviles y las naves surcaban el cielo marciano. La atmósfera marciana (generada artificialmente por satélites y torres meteorológicas especiales) siempre producía un aire rancio y seco. Miles de ciudadanos &aacu
Sistema CarixisTerritorio xirgónTemplo de los ProfetasUshuk, atormentado por el remordimiento de que la ambición lo cegara y escogiera en consecuencia a un mal emperador, consultó al único profeta de la Casa Larg, un anciano de 253 años que residía en un viejo templo de profetas.—Veo en el futuro mucho dolor y conflicto. Tiempos oscuros se aproximan. Fue bueno que no escogieras el puesto de primer ministro, o habrías muerto antes de tiempo. Habrá una nueva guerra civil en el Imperio dentro de muchos años...—¿Por qué?—No lo sé claramente. Veo una mujer mestiza muy hermosa. Seducirá al Emperador y se convertirá en su esposa a pesar de tener sangre humana. La mujer se convertirá en la verdadera gobernante xirgona y llevará al Imperio a
Puerto espacial de AstrópolisDía 5 del Mes 5 del Año 2103 D.A.El puerto espacial más importante del territorio afiliado de Carixis estaba abarrotado de personas esperando el arribo de sus seres queridos. La celebración del Festival de la Victoria se aproximaba y normalmente las familias se reunían en dichas fechas.Rupert, Nam, Lin, Zílog, su novia Sálax, y Shikha esperaban ansiosos que sus parientes llegaran al lugar.—¿Emocionada de ver a tus hermanas, Sálax? —le preguntó Zílog.—No las he visto en cinco años —respondió Sálax— y eso que son mis únicos parientes. Los sáuxer no somos particularmente... familiares.—Será una buena semana de vacaciones —dijo Lin.—¿No pasarás la fe
Residencia de Rupert CorradoDía 8 del Mes 5 del Año 2103 D.A.Esa noche las familias Corrado y Brak celebraban alegremente el Festival de la Victoria. Yashak Kurg había compartido de toda la velada. Hacía poco había pasado el tradicional desfile que se realizaba en la Ciudad Capital de Brazzky. Así que ahora disfrutaban de una cena familiar como antesala del intercambio de regalos.—Las carrozas alusivas de cada planeta afiliado estuvieron bellísimas —le decía Sarai Corrado a Kam. —Me encantó la carroza de Lobaria con todas esas hermosas flores.—Y fue curiosa la carroza de Brakion —respondió Kam— considerando que es la primera vez que participan. Todas esas... espinas y cráneos...—¡Corrado! —gritó una voz enfurecida a la salida del apartamento de Rupert
Primer Templo Solar Lobariano en Carixis—¿Te encuentras bien? —preguntó Rupert a su mejor amiga y ex novia, la científica Shikha, quien meditaba frente a un altar al Sol. Estaban en un templo solar lobariano que, como todos, consistía en un exuberante y hermoso jardín repleto de flores donde las lobarianas meditaban o realizaban danzas en adoración al Sol. Rupert había entrado de improvisto en busca de su amiga. —Vine en cuanto me enteré.—¿De que te enteraste, Rupert?—De que el Escuadrón de la Muerte había destruido una villa en Lobaria, matando a tu hermana.—El Escuadrón de la Muerte atacó la Villa Florida, uno de los lugares más hermosos de la Vía Láctea. Un paraíso en la Galaxia donde estaba ubicado un importante monasterio de sacerdotisas solares. Despu&e
Cydonia Capital del Planeta Marte Provincia del Imperio Xirgón Día 3 del Mes 6 del Año 2103 D.A. En los calabozos de la Prisión Imperial de Marte, Jadi se encontraba siendo interrogada por un militar xirgón de aspecto relamido. Estaba sentada sobre una silla metálica con las manos esposadas a la espalda. Mostraba aún los hematomas en su rostro fruto de los maltratos y abusos de los guardias xirgones. —No somos los monstruos que tú piensas, Jadi Bashar —le dijo el militar de rango capitán mientras se paseaba por la lóbrega sala de interrogatorios. —Ahora que estamos tratando de formar un solo Ejército Galáctico, en el Imperio intentamos mejorar relaciones con los afiliados. Es por esto, en aras de la sensibilidad hacia los humanos, que no cometeremos ninguno de los crímenes que tú piensas que cometemos. —Vaya, que maravilla —espetó Jadi— aparentemente