Capítulo 20

Dana

Bajé del auto, y con mis manos nerviosas jugaba con las llaves, el corazón me latía a toda velocidad, Demetrio bajaba en ese momento del Audi y se ajustaba la gabardina por el frío de la madrugada.

Los niños estaban con Lina. Eso me tranquilizaba por momentos. Ellos no me arrebatarían a mis hijos. Lina es madre, ella no sería capaz de ello.

Subió las cortas escaleras de la entrada a paso lento como si se debatiera en entrar junto a mí a la casa. Y era en efecto eso. Se detuvo a medio escalón con las manos dentro de la gabardina negra. Hacía resaltar su piel pálida y cansada.

—Dana…—lo observé detenidamente.

— ¿Sí? —sabía que diría algo para volverse a cerciorar que esto era lo correcto. Sus ojos grises estaban llenos de confusión, nerv
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP