Cap. 21: Dispuesta.Ritter llegó a la casa de su padre. El hombre salió a recibirlo en la silla de ruedas empujada por su actual esposa, la doctora Janea, quien llegó allí a atender a su padre y que luego se descubrió la relación que tenían y que causó el divorció de sus padres (aunque estos ya no tenían vida conyugal).—Buenas noches… Adelante —dijo la hermosa y joven mujer que rodaba la silla de su padre.Zav Wolf, sonrió de lado, era su habitual sonrisa gracias a las secuelas de su último pre-infarto que casi le deja difunto.—¿Al fin te acuerdas que tienes un padre? —le reprochó.—No digas eso, sabes que he estado muy ocupado últimamente.—Buenas noches —dijo Lara tímidamente, mientras que Egmont rodaba sus ojitos de un lado a otro mirando todo a su alrededor. Ritter entonces les dijo:—papá, Janea, él es Egmont, mi hijo y ella es Lara mi esposa y madre de Egmont.Su padre abrió la boca hasta donde pudo, y luego tanto él como Janea soltaron la risa.—¡¿Perdón?! —Exclamó Zav Wol
Cap. 22: Una llave.Dos días después, el doctor Theron sentó a Lara y a Ritter frente a él.Lara mirando fijamente a los ojos del médico y anticipando lo que era obvio afirmó:—Entonces la única alternativa que tenemos es una hermano, ¿verdad.El doctor asintió, mientras que Ritter rodó sus ojos a la mesa, pero ella se giró hacía él y en modo desafiante y con su mentón en alto y los ojos cristalizados aún le dijo alto y claro:—Estoy dispuesta a hacer lo que sea por salvar la vida de mi hijo, Ritter, aunque ello implique que tenga que llenarme de hijos durante todo el tiempo en que Egmont necesite de las células de sus hermanos para vivir.Las lágrimas de Lara rodaron mientras seguía mirando a Ritter.El doctor quedó en silencio por un buen rato, Ritter tomó las manos de Lara y las apretó, ella se levantó y decidida se despidió saliendo apresurada par a buscar a su hijo que estaba en el jardín del hospital con la niñera.Lara se recostó de la puerta, su corazón parecía detenerse al
Cap. 23: No todo es lo que parece.Al llegar abajo, Lara fue hasta la recepción y entregó la llave a la recepcionista.—Esto lo…—pero la chica no la dejó terminar.—Espero que regresen pronto!… —Fueron las palabras de la recepcionista y sonriendo tomó las escaleras dejando sólo el lugar.Lara se volvió buscando a Emil, pero este estaba pálido mirando justo a detrás de ella, Lara se volvió y quedó congelada pues casi tropieza con la estatúa de hielo que era Ritter Wolf.El hombre la jaló fuertemente por la muñeca y con la nariz encogida le gruñó:—¿Qué significa esto? —Lara palideció. Ritter la sacudió de nuevo—. Te estoy hablando.—No sé a qué te refieres —después desmesuró sus ojos y entonces resopló—: Estábamos almorzando en el restaurante al lado.Lara se dio la vuelta, sabía cuan molesto estaba él, pero ella podía probar que no estaba en el hotel con Emil. Ritter la tomó por el brazo.—Pensemos que es cierto, entonces explícame ¿qué haces aquí ahora entregando la llave de una
Cap. 24: FloresDurante todo el caminó Lara sólo veía al frente. Por unos minutos su ira se hizo presente, sus labios apretados y sus movimientos bruscos denotaban sus sentimientos.—Sólo quería que alguien me oyera —comenzó diciendo, con su rostro enrojecido—. Cuando mi hijo nació mi mundo se hizo tan brillante que podía sola contra el universo entero, pero desde que Egmont enfermó mi corazón, mi mente y mi cuerpo no han tenido paz ni sosiego... El verlo sufrir con sus dolencias, con sus terapias, el temor a perderlo y no verlo más es lo más terrible que he sentido en mi vida y ellos, mi madre y Emil son los únicos que han estado conmigo, incondicional y desinteresadamente. Y Emil, especialmente Emil ha estado conmigo, antes, durante y aún sigue muy pendiente de nosotros, sobre todo de Egmont.Ritter aspiró aire profundamente y se orilló a la acera.—Ya estamos próximos a llegar a la casa —le dijo y tomó una servilleta y se la dio—. No es bueno que Egmont te vea así.Lara tomó la
Cap. 25: “Ser eliminada” —Ritter ya es suficiente. Egmont duerme al lado. El hombre suspiró y se sentó a la orilla de la cama. —Egmont está dormido —mesó sus cabellos y agregó—: ¿Has pensado sobre lo que nos dijo el médico? Lara se sentó a su lado. —Yo creo que tenemos que ponernos de acuerdo para ello —dijo sobando su frente. Ritter refunfuñó: —¿Necesitas un horario? —mirándola arguyó—: Eres mi esposa. Lara mordió su labio inferior—: ¿Cómo supiste que yo estaba en ese lugar? Ritter caminó un poco por la habitación, quería explicarle sin involucrarla demasiado, pero que entendiera por qué lo hizo: —Hoy, vi un hombre sospechoso que los observaba, a ti y a Egmont en la clínica. Llamé a mis hombres y te puse personal para que te proteja las 24 horas del día. Egmont ya los tiene desde que están en la mansión. Lara se levantó de inmediato. —Ah, gracias por decírmelo —sacudió su cabeza y se iba a su habitación, entonces él dijo: —El hombre al que le hicieron el pedido en el
Cap. 26: Confusión La mansión de Ritter está repleta de gente decorando los jardines para el festejo del cumpleaños de Berit. Ritter se encuentra en Suecia dictando una conferencia, pero estaría de regreso en casa aquella noche.Lara recibe una llamada de Ritter aquella mañana.—Lara, no me has pedido nada desde que regresaste.—¿Qué t puedo pedir Ritter, no necesito más de lo que tengo ya?Ritter sonrió para él.—Lara, esta tarde es el cumpleaños de Berit, y aunque sé que eres muy sencilla y reservada, la prensa estará en la casa… Voy a darle instrucciones al chofer para que te lleve de compras para ti y para Egmont.—Es horrible para mi ir de compras, además Ritter tanto mi hijo como yo estaremos a gusto con vestirnos con algo de lo que tenemos en el ropero.—¡NO! —Subió el tono de voz —Lara frunció el ceño, ella es un poco reacia a imponencias—. Tú eres mi esposa, para la noche cuando llegué lo haré acompañado de algunos colegas que están conmigo en esta ponencia. Lara respiró
Cap. 27: Bailarina ExóticaLara desmesuró sus ojos y su rostro palideció al ver lo que había en la cama.—Señora, dígame… Esos son los trajes… ¿Esos trajes los escogió la señora Marlene y Erika?—¡No, esos trajes son de una bailarina exótica! Todo es un confusión, pero debo hacer que me traigan esta tarde los trajes de noche o de lo contrario no podré acompañar a Ritter en la reunión de esta noche… Sentirá vergüenza de mí…—Tranquilícese señora, lo más urgente es encontrar algo apropiado para que acompañe a la señora Adalia ahora mismo. —Revisa en el vestier, mientras yo llamó a la tienda.Lara estaba nerviosa y apresurada, ya tendría que estar lista, Aby corrió entró al vestier y echó afuera todo el closet de Lara, no encontrando nada que pudiera usar para el Party baby, se regresó y haciendo un desorden bárbaro fue descartando prendas al piso, dejando las que eran probable que Lara usara, repentinamente encontró una blusa larga y suelta en rosado antaño de poliéster procesado
Cap. 28: Lo que duele un hijoLara corrió a la habitación con Egmont ya casi dormido. —Aby dale una ducha tibia al niño y ponlo a dormir mientras yo me baño, vamos a ver qué podemos hacer con esos trajes porque Ritter me acaba de decir que están camino a casa y espera que ya esté lista cuando él llegue.Aby se encargó de Egmont a toda prisa y se fue a ayudar a Lara a Vestirse.Cuando Lara Salió del baño, Aby le mostró unas prendas de vestir en sus manos y le dijo:—Póngase esto, me gusta como se ve, sus telas con delicadas. Lara se puso la braga.—Le queda espectacular, sólo que es muy descubierta, le adaptaré de una vez sobre su cuerpo para que vaya maquillándose y peinándose. —¿Cómo sabes de esto?—Mi madre era modeladora de trajes para actrices en un canal de televisión, yo siempre la acompañaba. Aprendí a modelar y transformar los trajes sobre el cuerpo de las actrices.—Tengo miedo de que no funcione.—Probemos, después el espejo le dará la respuesta.Aby tomó una blusa que