Vernon…
Vanessa es fuego en su interior puedo sentirlo cada vez que con su mirada y sus palabras me reta, es inmutable y se defiende bien… pero eso no me sirve, debe obedecerme y hacer lo que le digo sin replicar… debo hacer que se doblegue por completo ante mí.
Tiene unos labios tan sensuales, carnosos y llamativos que todo mi ser quiere devorarlos hasta déjalos rojos de mis besos. Podrá no ser como las modelos que traje, pero… ¡Mierda! Es jodidamente sensual… esa mirada de conejo asustado, de inexperiencia es tan encantadora… « ¡Joder Vernon! No te gustan las vírgenes, recuerda eso… » intente alejar mis pensamientos, pero, mi cuerpo se movió por si solo arremetiendo contra esa dulce boca.
Me deje llevar por la emoción que sus labios me estaban dando, mordí y chupe con total alevosía. Mi corazón latía c
Vanessa…Sali huyendo prácticamente de esa habitación, mi corazón y mi cuerpo temblaban en sobremanera que estaba segura de que colapsaría ahí. Le asigno a un sirviente que me guiara hasta mi habitación la cual cerré justo después de que ahí me dejara.Ni siquiera me despedí de él, solo quería salir corriendo. Me senté sobre la cama mirando a la puerta, le había puesto seguro en caso de que deseara entrar en la madrugada.« El dijo que no le gustaban vírgenes, no te hagas ilusiones » me recordó mi conciencia, suspire, pero… ¿Cómo estaba segura de que él no fue quien…?— ¡Ya deja de pensar en eso! — me grite dejándome caer sobre la cama.Traía la bata a medio abrochar, se me veía el jodido sostén, lo mire y no negare que me
Regresamos a la mansión de Vernon, ahora que la observo bien es algo… tétrica. No niego que tiene detalles preciosos como el jardín o los caminos de piedras blancas, pero… si solo esta el y sus perversiones de vez en cuando debe ser algo aburrido.Deje mis cosas en mi cuarto bueno la habitación que me asignaron y cual fue mi sorpresa que mi closet estaba lleno de ropa increíblemente lujosa. Zapatos, vestidos, pantalones, blusas… me sorprendí tanto que dejé caer mis pobres y desgastadas prendas al suelo.— ¡Carajo! — grite de la emoción.— ¿Degusta nena?— ¡Mierda! — una voz vino detrás de mí, me aleje hasta que choque con la maldita puerta corrediza y caí al suelo de sentón — ¡¿Oye que te pasa?! — Vernon soltó una sonora carcajada.— Valla no pensé que
— Recuerda solo debes atraer su atención, encántalo con tu cuerpo… — puso su mano detrás de mi cuello, ambos mirábamos al hombre que estaba justo en la barra, era igual o más atractivo que Vernon. Rostro cuadrado, barbilla bien definida combinada con labios estrechos y ligeros, no tan carnosos como lo tenía mi comprador.— Bien, lo hare — dije con confianza al mirar el rostro de Vernon. El otro hombre podría parecer atractivo pero esos ojos intensos y maliciosos de Vernon le robaban uno que suspiro a mi corazón « ¡Concéntrate Vanessa! » me recordé. — espero que me protejas como prometiste…— No dejare que te lastime de más, aun no probara tu cuerpo solo lo dejaras con las ganas — recalco apretando su mano aun mas en mi cuello — recuerda joyita… hechízalo.Me dio una copa extra de vino,
Vernon…Observar como se desenvolvía Vanessa me estaba haciendo perder el autocontrol que tengo. Mauro es un hombre sin escrúpulos con las mujeres.«Tú también lo eres, no sé de qué te quejas… » recrimino mi subcontinente, y si era verdad.Sus manos recorrían su piel de forma lasciva y parece que Vanessa lo esta disfrutando. Charlaron y rieron por un buen rato hasta que desaparecieron entre la multitud, la forma en que ella se le acerco fue espectacularmente natural. Como si el destino me mostrara lo hábil que ella puede ser.Tome un sorbo de mi wiski ante el nervio de haberla visto irse con el , solo espero que siga el jodido plan y no se deje llevar por un par de palabras dulces. Ese hombre sabe como llevarlas a la cama y no es precisamente un caballero con ellas.— Te notas un poco… impaciente — la voz de mi socio y amigo Ares G
— Tómame por favor… — musita acalorada, puedo notar el calor de su cuerpo en su mejillas rosadas, Vanessa en este momento es un tren fuera de control. Deseosa de que la posea y la haga mía — Aaah… — gime cuando paso mis dedos por su vagina, esta húmeda y caliente lista para recibirme.— Lo hare nena… lo hare… — me adueño de sus labios y su boca sigue el ritmo de mis besos. Es dulce e inexperta, batalla para besar bien, pero… se siente jodidamente maravilloso.— Aaah… Vernon… — aun drogada menciona mi nombre — sigue por favor… — introduje un dedo en ella mientras con mi pulgar acariciaba su hinchado monte, abrió mas las piernas y sus gemidos comenzaban a salir con delicadeza. Me sentía en el cielo de solo escucharla.No pude contenerme e introduje uno más, ella era virgen y mis dedos podían sentir lo estrecha que estaba. Siempre dije que odiaba las vírgenes, pero ¡Joder! Ella se sentía exquisita. Con delicadeza fui quitando su ropa, prenda por prenda. No entendía
Dos días después…Después de mi fatídico momento con Vernon y su hija me llevaron a la mansión donde regularmente me quedaba. Meditaba constantemente sobre mi trabajo y lo que debía de hacer. Extrañaba mi vida con mi familia, tranquila y lejos de todo este caos de los adinerados.Vernon ha actuado extraño desde esa noche, esa en la que me hizo suya. Mi primera vez… mi virginidad… fue de él. Ahora estoy alistándome para el show de esta noche y mi mente no deja de recordarme aquel momento en que su boca beso mis labios y sus manos recorrieron mi cuerpo.Aunque estaba drogada era consciente de cada una de sus caricias las cuales, fueron espectaculares. Sin mas decir que sentirlo dentro de mí fue la sensación más exquisita que jamás haya probado. Me llevo hasta el séptimo cielo y más allá.« ¡Vane
Vernon…Verla bailar en ese jodido traje me estaba volviendo loco, era realmente una fantasía. Vanessa sabe como usar su encanto, ella no necesita que alguien le ensene. Bueno quizás si a disfrutar en el sexo, pero, esa inocencia es la que…— Si no quieres que lo haga, simplemente sácala de aquí — la voz de Ares me regresa a la realidad. — a kilómetros se nota el debate que está en tu mente.— Ese es su trabajo, ella accedió y no hay vuelta atrás — tome el coñac de golpe casi ahogándome con él.— Esa no tu te la crees — bebió y me sonrió — esa chica te ha cautivado y tu lo sabes, solo que no quieres aceptarlo.— La conozco solo hace un par de días — refute.— Pero no te impidió de salvarla de la exposición, una donde sabes que nadie puede inter
— ¿Crees que con eso hablare? — el tipo aun tenia buena resistencia, normalizo su respiración en cuestión de minutos y no tenia temor al ver la sangre salir de él.— Solo es el aperitivo no te adelantes a la situación… — resople, realizar torturas era una de mis especialidades. Por eso siempre obtenía mis pruebas en mis casos.— Ustedes son tan patéticos… ¡Aaaah esta fría! — grito en cuanto uno de mis hombres le aventó una cubeta con agua y hielos.— Un buen baño antes de la fiesta. ¡Tráeme varias inyecciones de adrenalina! — ordene — no queremos que nuestro amigo se nos vaya tan rápido.— ¿Ya traerán la maquina? — pregunto Ares — seria interesante asar la carne antes de dársela a los perros. Merecen un buen festín — solté una risa jugu