holis mis preciosos fanseses n.n/ manitas arriba si les está gustando los tres meses perdidos de la manada del Sur XD los amoooooo son los mejores fanseses del mundo mundial PD: Amamos al abuelo Fred.
Frederick. (Unas horas antes) El callejón se encontraba despejado. El camuflaje de Alfa nunca había servido a un mejor propósito. Caminé con las manos en los bolsillos. Tenía curiosidad por saber qué tan fuertes eran las criaturas que Bastian y Chase describían, pero no quería luchar contra ellas si no había necesidad. La brisa nocturna olía a humo, así que supe que esas cosas continuaban con su alegre destrucción como el día en que la muralla hecha por el Alfa Noa cayó. Bueno, supongo que era un plan a corto plazo; seguramente Noa solo quiso comprar tiempo para que la manada pudiera terminar de evacuar. Un buen Alfa tanto en vida como en muerte. Casi sonreí cuando recordé el día en que Rose había descubierto que, de hecho, Noa era algo así como mi sobrino. Ah, mi tiempo con él traía muchos buenos recuerdos. El cachorro se quejaba mucho del entrenamiento intensivo que le había dado para poder heredar la manada; había valido la pena el esfuerzo. Un día era un cachorro asustadizo
Bastian. -¿Estás listo, cachorro? - Preguntó el Alfa Frederick tocando uno de mis hombros. Quizá habían pasado cerca de cinco minutos desde que mi cerebro comenzó a trabajar a toda velocidad. -¿Vamos a comparar notas? - Pregunté con cansancio. -¿De que m****a hablas? -De que probablemente debamos saber la pregunta del otro para que no preguntemos lo mismo. - Dije como un jodido trabalenguas. -No lo haremos. Tu mente funciona muy diferente de la mía. -Bueno, si pero... -Pero nada. Estamos listos. Yo lo miré con incredulidad. -Yo no estoy... -Gran Madre, estamos listos. - Dijo él en voz alta cortando de tajo lo que estaba por decir. Jodido abuelo loco. Un cálido viento sopló en nuestra dirección y enseguida me arrodillé con reverencia. Alfa Frederick hizo lo mismo solo que más lentamente. -Mis hijos... - Susurró la suave voz. - ¿Qué puedo hacer por ustedes? Lo mejor que yo podía hacer era esperar y escuchar qué m****a iba a preguntar Alfa Frederick. Después podría modifica
Bastian.¿Qué tan extraño era abir los ojos y mirar fíjamente a un halcón?Muy jodidamente extraño.-¿Podemos ir a desayunar ahora? - Preguntó Alfa Frederick enderazando el torso.Miré la posición del sol.-¿Cuánto tiempo ha pasado?-Quizá una hora, cachorro. No más que eso según mi estómago.Yo suspiré y me levanté.-Dejé a un par de guardias en la tienda de comestibles. Las criaturas...-Bersakers.-¿Perdón?-Bersakers. Así se llaman. - Dijo él encogiéndose de hombros.-¿Y cómo m****a lo sabe? - Pregunté con curiosidad.-Te lo dije, soy muy competente. ¿Acaso crees que solo salí del lugar seguro para dormir bajo las estrellas? Por supuesto que no. Estuve pensando con seriedad en la pregunta que le haría a Nuestra Gran Madre desde antes de que llegaras y, además, me encargué de averiguar que los Bersakers planean cortar nuestro suministro de agua mientras llegan más refuerzos al territorio. Fueron horas muy largas, cachorro.-Usted... bueno, joder. - Dije bastante impresionado.Yo sol
Bastian.-¡Vayan a la entrada más próxima, dejen la comida! Bloqueen esa entrada o cacen a los que hayan podido entrar. - Bociferé utilizando el comando Alfa. Los lobos corrieron a cumplir mis órdenes. El Alfa Frederick se quedó a mi lado.-¿Distracción? - Preguntó él.-Si. Necesito alejarnos de ahí. - Dije sacando las garras.-¿Qué piensas hacer? - Preguntó con curiosidad. -Quizá arrojar algo contra el cristal desde un de los edificios cercanos. - Murmuré mirando a nuestro al rededor a toda velocidad.El Alfa se rió y yo Murmuré distraídamente.-¿Tiene un plan mejor? -¿Por quién me tomas, cachorro? - Dijo con un bufido antes de llevar dos de sus dedos a la boca y silbar para destrozar cualquier oído cercano. Incluso yo di un respingo involuntario.Como si fueran uno, los Bersakers levantaron la vista y se levantaron en dos patas para ubicar la fuente del sonido.Joder, quizá ni siquiera habían entrado al sitio seguro y solo se encontraban en cuatro patas por lo que no los había vi
Chase.Comenzaron a golpear nuestra puerta poco después del amanecer.Yo no habría dormido más de un par de horas por lo que abrir los ojos fue una tarea titánica. No para mis hermanos, ellos comenzaron a llorar fuertemente desde el primer toque a la puerta.-M****a. - Murmuró mamá con un quejido lamentable. - Sé una buena pareja y ve a ver qué quieren los... moder, ¿Dónde estás?Supuse que se refería a papá. Miré hacia su lado de la cama para comprobar que no estaba.Mamá se levantó gruñendo algo sobre las malas parejas y abrió la puerta en medio de los chillidos de mis hermanos.Esto me hacía extrañar a la dulce y tranquila bebé de la doctora Paula. ¿Sería que las hembras eran menos ruidosas que los machos?-Alfa. - Dijo el lobo agitado. Me levanté de la cama como un rayo al ponerle verdadera atención. - Necesitamos su presencia en...-Guíame. - Dijo ella cortándolo y luego me dió una mirada rápida. - ¿Podrías cuidar unos segundos a tus hermanos?Yo asentí y ellos se fueron.El lobo
Adom.. El lobo parecía bastante ocupado corriendo mientras la jauría de Bersaker le seguía los talones. Nana decía que no había un mejor comienzo para una presentación amistosa que llevar un presente, así que mientras él seguía corriendo, busqué algo que podría llevarle para hablar con él. Después de un par de vueltas y aleteos de mis alas, encontré algo brillante que seguramente le gustaría. El viejo lobo había dicho que después de ayudar a este lobo, seguramente sería suceptible a una alianza; no estaba dentro de mis facultades el proponerla ya que no era la matriarca de nuestro nido o su compañero, pero si podría sondear a este lobo. Con todo lo que había dicho el viejo lobo, estaba seguro de que éste hombre lobo era el líder de la manada. Busqué a dónde había ido y lo encontré en esa especie de formación de roca extraña en la que había estado antes con el viejo lobo. El que pudieran dormir expuestos y a plena luz con todos esos Bersakers rondando me pa
Adom.Bajar del Nido para buscar ayuda de otros Nidos cercanos y no encontrarnos a nadie fue la primera señal de que la profecía de Horus estaba cerca. Nuestro pueblo prefería vivir en nuestra forma animal, por lo que sólo bajaba uno de nosotros para conseguir ropa de vez en cuando. Nos servía cuando hacíamos algunos negocios con los humanos (como la venta de nuestras plumas caídas o algunas artesanías que hacíamos con los huesos pequeños de animales que cazábamos) pero fuera de ello, se podría decir que nuestra forma humana era hasta cierto punto algo extraña.Así que al bajar y no encontrar halcones en donde se suponía que estaban, encendió nuestras alertas.- La primera parte de la profecía se ha cumplido.- Dijo nuestra Matriarca. - A nuestro al rededor han desaparecido compañeros que comparten nuestra naturaleza.-¿A quién le pediremos ayuda, Matriarca? - Preguntó uno de los plumas mayores.- No lo sé. - Dijo ella con pesar. - Sin otro Nido, me temo que no hay nada que podamos hac
Chase. Yo no entendía nada de lo que estaba diciendo el señor Fred. ¿Sería por la edad que hablaba cosas sin sentido? Bueno, si era así, yo no sería el primero en decirle que visitara a un médico de la manada. -Señor Fred. - Dijo mamá lentamente. - ¿Podría repetir lo que acaba de decir pero ahora con... Un poco más de detalles?- Tengo hambre, humana. - Dijo él quejumbrosamente. - Los detalles implican tiempo en que podría morir.Mamá suspiró.- Me alegro de que se encuentre bien. - Dije para atraer la atención. - ¿A qué se refiere con papá haciendo tratos con otra manada?- Quizá lo más correcto es decir una "bandada" . - Dijo pensativamente y luego hizo un gesto para dar a entender que eso no era importante. - Tenemos a un Halcón sobrevolando el territorio. Por lo que pude averiguar, solo está vigilando a Los Bersakers de arriba y no tiene intenciones de atacarnos; me pareció buena idea darles a los dos un empujoncito en la dirección de una alianza.-¿Qué es un Bersaker? - Pregunt