Li Xi estaba muy ocupada por los problemas de calidad de los productos. No solo se ocupaba del servicio posventa, sino también de apaciguar a los consumidores.

Apenas pudo descansar en los últimos dos días, y mucho menos prestar atención a lo que ocurría con Jin Fengchen. Por lo tanto, no era consciente de que sus antecedentes quedaron al descubierto.

En este momento, lo único que quería era resolver el asunto lo antes posible y volver a ponerlo todo en marcha. Entonces se vengaría de Jin Fengchen.

Sin embargo, temía que Jin Fengchen hiciera otro movimiento de repente y la agarrará desprevenida.

Esta vez, había sufrido un duro golpe. Jin Fengchen siempre fue deliberado en sus acciones. Su siguiente plan no sería más débil que el anterior, y podría acorralarla en un callejón sin salida.

Sin embargo, extrañamente, después de esperar dos días, Jin Fengchen no hizo ningún movimiento.

En ese momento, estaba a medio camino de su trabajo de apaciguamiento. Empezó a tener dudas porque