31 de diciembre, ya quería iniciar el nuevo año, haría algunos cambios por el bien de mi salud mental. Estos dos últimos días estuve evitando a Harry, pero me resultó más difícil de lo que pensé ya que venía todos los días a ver a Charlotte, y siempre preguntaba por mí, que descarado ¿no?—¿Qué debería ponerme hoy? — preguntó mi prima revisando en el bolso que había traído a mi casa— ¿Algo abrigado o algo sexy?Me sentía muy incómoda ayudando a Charlotte escogiendo ropa para salir con el chico que me atraía.—No importa — murmuré volviendo a leer mi libro — Vas a recibir el año en Times Square, donde habrá mucha gente, no creo que a nadie le importe lo que lleves puesto.—Bueno pues, para mi esta noche es especial — sonrió sentándose al borde de la cama — Porque estaré acompañada por Harry.Olvidé mencionar que estos días he intentado convencer a mi corazón y a mi cabeza que no necesito a Harry Ward, que es innecesario en mi vida. Pero al parecer son muy tercos, ya que cuando cierro l
—Harry — sonrió viendo al ojiverde — ¿Nos acompañarás esta noche?El rizado me miró como pidiendo explicación, supongo que no se esperaba que Noah se encuentre aquí, soltó una risa burlona.—¿Ustedes dos están saliendo? — mordió su labio mientras sonreía.—Así es — respondí cruzándome de brazos — No entiendo porque te sorprende tanto, era algo que iba a pasar. —No, no cariño — peinó su cabello — No me sorprende, para nada — rió— Bueno, no estoy aquí para hablar de ustedes dos, vine a buscar a mi novia. —¿Qué? — susurré con un hilo de voz, sentí que tenía que salir corriendo en ese momento antes de que Harry me viera derramar lágrimas por él. No podía creer que se estaba comportando de esa manera después de aquella maravillosa tarde que pasamos juntos, después de aquel beso que me hizo sentir en las nubes. —Sum, te lo iba a contar — dijo Charlotte saliendo por la puerta y besando a Harry — Es que no tuve oportunidad, te estabas comportando un poco rara y decidí hacerlo otro día — pu
—Me haces sentir vivo hermoso ángel — sonrió — Quiero que sepas que haría cualquier cosa con tal de verte feliz — acarició mi mejilla.Cerré los ojos y solté un suspiro, al abrirlos miré con el ceño fruncido al rizado, retrocedí unos pasos y crucé los brazos. Harry intentaba descifrar que había detrás de mi ceño fruncido, y obviamente quedo confundido por mi rechazo. —¿En serio? — reí y negué con la cabeza — No te entiendo Harry Ward, me besas y unas horas más tarde llamas a Charlotte y sales con la sorpresa de que son novios. Y ahora, llegas con un maldito collar y me dices que te hago sentir vivo — puse los ojos en blanco — En verdad, me confundes — cubrí mi rostro y respire profundo tratando de eliminar el doloroso nudo en mi garganta.Odiaba que él me haga esto, ¿tenía cara de tonta o qué? Creía que podía volver a mí como si no pasara nada.—Summer — se acercó a mi e intentó tocarme, pero lo detuve — Por favor — suplicó con la mirada.—No Harry — volteé mi rostro para que no vea
24 de eneroEste día me había levantado más animada de lo normal, ¿por qué? Bueno es mi cumpleaños, y estaba emocionada por todo lo que iba a hacer hoy. Especialmente me emocionaba la salida con Lucas, no nos habíamos visto en días.Sé que muchas personas les da igual el día de su cumpleaños, que era como un día común y corriente. Pero para mí no lo era.También querrán saber que sucedió con Harry y Charlotte en estas tres semanas, ¿verdad? Las cosas iban de maravilla entre ellos dos, para mí aún era difícil aceptar su relación, ¿cómo debería sentirme cuando el chico que me gusta tiene una relación con mi prima? Nada bien, me sentía pésimo.Nuevamente traté de olvidar al guapo ojí verde, pero como siempre, fracasaba, ¿cómo lo iba a hacer si pasaba todo el día en mi salón haciendo cosas indebidas con Charlotte? Cuando digo cosas indebidas, me refiero a que los encontraba besándose tan apasionadamente que en cualquier momento se arrancarían la ropa.Pensé que la visita de Charlotte serí
—Harry estás muy ebrio — reí con nerviosismo — No sabes lo que dices. —Si maldición, estoy ebrio — carcajeo — Pero sé perfectamente lo que estoy diciendo — relamió sus labios — Soy egoísta, lo sé — negó con la cabeza — Pero no quiero verte con Noah, jamás — musitó pegando más mi cuerpo al suyo — Espero que veas en la posición que me encuentro, mientras él está tocando tu piel, él está donde yo debo estar — golpeó la puerta haciéndome sobresaltar — Estoy vacío, lo sé — acunó mi cara entre sus manos — Solo sé que tú eres lo único que quiero hermoso ángel. Dios mío, que acaba de pasar. Esto era muy intenso y me encantaba.—¿Qué hay de Charlotte? — retrocedí unos pasos y lo miré con atención, temerosa de su respuesta.—¿No me estas escuchando Winston? — pasó una mano por su cabello— Tú sólo tu — volvió a acunar mi rostro entre sus manos — Tú eres lo único que quiero al final del día.—¿Estás seguro de eso? — susurré — ¿No será como la primera vez? Me besaste, y lo que más me dolió es, q
La intensa luz del sol de la mañana bombardea mis pobres y sensibles ojos. Doy media vuelta para reducir aquella molestia y caigo en cuenta de que no estoy en mi cama, abro los ojos de golpe y me siento.¡Auch! Mala idea.Miró a mi alrededor y reconozco la habitación al instante. Estoy en una de las habitaciones del pent—house de Louie. Genial, no tengo idea de cómo llegué aquí y por qué no estoy en mi casa. Nunca en mi corta había estado tan borracha como para no acordarme de algunas cosas, tenía lagunas mentales y eso me irritaba más.Pienso en lo que pasó anoche y escasos recuerdos vuelven a mí. Estuve buscando toda la noche a Harry, también recuerdo que nos besamos y dijo que soy a la única que quiere al final del día. Pero nada más…Me gustaría saber cómo he acabado aquí, pero si Harry estaba la fiesta no hace falta que me lo plantee. Tengo mi ropa puesta, así que no creo que hayamos hecho algo. Sonrío para mis adentros.Dios mío, necesito un cepillo de dientes y un poco de agua
—En verdad aún no logró comprender que estamos haciendo aquí — suspiré — Es un desperdicio de dinero ¿no lo crees?—No lo es — sonrió y me guio a la entrada del cine — No le veo nada de malo en tirar palomitas a las demás personas, es divertido — levantó los hombros.—¿Te parece divertido causar el mal a otras personas? — dejé de caminar y me crucé de brazos. La verdad es que no me parecía una buena idea tirar palomitas a las demás personas mientras disfrutaban de su aburrida película.Creo que la última vez que hice una broma de mal gusto fue cuando tenía 8 años, y la víctima fue mi mejor amigo, Lucas.Bueno, estábamos en mi casa, veríamos una película, recuerdo que encontré un bicho muerto y lo puse en las palomitas de Lucas. Aún no puedo creer que se lo haya comido, ¿cómo no pudo darse cuenta? Tal vez porque no despegaba la mirada de la pantalla. Cuando se lo dije se enfadó conmigo por una semana.—Unas bromas no hacen mal a nadie Sum, diviértete un poco — murmuró y agarró mi brazo
Recé por mis adentros no encontrarme con Harry cuando llegué a casa, no quiero escucharlo, no quiero volver a escuchar más de sus malditas mentiras.No trates de engañarte Summer, siempre dices lo mismo y segundos después vuelves a caer en los encantos de Ward. Mis ojos se llenaban de lágrimas cada vez que pensaba en las hermosas palabras que me dijo en la mañana.'Tú eres la única que podría encerrar este corazón salvaje con cadenas. Tu eres la única Summer Winston, la única que puede mejorar a este hombre malo'Entonces, si él pensaba eso sobre mí, ¿por qué me hacía tanto daño? ¿Cuál era la necesidad de hacerlo? Decía que le importaba, pero demostraba lo contrario.Algo que me inquietó todo el camino fue un auto rojo que me estaba siguiendo, al inicio pensé que era Harry, pero luego entré en razón, él no tenía un auto rojo, es más cuando regresé a ver vi un rostro completamente desconocido. Un chico castaño, no lo pude ver bien ya que llevaba lentes de sol color negro.—¡Demonios!