Narra Daniela. Narra Daniela.—No puedes dejarme aquí Kyril por favor—. Miro todo el lugar hay una especie de cadenas.Lo miró y me sonríe de una manera que da terror.—Te lo mereces Daniela por desobedecer, te dije que si escapabas te iba encerrar en un calabozo—. Niego frenéticamente, el lugar está muy oscuro y eso me va dar más miedo de lo que tengo.Forcejeó para soltarme de su agarre, me está lastimando demasiado.—Por favor suéltame, déjame ir te prometo que ya no escaparé—. Lo miró a los ojos para ver si lo convenzo. —¡Por favor! —. Lo miró con súplica, suelta su agarre un poco, talvez solo es por el sudor que hay entre nuestras manos.Me suelto y me siento en el piso, me aferró a sus pies, si salgo huyendo no tengo a donde ir no conozco a nadie eso es lo que más me frustra.—Ahora vas a suplicar—. Niego.—Si eso quieres lo haré—. Las lágrimas se me salen.—No, quiero eso Daniela, quiero que aprendas a obedecer mi mandato—. Lo miró perpleja.—¿Y quién eres tú? un rey, algún so
Sus ojos se tornaron de un color violeta, dale mi cabeza. —No te agradará saberlo—. Tome impulso y ver si podía quitármelo de encima.Pero como todo lo que hago en su contra es en vano. —Ya déjame vete—. Dije casi en un susurro.Él se levantó y me miro desde arriba. —Tus deseos son órdenes —. Su voz era de diversión, pero lo único que quería era tomar la bandeja y partírsela en la cabeza.Salió sin decir más, cerró la puerta y se fue. Me dolía como se estaba comportando conmigo y no sé por qué me duele…Los siguientes días era lo mismo yo terminaba lanzado la comida que él me traía, lo único que comía era las frutas que me traía una señora, creo que la vi el día que él imbécil me encerró aquí.Llevo encerrada y encadenada cuatro días. Y estoy resfriada, hasta creo que tengo temperatura, mi cuerpo titiritea del frío o tal vez sea porque ya empezó a nevar, hoy no he visto a Kyril y me alegra no hacerlo.Me tiene harta piensa que con sus insinuaciones y provocaciones me va convencer, yo
Cuando llegué en la noche ya había empezado a nevar, Mercedes me dijo que Daniela estaba tosiendo me imaginé que había pescado un resfriado, llame a Jaime cuando él llegó casi que me mata.—Dany despierta —. La remuevo, pero nada que reacciona, golpeó su mejilla con suavidad a ver si reacciona, pero nada.—Maldición Kyril está ardiendo en fiebre —. Me dice Jaime. —Como se te ocurre, ella no es como nosotros —. Me regaña, pero estoy más centrado en llevar a Dany dentro de la casa. —Hay que llevarla a emergencia—.—Tú eres médico puedes atenderla aquí —.—No tengo los implementos para trabajar aquí, necesito hacerle algunas pruebas de rayos x a ver si sus pulmones no están llenos de fluidos—.—Lo ves te lo dije ese lugar no es para ella—. Gruñó ante lo dicho.La subo al auto y voy al hospital... Ya en el Jaime le hace los estudios, sus pulmones están llenos de fluidos estuvieron que ponerle oxígeno, tenía neumonía.Me había sobrepasado, la veo dormida y acarició su rostro. —Te juro que
Narra Kyril.Subo al auto no sé dónde empezar a buscar sin Zeev mis instintos no son nada, es decir sin él no soy nada, por más que trato de comunicarme con el no recibo respuesta de su parte, si él se rinde yo no lo voy hacer ella es mía y no pienso dejarla con ese vampiro.Mi única manera de dar con ella es buscar ayuda en un rastreador no lo pienso mucho y voy al cuartel donde ellos se entrenan.Al llegar bajo del auto y entró. -Alpha-.-Tony necesito de tu ayuda, eres el mejor rastreando-.-Después de usted Alpha-.-Vamos no perdamos más tiempo, es urgente-.-Si Alpha -. Subimos al auto lo pongo en marcha y voy al extremo donde encontré a Dany con ese vampiro.Espero y estén cerca tiene como unas tres horas que se marchó o talvez más, y todo por querer sacarla de mi cabeza y ahora lo único que hago es pensar en ella.-Tendremos que caminar desde aquí este es el olor de la persona a la que buscamos-. Le pasó un retazo de la mascada.Él la olfatea y busca en el aire, si tan solo Zee
-A Rumanía, te acuerdas que te dije que vivo allá-.-Si-. Tal vez haga mal al irme con Julián, pero tengo que hacerlo.Terminamos de desayunar, me levanté con su ayuda aún me siento débil, estuve al borde de la muerte, o mejor dicho bajo las alas de la muerte, todo por un insensible como Kyril Hegel.Al salir del cuarto de baño me encontré con un hermoso vestido en la cama me lo colocoAl terminar de vestirme Julian entra, me mira de una manera que hace que mi piel se erice, no sé si estoy alucinando, pero sus ojos cambian de color, sacudo mi cabeza, talvez tengo temperatura.-Estas hermosa-. Se acerca a mí. -Es mejor que nos marchemos no quiero que se forme una guerra-. Frunzo el ceño.-Una guerra entre quien-.-No me prestes atención a veces digo cosas sin sentido-. Pasa su mano por mi cintura y salimos de la habitación.Bajamos las gradas y salimos de la casa, de solo bajar ya estoy agitada, Julián me suelta y de pronto soy suspendida en el aire, mis ojos chocan con los suyos. -Te
Narra Daniela.-Te quiero para mí Daniela Noor Echeverri solo mía, y no te dejaré-. Habla con la misma posesión que lo hacía Kyril, como si yo fuese algo que se pose así nada más.Toma mis labios de una manera avasalladora que hace que gima y entierre mis uñas en sus músculos.-Julián-. Lo llamo.-Dime Daniela-. Besa mi cuello, su lengua fría me hace temblar. -Pídeme lo que quieras y te lo daré-. Rasga mi blusa y se adueñan de mis pechos.Los chupa así sacándome gemidos, cierro mis ojos y esos ojos negros aparecen, me miran con tanta intensidad que siento que le estoy fallando, abro mis ojos, me remuevo y apartó a Julián.-No puedo Julián-. Cubro mis senos.-Es por él verdad-. Sus ojos rojos me dan miedo.-Ju-Ju Julián, por que tu-. Señalo su rostro, mis dedos y mi cuerpo tiemblan como gelatina.No me dice nada y sale de la habitación azotando la puerta, quedo paralizada, que le sucedía otro loco me había secuestrado a caso, en verdad tenia tan mala suerte con los hombres.Me acosté e
Sus besos me llevan al borde de la locura, quito su camisa, sus besos de manera voraz hace que mi piel queme del deseo que tengo de él. -Julián hazme tuya te deseo-. Mis palabras salen sin permiso alguno.-Si es lo que deseas no te haré esperar mi amada-. Sus dedos pellizcan mi pezón sacándome gemidos.-Aah Julián-. Lo beso para calmar mis gemidos…Narra Julián.Conocí a Daniela cuando estaba en la Universidad, al sentir su olor me di cuenta que ella era mi alma cantú, esa que había buscado durante setecientos años tengo novecientos.Me hice su amigo para estar cerca de ella, pero como ella es muy sociable siempre se la pasaba rodeada de sus amigos, cuando ella lo hacía me apartaba, quería darle tu espacio.Sé que la traume cuándo me posada en su ventana, lo hacía porque su sangre me llamaba y hechizaba, era como un encantamiento que ella tenía hacia mí, su olor me llamaba de una forma que no podía estar lejos de ella, cada vez quería estar más cerca de ella.Al terminar la Universidad
Pero tengo que prepararla primero, es humana y tiene que aprender a controlar sus impulsos cuando la convierta en una de mi especie, mí vampiresa para ser exacto.-Julián ya no puedo yo voy aaa...-Déjate venir Daniela-. Sus uñas fueron enterradas en mi hombro y mis colmillos salieron al alcanzar el clímax, solo enterré las puntas en su cuello.Lamo donde su sangre salía su sabor era exquisito.Me acosté a su lado y la atraje hacia mí. -Sabes lo que acabas de hacer -. Le dije.-Si me acosté con un príncipe, eso es lo que dicen por ahí-. La mire, su pecho subía y bajaba, su corazón bombeaba a su máxima capacidad.- ¿Príncipe? -.-Si, así se refieren los trabajadores de este castillo hacia tu persona-.-Tengo que hablar contigo, pero no será esta noche-. Volví a tomar sus labios.La hice mía hasta el amanecer, talvez se arrepiente mañana no lo sé, pero yo no lo haré…☆☆ Narra Kyril ☆☆Mi pecho duele cada día mas, se que es por la ausencia de mi mate, mi Dany, aún no doy con ella manteng