ANUK
Según Xylon la muerte de mis padres debía suceder para que Aysel naciera, buena forma de justificarse, pero de no a ver sucedido eso... no tendría una compañera, esa es la verdad, estaría completamente solo por toda la eternidad o casi.
Entro en la habitación y su aroma me golpea de llenó, sé que está durmiendo, el latido tranquilo de su corazón y su respiración pausada así me lo hace saber, me reusó a compartir la cama con ella, el Lobo quiere reclama lo que es suyo por derecho, lo que necesita, pero me resisto, es él quien la eligió no yo, no el hombre.
Paso directo al vestidor, en busca de un pantalón de algodón para dormir en alguna otra habitación, mientras más alejado este de ella mejor. Pero antes de llegar a mi destino ella habla.
— No quiero estar sola. – dice en un susurro la
AYSELCaminaba con papá en dirección al bosque, sabía que quería distraerme, pero también estaba curioso por caminar en aquel lugar que una vez fue la tierra de su padre, mi abuelo.— No estés mal hija. – dijo mientras pasaba su mano por mis hombros, a modo de consuelo.— No lo estoy papá, no me importa nada de lo que él diga.— Yo sé que sí, tus genes están tan bien balanceados que no te permitieron nacer con la longevidad de las brujas o la inmortalidad de nosotros, pero están ahí, si él te reconoció como su mate, tú tarde o temprano también lo harás, debes entender que hay cosas que él sabe y tú no, su dolor es lo que hace que te trate así.— ¿Por qué? ¿Qué es lo que me ocultan? – me pregunto qué es lo que ellos sa
Anuk se encontraba en la sala de su pequeña mansión, rodeado de todos los seres que más detestaba sobre la faz de la tierra, pero no era esto lo que más le molestaba o preocupaba.AnukEsto era demasiado para procesar, mi gente me consideraba una amenaza, me querían ver muerto o acabar con mi manada que es lo mismo. Y si la Luna Blanca llega a aparecer lo más probable es que lo logren.— Anuk, permite que nos quedemos, deja que seamos parte de tú manada, se aproxima una guerra necesitas aliados. —No, esto no es lo que quiero, una cosa es soportarla a ella que es mi maldito mate, pero su familia es otra cosa. Antes que pueda responder al pedido del vampiro un grito me silencia.— ¡Caos! —El grito de Moiras me alerta, ella está con Aysel, y antes que su padre haga algún movimiento yo ya me encontraba en la puerta de l
ANUKNecesito tomar distancia de ella, su aroma es distinto, mucho más fuerte y embriagador, su olor me inspira a querer tocarla, joder, me costó muchísimo saber que ella estaba desnuda a solo centímetros míos, tenía tantas ganas de ... saltar sobre ella y hacerla mía, maldición, ¿por qué la marqué?, esa desesperación a perderla todo por el maldito vínculo, que ahora solo se hará más fuerte, me gustaría saber porque no acepté el ofrecimiento del consejo de renunciar a ella, aunque claro, ellos quieren acabar con mi gente y conmigo, son unos cobardes.Por fin llegó a la cabaña y cada vez me asombró más, lo que las ninfas pueden hacer, este lugar está lleno de flores hermosas.Antes de llegar a la puerta encuentro a Xylon, está haciendo crecer árboles de cerezo.&
AYSEL.Ya recorrí toda la casona y no encuentro en que entretenerme, estoy cansada de ver a esas cuatro mirarme de esa forma, una mezcla de odio y asco, como si tuviera alguna peste, por lo que decido ir a hablar con Kalu y Kio.Pero cuando salgo no los encuentro, por lo que decido pasear por los alrededores de la casona, hace días que estoy aquí y casi no conozco ni el jardín.— Hola Luna. — Me giro y veo a un joven alto, moreno, aún su rostro tiene un deje de niñez. — Hola, soy Aysel. — me presento mostrando una enorme sonrisa, quizás no todos me odien.— Tu marca dice que eres nuestra Luna y tu aroma me ínsita a protegerte. — El joven inspira fuertemente y sus ojos se torna más claros, pasando de un marrón oscuro a un café claro.— Sí, supongo que para ustedes la mordida de Anuk la ven de esa forma. No me has dicho tu nombre. – esto es incómodo.— Abel, para servirle mi Luna. — El joven hace una reverencia que me hace sentir incómoda, ¿por qué Kalu y este joven me tratan as
AYSELMiro al rededor y no comprendo que pasa, mi familia está en frente de mí y no hay rastro de las mujeres que me querían lastimar, pero no recuerdo que paso, o porque todos me están mirando. “No te preocupes, tú y yo somos una, yo te cuidare”Podía oír una vez más aquella voz en mi mente.“¿y quién eres tú?”“Yunuen, tu bruja”— Aysel. — Mi madre avanzaba hacia mí, pero un lobo se colocó delante impidiendo su paso, recordé de inmediato, ese lobo color canela con manchas negras, es Abel.— Tranquilo Abel es mi madre. —Aún en su forma de lobo, se comportaba de manera formal, bajo su cabeza y camino hacia atrás, mi madre avanzo y me abrazó.— ¿Estas bien? Vidar olió tu sangre. —la preocupación era obvia en cada palabra.— Estoy bien. —Conteste mientras llevaba mi mano a mi mejilla, no tenía rastro alguno de herida, ya se había cerrado, aunque recordaba el dolor.— Vamos a la casa. — Fue todo lo que dijo Anuk, me miraba aún con más desagrado que antes, y eso dolía, ¿por qué me hací
Aysel.A pasado un mes desde que sé que tengo una bruja dentro de mí, si bien Anuk ya no me trata tan mal, aun así sé que mi presencia le molesta, nos vemos solo en la mesa y luego en la habitación, dormimos cada uno de su lado, pero despertamos abrazados, y las mayorías de veces termino en el piso, ya que cuando Anuk abre sus ojos me empuja lejos de él, dice que soy yo quien lo abraza, pero no es cierto, me he quedado despierta hasta tarde y siempre es él quien me abraza, aunque claro que lo hace dormido, luego durante el día casi no me habla, desde que me dijo que solo me soportaba porque sabía que dentro de mi había un gran poder y que no sería tan estúpido para cedérselo a otro, mi corazón duele.Kio y Kalu son los únicos que hablan conmigo al horario del desayuno, almuerzo y cena. Mi familia también viene durante el día, tr
— ¡Quiero saber que rayos fue eso! — la increpo apenas entraron en la casona.— Fue todo mi poder, y solo un poco del de Travos, él sabe muy bien que soy la abuela de Aysel y por eso se controló de no matarme, no soy rival para él esa es la verdad, pero Aysel sí. — de un momento a otro Minerva miro con orgullo a su nieta.— ¿Aysel? Tu nieta lo único que hizo fue desmayarse. — respondió mientas la dejaba en la cama que compartían y donde él la abrasaba cada noche.— Deja de subestimarla, ella pudo controlar a Yunuen, fue por eso por lo que se desmayó, estaba consiente mientras Yunuen tomaba el control. De no ser por Aysel tú Anuk gran Alpha de la manada Vanagandr, estarías muerto. — escupió cada palabra, para que se le quedaran grabadas.— Esa bruja no podr&iac
En los días que siguieron, parecía que las cosas hubieran mejorado un poco, Anuk ya no era tan hiriente con sus palabras, aunque mantenía la distancia. Habían pasado dos semanas y no tenían noticias de Travos, aunque suponían que estaba tramando algo, Abel por fin pudo convencer a Anuk con ayuda de Kio de que él solo quería ser el encargado de la seguridad personal de la Luna de la manada, por lo que Anuk dejaba salir a Aysel al pueblo, con la tranquilidad que ningún lobo se acercaría a molestarla, fue precisamente en una de las salidas al pueblo con Abel cuando una alarma comenzó a sonar. — Abel, ¿qué es eso? — Aysel miraba a su alrededor asustada, pero todos mantenían la calma, solo cerraban sus tiendas al tiempo que se dirigían hacia un mismo lugar. — No se preocupe Luna, es solo el aviso de que nuestro Alpha impartirá justicia. — Un escalofrío subió por la espalda de Aysel.