Después de sentir el desprecio de mi padre, decidí hacer lo que mejor me salía, fingir que nada me afectaba y que no tenia sentimiento alguno. Hera estaba disgustada con la situación, se hacia la fuerte, pero ella también quería el reconocimiento de ese hombre lobo. En su conexión empezaron a recordar un recuerdo de cuando por primera vez pudo conocer el mundo exterior.
Hasta los 5 años estuve confinada a mi hogar, no me permitían salir de este lugar, mi relación con mis padres era casi nula; mi padre me ignoraba y mi madre solo me miraba con un desprecio que siempre me hizo sospechar que tal vez no sería su hija. Los que se encargaban de cuidarme eran un grupo de viejas Omegas que intentaron hacer lo posible para que no me sienta tan mal las noches que lloraba hasta quedarme dormida en sus regazos, Margarita fue la encargada de criarme era una Omega, pero su personalidad firme y a pesar de su débil estatus en la manada nunca se dejo pisotearse por nadie. Hasta mi padre y el Alfa Reynaldo mostraban respeto. Siempre me pareció raro, pero ella siempre fue la que me demostró un amor sincero no era por mi estatus, era amor real. El día que tuve que ingresar a la escuela primaria ella me preparo, me puso un bonito vestido color durazno que en el dobladillo se le formaban pequeños bolados producidos por la caída de la tela, nada ostentoso, decidió que lo mejor era ponerme unos can-can blanco con unos zapatos estilo bailarina en el mismo tono que el vestido, peino mi cabello con coletas bajas adornadas con una pequeña libélula de oro blanco en cada una de ellas; para terminar mi preparación me aplico una capa de protector solar y me explico que eso protegería mi piel de frio seco.
Cuando termino de prepararme llego mi madre para supervisar de que este preparada para el inicio del ciclo escolar, por más que para ella era despreciable su orgullo no podría permitir de que alguien la asocie con alguien desalineada o de bajo estatus. Miro con desdén y dijo -luce bien-.
Con mis 5 años pensé - ¿qué fue lo tan terrible que hice para merecer este trato?-, pero enseguida recordé lo que me había dicho Margarita – No puedes obligar a nadie a quererte, tu mereces más-.
Bajé las escaleras y vi a mi padre que solo dijo -espero que te comportes, no me hagas sentir avergonzado de tu existencia-. Asentí agachando la cabeza, que más podía hacer.
Llegando a la escuela me sentí completamente aprensiva, nunca había tenido contacto más que con las Omegas del servicio y mis padres. Llegar a un lugar con tantas personas fue como si necesitaba estar en un estado de alerta constante, pensaba que mientras se mantuviera en las sombras y alejada de los miembros de la manada estaría bien.
Mientras me encontraba sola en una esquina del salón principal, vi a un niñito completamente hermoso, bueno en realidad nunca había visto a otro niño.
Ese niño era morocho con los ojos color avellana, además llevaba un traje azul marino realizado a la medida con una camisa en un tono azul cielo que lo hacía parecer como los modelos que había visto en las revistas de moda que leían las Omegas más jóvenes del servicio de casa, tenía una forma de caminar segura que llamaban mucho mi atención quería hablar con él, preguntarle su nombre, quería empezar una amistad. Pero al ver como todos lo consentían quedo claro, que ella no podía aspirar a tener una amistad con él. Era un niño, pero por su atractivo y seguridad podrías imaginar que debía ser un Gamma o tal vez un Beta, alguien a quien claramente no debería acercarse.
Recuerdo previo a la reunión:
Antes de salir de su casa sus padres dejaron en claro que no podía resaltar de ninguna forma, tenía prohibido intentar acercarse a las familias de alto estatus, aunque permitieron que pudiera entablar relación con Omegas. Decidieron no ocultar que era su hija, pero dejaron en claro de que no podía pertenecer a su círculo social, me gustaría saber la razón, pero con el pasar del tiempo dejo de importarme, ya con poder ir a la escuela era feliz. Otras de las condiciones que impusieron tenia prohibido acercarme a la familia del Alfa Reynaldo en especial a ese niño encantador que se convertirá en el líder de la manada en el futuro – Alejandro-, sintió que su vida no valía nada, pero al recordar que al fin conocería el mundo exterior una extraña paz llego a su alma.
Fin del recuerdo.
Mientras intentaba no mirarlo directamente, vi que se acercaba torpemente, sabía que estaba rompiendo una de las reglas de papá, pero no podía evitarlo quería estar cerca de él, pero mientras sentía que poco a poco nos íbamos acercando escuche que alguien lo saludo con extremado respeto -Alfa Alejandro-, el sonrío con altivez y continuó caminando hacia mi lugar. Mi mente estallo, desobedecer a papá acercándome a alguien que no sea un Omega, tal vez me lo permitiría como una travesura, pero intentar un contacto con quien me prohibieron explícitamente no era algo que se le iba a permitir sin tener consecuencias terribles para ella. Su pequeñito corazón latió pesadamente, pero estuvo tantos años atrapada en el lugar al que debería llamar hogar que le daba miedo cometer cualquier insubordinación tan grave que la lleve a perder este poco de libertad que había obtenido, y su amiga Hera le aconsejo que lo más seguro era la distancia. Cuando Alejandro llego al lugar donde ella se encontraba, ella decidió marcar la distancia clavando una mirada tan seca y vacía como la que le entregaba su madre; sabía que era cruel y que él no merecía un ese trato, pero era mejor no desobedecer a papá.
Lo que ella no noto cuando se aparto del pequeño Alejandro, fue la llama de tristeza y amargura que empezaron a carcomer su tierno corazón de niño.
5- Consecuencias.Benjamín observaba cada movimiento de su hijita, era un padre que le negaba cualquier tipo de afecto y nunca podía mirar sus ojitos cuando ella insistía en obtener algo de amor. El como Beta del Alfa Reynaldo tenia muy clara su posición, y aunque en el fondo sentía un profundo amor por esa pequeña, solo pocas personas sabían de su verdadero origen, ella fue el fruto de un capricho del destino, la Diosa Luna puede ser tan cruel y misericordiosa a la vez.Recuerdo de Benjamín antes del nacimiento de Luna: Hace 6 años mi vida era lo que se creía la perfección, al cumplir 20 años encontré a mi pareja predestinada una Kappa llamada Lisa, todo marchaba según lo establecido en las reglas de la manada, eso fue en el solsticio de verano, aunque me hubiera gustado ser emparejado con alguien de mi mismo estatus social, no pude rechazarla las decisiones de la Diosa tienen siempre un propósito mayor. Viendo a la distancia nuestro vinculo nunca debió ser, las cosas continuaron el
Me encontraba en mi elemento al ser la esposa del Beta de la manada, podía ser el centro de atención del lugar, era una simple reunión de inicio de clases. Aunque no me interesa nada que tenga que ver con esa maldita bastarda, tengo que reconocer que agrada ser incluida en este día donde todas las parejas que dicen ser felices se reúnen para afianzar su lugar como miembros de alto nivel, además últimamente estoy siendo responsable de todos los actos protocolares a los que nuestra Luna no puede asistir, claramente es algo que para mí se da naturalmente, muchos dirían que solo soy una Kappa con suerte, pero quiero dejar en claro algo; a veces tanto a la suerte como el destino se pueden moldear a tus objetivos.Recuerdos de Lisa:Hace 7 años conocí a la persona adecuada y aunque el precio que me toco pagar fue alto, no me arrepiento. Al ser una Kappa es muy difícil acceder por medios propios a la élite de la manada. Cuando cumplí mis 18 años encontré en que uno de los Omegas que trabajab
Esa madrugada de invierno singularmente fría me encontraba descasando en mi modesto hogar, no era lujoso, pero mucho más cómodo de lo que podía aspirar una Omega. Los golpes en la puerta hicieron que me levante cautelosa a revisar las cámaras de la entrada, al ver quien era mi corazón se sacudió era uno de mis niños y se lo notaba acongojado. Al abrir la puerta ese hombre lobo de gran tamaño se derrumbo a mis pies pidiendo ayuda, mi querido Beta Benjamín; colapso como cuando empezó sus entrenamientos de combate lo llevaban al límite y el dolor físico era tan agudo que su pequeño cuerpo solo podía soporta hasta llegar a su habitación donde lo estaba esperando para curarlo y reconfortarlo. Ahora mi Beta orgulloso estaba desplomado en mi piso llorando como cuando tenía 9 años. Sin pensarlo bajé a su nivel para mirar sus ojos y tratar de entender que era lo que estaba pasando, dado que fui a quien asignaron de institutriz de Alfa Reynaldo y Beta Benjamín tenía una conexión especial con a
Durante el recorrido matutino de la manada, empecé a notar que en el pueblo los Omegas empezaban a cuchichear entre ellos, a pesar de mi rango siempre me encanta enterarme de todos los chismes. Para un Alfa es importante saber hasta los más mínimos detalles de lo que esta sucediendo con mi gente. Mi compañero de recorrido era Gamma Miguel, pero siendo sincero añoro los días que estos paseos lo hacíamos con mi Beta.Pasaron tantos años y todavía no puedo entender lo que paso, durante y posterior a ese viaje.Recuerdo del Alfa Reynaldo:Luego de entrometerme en donde no me llamaban para posponer el matrimonio de Benjamín, vino a mi mente ese viaje que teníamos planificado para el solsticio de verano siguiente. Si me preguntan soy alguien que sigue los mandatos de la Diosa Luna, pero no soy tan cuadrado y deseoso de cumplir su destino, a un que creo en que cuando ella une a dos personas; debe ser por algún tipo de motivo, al verlo junto con esta Kappa mi instinto gritaba que algo no se e
Me escabullí entre la gente, huyendo del niño bonito, Hera trataba de reconfortar mi maltratado corazón. Tenía 5 años, pero nunca podía anhelar a tener una vida como la de los demás niños; en realidad descubrí ese día el tipo de relaciones que los otros padres mantenían con sus hijos.El tratar de mantenerme como un fantasma me hizo dar hambre, el acto protocolar de inicio de clases no era un evento convencional, era un Drunch, todos los padres e hijos de alto rango están invitados. Aunque la escuela concentraba a todos los miembros de la manada sin importar su rango, es día solo la élite de la manada estaba convocada. Me fui acercando poco a poco a la mesa de los postres “son mi debilidad”, además son lo único que me pone contenta, papá todas las tardes me manda con Omega Margarita una porción grande de algún pastel delicioso; ella me dijo -tú papá no sabe como decirte lo mucho que te ama, por eso es la forma de decirte todos los días lo importante que eres en su vida- eso me hace ta
El aura oscura que envolvía a Alfa Reynaldo, mientras salía del salón escolar era algo que nadie podía explicar. La furia en su rostro era palpable y esto llevo empujar sin medir sus fuerzas a todos a su camino sin importar quien fuera, los desafortunados en su camino fueros lanzados varios metros, entre ellos se encontraba el pequeño Alfa Alejandro.*Mirada de Alfa Reynaldo:Antes de asistir al colegio decidí tener una conversación con Benjamín, necesitaba poner mis pensamientos en orden. Los últimos 5 años nuestra relación fue más que distante; al regresar a la manada el carácter de Benjamín mutó, cambió su personalidad sería, tranquila y con buen temperamento a un ser completamente sombrío, con tendencia agresivas y autodestructivas, pensé que se debía a la boda y luego a tratar de empezar un vinculo de pareja, pero todo se termino de derrumbar el día que se descubrió que había nacido una cachorra de forma inesperada. Nuestra relación se encontraba tensa antes de este nacimiento, p
Beta Benjamín: Destrozado volví a mi mansión, el dolor físico no se podía comparar a la tormenta que vivía mi alma, no solo fui descubierto, el maldito destino conspiro para que me arrebaten a Luna. Mi mente no podía encontrar la solución al problema central, con seguridad puedo afirmar que Reynaldo no estaba dispuesto a restituir la custodia de Luna. Sus ojos me retornaban una decepción y asco que perforaron mi ser. No puedo culparlo creo que todos los castigos no alcanzan para expiar mis culpas. Mi cuerpo se desplomó sobre el sofá, mientras bebía, las imágenes de mi pequeña siendo golpeada y despreciada públicamente insistían en volver una y otra vez. Como si fuera un ratón que se escabulle al menor sonido, sentí la presencia de esa maldita mujer tratando de evitarme. Sin voltear la cabeza, le anuncie con una voz tan áspera y fría que el mismo diablo sentiría miedo – ¡Tienes 96 horas para recuperarla! -, después de eso volví a encerrarme en mi estudio.Kappa Lisa: No puedo cre
12- Retorno.Benjamín observaba la situación desde una esquina, a pesar de su imagen pasiva, por dentro solo quería desgarrar cada centímetro del cuerpo de su esposa, aunque no tenía estima alguna por ella, jamás pensó que fuera capaz de tanta perversidad para lograr sus objetivos. Se sentía asqueado, pero no podía quejarse ya que su pequeña sería devuelta a su lado, aunque eso conllevó a destruir la imagen de su mejor amigo. Decidió retirarse antes de que noten su presencia, todavía no sabía como enfrentaría a su Alfa.Llegué a la mansión directo a encerrarme en mi estudio, no deseaba hablar con nadie, solo hundirme en este espiral autodestructivo que yo había iniciado por mis propios errores. Un golpe suave se escuchó, no contesté, del otro lado de la puerta una voz tranquila susurró – ¿Puedo pasar? A lo que asentí.Margarita ingresó con sutileza, sólo preguntó cuando Luna regresaría, su mirada me devolvía frustración, ella durante estos 5 años intentó que mi relación con Luna se de