Capítulo XXIIILa vuelta a la ciudad de los lobos. Melinda Milet.Después de salir de Otaiwa, con la victoria en toda la ciudad, sin embargo el pueblo no me quería, todos decían que sus vidas habían sido arruinadas por la guerra que yo había causado, y además que ahora los vampiros habíamos alcanzado el punto más bajo de cada uno de nosotros, me señalaron como la culpable de la guerra, como la manzana de la discordia, como la Helena de Troya, la causante de la guerra, pero nada de esto era mi culpa, ¿O sí? Allí empezaron mis dudas. Ver a todas esas personas mirándome de forma escrutadora, mientras que yo no quería ser aquella mujer que era señalada, como la causante de las desgracias tan grandes que habían tenido muchas personas encima, yo no quería ser aquella que fuera señalada como la asesina de vampiros, y aún menos la asesina de los lobos, a pesar de todo lo que sentía por ellos desde hace años, había empezado a querer a Neptuno, quien me había demostrado ser un hombre increíble
Capítulo XXIVLos Hombres rinocerontes ven por primera vez el poder de Neptuno. Después de haber recorrido una parte del camino en silencio, Julius habló; –Bien amigo, la verdad no pensé que tu fueras Neptuno, disculpa por haberte llamado enclenque, estoy seguro que no eres nada de eso, y menos si eres un hombre lobo ancestral. – Por alguna razón pude notar un nerviosismo en su voz, mientras que por otro lado pude notar que las personas corrían desesperadas de un lado para otro –Estamos cerca del lugar dónde se ha librado la batalla más sangrienta de todas, esperemos las señales del otro equipo, cuando la envíen debemos de atacar, esto lo hacemos para atacar tanto por delante como por detrás. –Sí, lo sé. –Respondí mientras lo observaba con una sonrisa de medio lado. Luego una luz de color rojo ilumino el cielo, pude ver que los hombres rinocerontes se preparaban así, que les di la orden a los míos de hacer lo mismo, en unos pocos segundos los licántropos se habían trasformados y t
Capítulo XXVMelinda como miembro Principal del consejo. Melinda Milet. Me fui a descansar, todo el peso la batalla había caído sobre mí, los detalles, la información concreta, además de las decisiones de quien tendrá el mandato de Otaiwa, sin embargo durante la sesión decidí irme, estaba muy cansada, se me concedió el permiso porque Amaray estaba en el lugar, ella podía dar la información que fuera necesaria por mí. Me fui directo a mi habitación, estaba extremadamente cansada por culpa de la lucha que estaba viviendo, la mañana se acercaba más sin embargo sentía que los días eran más oscuros a medida que iban pasando, desde que está absurda guerra que ha empezado ya hace un par de días, pensar que toda mi vida había dado un giro tan fuerte en menos de un minuto, desde que supe que Neptuno era un lobo, todo esto me cambio la existencia, cada una de las cosas que sabía, o que si quiera tenía noción, esto era algo tan extraño, tan pesado en mi mente, estaba en la cama mientras que p
Capítulo XXVINeptuno contra los gigantes.Neptuno Wolf.Estaba luchando contra unos vampiros en la frontera, ninguno de ellos había dejado de lado sus obligaciones como guerrero, mientras tanto los licántropos se habían desaparecido del mapa, yo solo estaba luchando contra puros vampiros, así que la batalla era de cierta forma muy bien, pero sin embargo me sentía realmente muy molesto debido a que los licántropos fueran unos cobardes. La muerte de los vampiros era casi que eminente, cada uno estaba cayendo, uno tras otro, algunos por mis mordiscos, otros por mis enormes garras, algunos por mis patadas y finalmente algunos por mis zarpazos.Después de varios minutos de lucha, cuando pensaba que ya la victoria estaba de mi lado, escuché una gran cantidad de aullidos, Julius enseguida me observó, y los pocos miembros del ejército que había traído para la lucha en la frontera se quedaron observaron en dirección a dónde provenían los sonidos, además de un fuerte olor, yo lo había percibid
Capítulo XXVIIMelinda hacia Neptuno.Melinda Milet.–¿Cómo es posible eso? Los doce gigantes no luchan juntos desde la batalla de Luxury, esto es algo muy grande debemos de ayudar a Neptuno. –Ella tiene razón, los doce gigantes reunidos pueden vencer a Neptuno, puede ser que tenga más que posibilidades contra uno o dos de ellos, pero ya que se encuentre luchando contra más de uno es muy peligroso. –Dijo aquella loba que lo único que empezaba a hacerme era caerme mal. –Señoras, por favor tengan paciencia, este es solo un informe preliminar, además confiamos en Neptuno, él no pidió refuerzos ni nada por el estilo por lo que creo que se encuentra totalmente bien, lo único es que estamos exagerando las cosas. Yo por el contrario pienso que él puede luchar contra los doce gigantes, y no solo eso, sino que también puede salir victorioso, sin un rasguño, he visto como luchan los gigantes, y yo personalmente luché contra uno de ellos en antaño, puede ser que sean grandes hombre y mujeres,
Capítulo XXVIIINeptuno contra Tull.Neptuno Wolf. Ya había acabado con tantas vidas, que se había cumplido aquello que no quería, convertirme en un destructor total, pero por alguna razón esto me gustaba, estaba dejando correr parte de mi verdadero ser, estaba la sangre hirviendo en mi cuerpo a cada muerte me sentía mejor, aunque también me sentía peor, era una sensación que no podía explicar, era una sensación muy difícil, más sin embargo los licántropos que estaban en mi contra caían a cada una de mis patadas, o cuando los partía en dos con mis poderosas mandíbulas, lo mismo pasaba con cientos y cientos de vampiros, hasta que por fin, aquellos que habían traído a los ejército habían decidido luchar. De parte de los vampiros habían ocho vampiros, todos tenían auras muy poderosas, podía sentirlas, todos incluso más fuerte que el aura de Melinda o incluso su padre, eran muy poderosos estos hombres, otros pocos estaban con ellos aún me tenían miedo, pero sin embargo parecía que iban
Capítulo XXIXAntes de la lucha.Melinda Milet.–Tenemos muchas cosas que hacer. Primero debemos de atacar a los gigantes, así estoy segura de que Neptuno tendrá más tiempo y estará mucho mejor para luchar contra el resto de los vampiros, además de que tenemos la determinación de acabar con algunos de los lobos que tienen que hacer las cosas con forma más estricta de la normal, más sin embargo teneos que tener operaciones de forma muy características y de forma muy cuidadosa. –Estaba dando órdenes hasta que me percaté que las órdenes que había dado no estaban del todo coordinadas, así que debía de calmarme.–Señora, ¿Puede por favor repetir las órdenes que está dando? –Me dijo uno de los soldados, no me sentí muy bien al respecto, así que tenía que calmarme para empezar a dar de nuevo órdenes importantes que tengan que ver con todo el sistema, respiré y continúe con todo lo que tenía que hacer. –Deben de preparar las fuerzas, nos vamos a concentrar en atacar a los doce gigantes, lueg
Capítulo XXXLa lucha del poder. Neptuno Wolf. Estaba sin una pizca de sangre sobre mí, pero todo yo estaba cubierto por ella, había acabado con todos los vampiros, lobos, y algunos aliados de estos que vinieron a luchar contra mí… respiré profundamente y luego miré al cielo, lo que sucedía era debido a que la mayoría de los seres vivos de la tierra, querían el poder, ansiaban el poder, sin mirar en ninguna dirección, y todo lo que era vida, o amor, o paz, o cada uno de los aspectos de los seres humanos, en los aspectos individuales quedaban opacados por el poder que daba cada uno de los individuos, o mejor dicho, que cada uno quería obtener. Al final del camino, cada uno de los individuos tomaba decisiones basadas en el poder, el poder sobre los demás. Al final… sobre cada uno de nosotros se imponía el poder animal, sobre el humano, aunque el humano era más salvaje que el animal en muchos más aspectos, era algo que no terminaba de comprender, el poder que tenía cada uno de los ind