Capítulo XLIIEl culpable.Neptuno Wolf. Después de haberme cuestionado tantas y tantas cosas gracias a Merlín, estaba sentado en las afueras de la casa, por primera vez, desde que había empezado todo esto, podía apreciar el cielo sin tantos cuestionamientos en mi mente, pero de igual manera muchos otros cuestionamientos habían empezado, por lo que estar al tanto de la vida que teníamos a nuestro alrededor, era una parte que me había olvidado de apreciar, amaba escuchar el sonido de cada uno de los insectos que me rodeaban, de las aves, el sonido del viento mientras que chocaba contra las hojas, entre millones de otras cosas más, como el olor de la tierra, además del olor de los nidos de las abejas, era tan dulce, el olor de algunas flores, amaba tanto disfrutar de todos estos pequeños detalles que la guerra me había quitado. Merlín me había dicho que si me despejaba la mente, iba a lograr tener una mayor visión de todo lo que estaba sucediendo, así iba a lograr buscar soluciones mu
Capítulo XLIIILos pueblos.Melinda Milet. Después de haber ayudado lo más que pude a todas las personas que se encontraban en el suelo, aquellos vampiros inexpertos en el arte de la lucha y la guerra, tuve tiempo para que los sabios del pueblo me invitaran una cena, eso como muestra de agradecimiento por la ayuda, además iba a dejar una cantidad considerable de soldados en caso de que ocurriera algo similar. Ellos me agradecieron mucho, el pueblo en general, muy distinto a aquello que me había sucedido en Otaiwa, pero la batalla de Otaiwa fue mucho más brutal que en este pueblo que era mucho más pequeño que aquella ciudad. –Señora, acá tiene, este un plato exquisito preparado por el mejor cocinero de todo el pueblo, esta es la primera muestra de agradecimiento por haber venido a salvarnos de esos bárbaros. –Un hombre me sacó de mis pensamientos, colocó frente a mí, un plato hermosamente decorado, era una especie de pasta con carne, pero su olor era realmente exquisito. Me iba a dis
Capítulo XLIVUna parte de la guerra. Neptuno Wolf. Morgana seguía pensativa sobre la mesa, el resto de los puestos seguían vacíos a pesar de que ya había enviado el mensaje a los demás del consejo para que se unieran lo más pronto posible, pero al parecer en algunos lugares las cartas no habían llegado, ahora también me preocupaba el hecho de estás revueltas en el mundo de los vampiros, o mejor dicho en su reino. De repente los magos entraron por la puerta principal y cada uno de ellos tomó asiento. Los observé. –Señor, una pregunta ¿Puede darme algo de comer? Tengo un poco de hambre. – Me dijo el mago más joven, lo miré un poco extrañado, pero si alguien me pedía comida no iba a decirle que no, por lo que me levanté y caminé en dirección dónde había una especie de cocina, y allí estaban unos panecillos los tomé, los coloqué en un plato y tomé un poco de jugo, y lo lleve hasta la mesa, justo cuando iba saliendo a la sala principal había un gran grupo de personas que estaban entran
Capítulo XLVUna parte de la guerra. Parte II.Melinda Milet. La guerra había vuelto a aparecer a mí alrededor, pero sin embargo no tenía idea de que estaba sucediendo, solo escuchaba gritos, pasos por todos lados de personas que iban y venían por todos lados, mi cabeza estaba a reventar, y sin embargo no había estado consciente en los últimos minutos, o horas, o no sé cuánto tiempo había pasado, al mirarme estaba atada por todos lados, mis manos, mis pies, y con una especie de cadena que ataba mi cintura a mi cuello, y luego iba hasta mis pies. –¿Qué…sucede? –Logré decir, tenía mucha sed.–Señor, está despertando. –Escuché decir a una voz que jamás había escuchado en mi vida. –Idiota, Neptuno va a matarte y lo sabes. –Escuché decir a Julius con un tono irritado.–Cállate. – Escuché la voz fuerte y grave que estaba cerca de mí, pude sentir como se acariciaba mi cabello –. Es realmente tan hermosa como me habían dicho, y ahora es solo mía. Traté de moverme, pero las cadenas eran mu
Capítulo XLVIEl abrazo de un amante. Neptuno Wolf. Estaba tan molesto, pensé que podía perderla. Cuando el mensajero me dijo que ella había sido capturada por uno de los líderes de los clanes, enseguida salí como una bala por la puerta de la sala, y luego al estar fuera me transforme de un salto, dejé soltar mi olor, no en máxima potencia porque sabía que eso haría que algunos murieran, y no quería eso, quería torturarlos yo mismo, no sabía qué le habían hecho a Melinda, y estoy seguro de que no perdonaría a nadie que fuera capaz de tocarle un pelo a la mujer que amaba, a pesar de que se había ido muy lejos no había dejado ningún segundo de seguir su aroma, no dejé que se fuera del todo y lo mantenía en mi mente para poder llegar a ella en caso de que algo así sucediera. Corría lo más rápido que podía, aunque sé que mi velocidad no era normal, acaba de tomar dimensiones casi que desconocidas, sabía que ese lugar quedaba algo alejado, pero estoy seguro de que no me tomé ni diez min
Capítulo XLVIIEl castigo a los traidores.Melinda Milet. Justo unos segundos después de que Neptuno terminara sus palabras ocurrió que llegó a la puerta mi padre. Me miró con los ojos un poco llorosos, mientras que una gran cantidad de guardias y guerreros entraban en la sala y tomaban a los guerreros de Siridían, y algunos tomaban al mismo Siridían. –Hija, gracias al creador que estás bien, estaba muy preocupado por ti, estoy muy molesto por el hecho de que Neptuno no nos hubiera avisado a todos, pero gracias a él no te paso nada, además pudimos llegar tan rápido a este lugar gracias a la magia de Merlín. Él hija mía, es el auténtico Merlín, aquel del cual se hablaba en millones de leyendas y aquel que ha venido tantas y tantas veces ayudarnos para que el mundo sea un lugar. Es uno de los hombres más maravillosos que puedes conocer. Y a usted señor Merlín, le pido todas las disculpas posibles por no haberle creído desde el principio. –Nos dijo mi padre, primero a mí, y luego a Mer
Capítulo XLVIIIEl castigo de Neptuno. Neptuno Wolf. Todo esto me estaba consumiendo, y sabía muy bien a lo que Merlín se refería a cada una de sus palabras, estuve a punto de acabar con la existencia de todas las personas que estaban presentes en ese lugar, aquellos que le habían hecho daño a Melinda, cada uno de ellos tenía que pagarlos, pero había un factor muy real, aún a ella no le había sucedido nada, por lo que ella estaba bien, así que mi venganza era más por querer, era un sin sentido. –Señor Neptuno, tenemos que hablar de nuevo, pero debe de ser en privado, no le diré nada en público. –Me dijo Merlín con una expresión seria de nuevo en su rostro después de haber tenido la sonrisa en su rostro, ahora estaba un poco molesto, y sé que era por mí, y mi conducta. –Bien, no hay problemas. Además quiero caminar hasta casa. –miré a Melinda y a Vanessa –. Ustedes por favor quédense acá, esperen que la situación sea del todo controlada, y esperen a que lleguen los vehículos, ya es
Capítulo XLIXEn el pueblo, después de Neptuno.Melinda Milet. Para Mí, todo lo que había sucedido me había hecho cuestionarme muchas cosas, agradezco que Neptuno hubiera llegado justo a tiempo para poder salvarme, pero en realidad mi mente estaba muy pensativa acerca de la reacción del pueblo al sentir su presencia. No sé si antes la habían sentido, pero ahora me preocupaba verlos. –Lo mejor será recorrer el pueblo para evaluar lo que ha sucedido. –Le dije a Vanessa, ella solo asintió, así que empezamos a caminar por las camineras del pueblo, vimos que en las casas las personas hablaban con algunos de los guardias de mi padre, y al verme me hacían una referencia y me daban las gracias a gritos, por otro lado algunos otros se asomaban a la ventana solo a verme, algunos niños me saludaban muy entusiastas, y sus padres a través de las ventanas me hacían una reverencia. Un grupo de niños se acercó corriendo y me entregaron un hermoso y muy frondoso ramo de flores, esto me alegro muchí