―Alastor, los coches están listos ―dijo Neilan, quien entraba apresuradamente a la casa―Gracias Neil ―dijo Alastor antes de besar la mejilla de Iva ― ¡Anna! ¡Ya es hora! ―― ¡Estoy lista! ―exclamó la joven al mismo tiempo que bajaba las escaleras a toda prisa ―Ay, como extraño a Sandrine ―susurróAquella noche, la joven princesa había optado por un sencillo vestido tipo halter de color lavanda, el cual, en la parte superior, estaba cubierto de un bonito encaje de pequeñas flores, mientras que la falda, era ligeramente plisada.―Hermosa ―dijo Alastor acercándose a la escalera para poder ofrecerle su mano ―Te ves muy hermosa mi pequeña princesa ――Gracias papá ―respondió Anna con una radiante sonrisa―Muy bien, ya que estamos todos listos, es hora de irnos ―dijo Máximus dirigiéndose a la salida arrastrando los pies―Por favor, compórtate como un rey ―lo reprendió Idylla―Ares tiene razón, enviemos a Ragnar por Bastián, podremos saludarlo mañana temprano ―gruñó Máximus con irritación ―
―Eso es cariño, ten cuidado ―le dijo Alastor a Iva, quien luchaba por bajar del auto con elegancia, sin embargo, la loba estaba fallando miserablemente―Te lo juro Alastor, este par son los últimos ―gruñó la mujer con irritación―Está bien vida mía, como tú digas ―dijo Alastor intentando contener su risaY es que, ¿no había sido su compañera la que le había dicho que quería más hijos?― ¿Príncipe Alastor? ¿Es usted? ―preguntó el hombre que había tomado las maletas―Sí, soy yo ―respondió Alastor examinando al hombre con atención ― ¿Quién eres tú? ――Por Selene… ―susurró el hombre, el cual, debido a la sorpresa, dejó caer ambas maletas―Papá, Lysander dice que es el beta David Fotia ―le dijo Anna en voz queda― ¿David? ¡¿David Fotia?! ―preguntó Alastor cortando la poca distancia que quedaba entre ellosDeshecho en lágrimas, el hombre asintió con torpeza.―Por la diosa, claro, ya te recuerdo ―masculló Alastor ― ¡Haz cambiado mucho! ――Los tiempos cambian muchacho, uno debe adaptarse ―dij
Por inercia y por la dureza en su voz, Máximus se enderezó antes de dedicarle una profunda reverencia al hombre que tanto le había exigido en su vida, sin embargo, Bastián no dijo nada, sino que soltó un gruñido irritado, provocando que Máximus se tensara al dirigir su mirada hacia él.― ¿He hecho algo malo, excelencia? ――Sí, hiciste algo terrible ―gruñó Bastián como respuesta―Bastián, cielo ―susurró Petra―Ven aquí ―le exigió Bastián pasando del comentario de su compañeraObediente, Máximus caminó hacia su abuelo, sin embargo, lo que sucedió después lo tomó completamente desprevenido.Sin previo aviso y sin palabra alguna, Bastián capturó a su nieto en un fuerte abrazo, provocando que la sorpresa se viera reflejada en el rostro del rey.― ¿Bastián? ―lo llamó Máximus ―Qué… ¿Qué rayos haces? ――Lo siento Max, no debí haber sido tan duro contigo ―respondió Bastián apretándolo ligeramente― ¿Qué…? ――De no haber sido por mi actitud, no nos habríamos distanciado, y tal vez, sólo tal vez
―Vamos vida mía, debes descansar, hoy dormiste poco ―dijo Alastor acercándose a Iva ―Ah, hijo, ¿podrías regresar con tu hermana y los demás? ――Claro papá… ―susurró el cachorro, quien parecía tan sorprendido como los demásA diferencia de su hermana, Ares no sabía muchas cosas acerca del pasado de su padre, pues siempre le decían que aún era demasiado joven para cargar con su historia, sin embargo, pese a su corta edad, Ares sabía con certeza que su padre, Alastor, odiaba profundamente a su tío Arioch.― ¿Qué diablos fue lo que averiguó el alfa en Arleth? ―preguntó Lysander en voz baja cuando comenzaron a andar de regreso a la camioneta―No lo sé, pero debió ser algo muy impactante ―dijo Anna clavando su mirada en la espalda de su padre―Lo sabrás muy pronto sobrina ―dijo Zeth también con voz queda ―Mi padre… Arioch, de verdad es una víctima en todo esto ――Ah. Es verdad, el alfa te llevó con él ―dijo Lysander―Por favor, tío Zeth, dinos que fue lo que pasó ahí ―pidió Anna acercándose
―Claro, como no podías recordar nada, Alex y yo dejamos el tema ―dijo Lysander antes de soltar un gruñido molesto ― ¡Esa bruja! ――Según lo que les sacó el alfa, cuando Tabatha descubrió la verdad, tú te convertiste en su objetivo, por lo que Samael tuvo que ir modificando sus planes para complementarlos con, “las tonterías” de su hermana ―― ¿Q-Qué hay de ti? ―le preguntó Lysander a Zeth al ver que Dante hacía lo posible por mantenerse en control ― ¿Por qué masacrar a tu manada? ――Aún no tengo una respuesta para eso ―suspiró Zeth ―En realidad, eso era lo que el alfa estaba intentando averiguar cuando Cole llegó a la celda e interrumpió el… Bueno, el interrogatorio ――Parece que los métodos del alfa te han dejado frito ¿eh? ―le preguntó Lysander, quien justo tomaba el sendero que llevaba a la finca―Es como ver a un lobo completamente diferente ―dijo Zeth sacudiéndose la sensación de escalofríos antes de cerrar los ojos ―No vi ni un ápice del alfa amable que conozco ――Te entiendo ―s
Con un suspiro fastidiado, Alastor se detuvo y se giró hacia su padre, quien frunció el ceño ligeramente.―Ya lo conoces papá, Iktan vive de manera más modesta ―dijo Alastor ―Tiene su fortuna, claro, pero decidió vivir más discretamente, de no ser por su compañera, él podría vivir tranquilamente en su forma de lobo ―explicó negando con la cabeza suavemente ―Sabrías eso si te hubieras molestado en mirar el correo que nos envió Elián hace un rato ――De acuerdo, suficiente ―gruñó Máximus sacándose su teléfono del bolsillo y tendiéndoselo a Dante, quien lo observó confundido ―Explícame como funciona esta endemoniada cosa, hoy mis nietos no están correteando por toda mi finca, no puedo distraerme ―Divertido, Dante rio antes de comenzar a explicarle lo básico de aquel modelo, sobre todo, le mostró como podía acceder a su correo desde una aplicación.Sin entretenerse mucho con otras cosas y queriendo saber más sobre Iktan Nicolaou, Máximus abrió el correo y procedió a leer la información qu
La primera en entrar fue una hermosa mujer de cabello dorado como la miel, el cual, llevaba recogido en un elegante moño.― ¡Máximus! ―exclamó emocionada antes de correr a los brazos del rey ―Bendita sea nuestra diosa ――Está bien tía Claire, todo está bien ―susurró Máximus― ¿Estás seguro? ¿De verdad te encuentras bien? ―preguntó la mujer sujetando el rostro del rey con sus dos manos ―Ay, querido, luces delgado y muy pálido ――Eso se debe a que no he tenido el tiempo para ponerme en forma, pero muy pronto lo haré, solo debo terminar con el ciclo de tinieblas que cubrió mi vida ―dijo antes de dirigirse en dirección de Alastor ―Creo que recuerdas a mi hijo ――Por supuesto que sí, aunque, bueno, era sólo un bebé cuando lo vi por primera vez ―dijo Claire con una sonrisa ―Recuerdo que tus ojos eran los más brillantes que jamás había visto en toda mi vida, en ellos, podía percibirse perfectamente tu amor y emoción por la vida, me alegra ver que nada de eso se ha perdido todavía ―― ¿Cómo p
Extrañado por sus palabras, Máximus inclinó su cabeza ligeramente antes de acercarse a él.― ¿De qué se trata hijo mío? ―preguntó con curiosidad―De verdad me alegra que nuestra situación se aclarara, y es que, sinceramente, te eché mucho de menos ―suspiró Alastor ―Cuando Anna nació, tuve miedo y muchas dudas, tus consejos me hicieron demasiada falta… ――Yo también te extrañé mi cachorro, como no imaginas ―dijo Máximus cubriéndolo entre sus brazos―Te quiero, papá ―susurró Alastor, quien se aferró a Máximus como cuando era un cachorro ―Vuelvo a pedirte disculpas por haber dudado de ti ――No te disculpes más hijo, ya no importa, ¿te parece si comenzamos a olvidar? ――Me encantaría ―dijo Alastor separándose ligeramente de él―Vale, entonces, ¿Qué te pareces si vamos a tomar nuestro almuerzo? Me acaban de decir que Philip y Atenea llegarán en dos horas más ――Ah, me gusta como piensas ―asintió Alastor ―Sin embargo, no me apetece salir, que tal si le dices a Kelly que nos pida algo ――Cla